El origen de todo

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Después de haber finalmente confesado mis sentimientos por kacchan me dispuse a ir con mi madre, no podía simplemente quedarme de brazos cruzados después de lo que escuché, necesitaba, no, exigía una explicación, después de un rato buscándola finalmente la encontré en uno de los pasillos, estaba acompañada de mi padre

—¿Cariño?- dijo papá al verme—¿Porque saliste de tu habitación?

—¿Es cierto no es así?—mire a mi madre, ella me miró desconcertada— Ese maldito lunático es tu hijo—solo podía llamarlo así pues la idea de llamarlo hermano me provocaba náuseas

—Tn yo...-dijo ella, y antes de que pudiera decir algo más la interrumpí

—¿Lo es?-exclame, no quería vanas explicaciones, ella me miraba con remordimiento, hubo unos segundos de abrumante silencio, hasta que por fin hablo

—Si...-contesto, sentía aquella rabia volver, intentaba calmarme pero simplemente era imposible, apreté con tanta fuerza los puños que sin darme cuenta había provocado pequeñas heridas en las palmas de mis manos—Pero...tienes que escucharme, yo solo...

-¡No quiero que me des tus malditas excusas, no quiero escuchar nada de ti!-exclame nuevamente- ¡Todo esto es tu culpa, toda la mierda que ha pasado es por culpa tuya, no tienes idea de cuánto te odio!

—Tn, ya basta, no es su culpa—Dijo mi padre intentando calmarme

—¿Estás de su lado acaso?—no podía creer lo que escuchaba

—No estoy del lado de nadie, solo quiero que me escuches—mi madre le interrumpió está vez

—Yuto, está bien—me miro nuevamente — Entiendo que me odias, me ha quedado muy claro desde hace mucho tiempo, pero quiero que por lo menos escuches que fue lo que realmente sucedió, por favor...

Luego de unos segundos analizando finalmente accedí

—Bien...—conteste, ella suspiro antes de continuar

—Todo sucedió cuando recién cumplí los 18, yo salía con tu padre en ese entonces...

*Flash back*

—¿Estás segura que no quieres que te acompañe a tu casa?—Pregunto el azabache

—Estoy bien yuto, solo vomité, quizá algo me cayó mal, no exageres tanto, además sabes que no le agradas a mis padres—Contesto la peli blanca

—Si, creo que eso me quedo muy claro el día en que tú padre me dijo a la cara que no le agradaba y que era una deshonra para tu familia—dijo yuto con una sonrisa burlona—Aun asi estoy preocupado por ti, te veías realmente mal

—Yuto deja de preocuparte, no me voy a morir, estoy bien—Un pesado suspiro salió de los labios de la peli blanca

—De acuerdo...—Contesto yuto no muy convencido— Te veré está noche entonces, nos vemos cariño— concluyó despidiéndose con un corto beso en los labios

La pálida nego con una pequeña sonrisa, a veces se preguntaba el cómo ese chico tan tonto e inmaduro que detestaba había terminado siendo su novio, instantes después su sonrisa se desvaneció, realmente estaba preocupada, antes de irse a casa pasaría a la farmacia, tenía ciertas sospechas que quería aclarar, últimamente los malestares estomacales acompañados de mareos eran frecuentes, tras unos minutos de caminata llegó a una de las farmacias más cercanas a la escuela

—¿En qué te puedo ayudar?—pregunto con amabilidad una de las trabajadoras del lugar, ritsuko tomo valor para pronunciar aquellas palabras, tomo una bocanada de aire y hablo

—¿Podría darme una prueba de embarazo?—la mujer un tanto sorprendida asintio y busco aquel producto

—¿Que edad tienes niña?—Pregunto la mayor

¿Mía? bakugou/Todoroki y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora