11. [Noche de películas]

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— ¿Cuándo llegamos hasta este tema?

— No lo sé, pero me gustaría escuchar tu respuesta. — Reproduje la película "In the between" que estaba en el top 3, al ser una de las más vistas este mes.

— No lo sé, tal vez que me quiera, me trate bien, que sea romántico y le guste tomar mi mano...

— Que salga contigo a pasear y no de vez en cuando como papá — Continué yo. — Que haga que te sonrojes con solo verlo porque recordarás todo lo que él te haga en la oscuridad.

— Atlas...

— Que te hable al oído, que logre que te erices sin llegar a tocar tus puntos húmedos, que con un beso te prometa lo que vendrá después de que te quites la ropa, que sientas las ganas que te tiene porque nadie te cuidará como él. No mereces menos que eso Adeline — Ella asintió sonrojada, yo deseaba que encontrara ese hombre rápido, que lo encontrara en mí porque ella aún no sabía todo lo que sería capaz de hacer por sentir su piel contra la mía, sin barreras de por medio.

— Gracias por eso — Habló ella con dificultad, sabía que papá jamás sería capaz de darle eso, su sueño caliente de amor.

— Sabes, cuando era un niño...

— ¿Qué? — Preguntó ella, se sentó en el sofá y me invitó a ver la película juntos, aún tenía mucho trabajo que hacer, pero en eso momento mi corazón sintió que era más importante estar a su lado, aspirando el dulce olor a vainilla de su cabello.

— No puedes reírte Adeline... — Advertí — Cuando salía a jugar solo al patio, comía tierra por pura casualidad, no sé que pensaba en ese entonces pero... — Adeline no aguantó y explotó de la risa, me reí también con ella porque no sabía que tenía la tierra, pero la había probado dos veces.

— ¿Cómo quieres que no me ría? — Volvió a reír — Es que es muy gracioso.

— Ahora dime algo vergonzoso para estar iguales,lo merezco.

— Mi mamá me dejó cuando era muy pequeña, la abuela dice que ella se fue después de que yo naciera.

— Adeline...

— Solo quería contártelo, ambos estamos sin mamá.

— Gracias por confiar en mí. — Dije, tenía sentimientos encontrados porque mi madre tampoco estaba conmigo y aún peor; ya no estaba viva.

— Gracias por compartir conmigo hoy, tu papá se va todo el día y casi no viene a dormir, estoy muy aburrida de estar sola en casa, tal vez quiero estudiar algo e invertir mejor mi tiempo.

— ¿Qué te llama la atención?

— No lo sé, fui mesera en el pueblo y...

— Adeline, veo a una chica preciosa que es muy talentosa, algo te debe de gustar.

— Siempre pensé en llevar las cuentas de la granja de mis abuelos, así nadie nunca nos robaría y...

— ¿Contabilidad? — Ella asintió — te verías hermosa vestida de traje formal.

— Tal vez quiera tomar un curso de contabilidad en una universidad, un técnico que dure menos de un año.

— No me gustaría que fuera en mi universidad porque...

— Lo sé, te daría vergüenza que estudie contigo, no es normal ver a tu madrastra todos los días en los pasillos de una universidad — Asentí, era mejor que pensara eso, lo que ella no sabía era que yo no quería que estuviera a mi lado, estaría distraído todo el tiempo y vigilándola de Marco, él amaría acompañarla a todas partes.

« No quería sentir celos »

— Puedo ayudarte a encontrar una universidad que esté 100% calificada, que sea suficientemente buena en la formación académica de sus alumnos, hay que ver las reseñas y...

— Muchas gracias.

— No es nada Adeline, si quieres estudiar sería perfecto. — Continuamos viendo la película, ella estaba poniendo mucha atención a la pantalla y yo solo pensaba en lo que ella llevaba debajo de su bata para dormir, era muy imbécil por pesar así, pero yo no la veía como mi madrastra.

« Era una hermosa y sexy chica a mi lado »

De un pronto a otro, la pantalla parpadeó tres veces, las luces se apagaron y quedamos en tinieblas.

— Atlas ¿Qué pasó? — Me preguntó ella, rápido se acercó a mi lado buscando protección.

— Se fue la luz, voy por mi teléfono — Me levanté del sofá y Adeline me siguió a mi habitación. — No puedes subir conmigo, no se ve nada y te puedes caer.

— No me dejes sola.

— Tengo que buscar mi linterna para...

— Por favor.

— Bien, ven conmigo — Tomé su mano y rogando a la vida de que no me resbalara al subir las escaleras, continuamos subiendo para llegar a mi habitación.

Adeline estaba muy pegada a mí, sentí sus senos presionando contra mi espalda y eso no era nada bueno porque era un distracción.

— Adeline... — Ella iba a responderme y se resbaló, tomé rápido su cintura para que no se cayera, con la oscuridad no podía ver bien, pero escuché su respiración acelerada y me di cuenta de que no había tomado su cintura.

En lugar de eso acaricié sus muslos, la tenía sujeta de su pelvis y mi mano estaba adentro de su bata, podía sentir claramente sus bragas rozando la palma de mi mano.

« Eran bragas muy delgadas »

« Podía sentirlo todo »

« Estaba húmeda »

— Atlas...

— Lo siento, no quise...

— Fue un accidente — Dijo ella y yo aún tenía mi mano dentro, acaricié una vez más por encima de su panty para luego sacar mi mano.

La luz mágicamente volvió, rompiendo nuestro momento.

El momento en el que sentía una conexión con ella, con su alma.

— Lo que pasó...

— Tú misma lo dijiste, un accidente del que no debemos hablar. — Dije.

— Gracias por ayudarme con la película, hablaré con Hernán para que me busque una universidad de calidad.

— Me alegro de verdad.

— Gracias, buenas noches — Ella se apartó de mí y continuó subiendo  a su habitación.

— ¿No terminarás de ver la película?

— La veremos después porque quiero terminarla contigo — Sonreí como un imbécil cuando escuché eso, asentí hacia ella y esperé a que se fuera para chupar mi dedo, el que había estado encima de su humedad.

« Me estaba volviendo loco »

« ¡Joder! »

« Casi cometo una locura »

No sabía que sería de mí después, pero lo único que sabía era que definitivamente me gustaba esa chica, me gustaba mi madrastra aunque a veces no lo quería admitir.

« Ella era la indicada para mí »


(..........)






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