¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Rebecca se encontraba en la terraza de la casa de Lylian, una casa cerca de la playa en donde podia ver el atardecer perfectamente, como tanto le gustaba, la mezcla del color naranja con el color azul y obviamente no podia faltar el toque rosa que tenía este, el color que tanto le recordaba a la chica de su hermano. La chica que tanto le gustaba a ella, sabia que no podía gustarle, era la novia de su hermano o bueno ex-novia, pero no podia evitarlo, LaRusso era tan diferente a ella que terminó gustándole, ella no era como sus anteriores novias o como su actual novia.
Lylian era rebelde y sensual, nada tímida, muy enojona cuando algo le molestaba mucho. Samantha no era tan diferente,ella era sensible, lo sabía por que habían hablado por instagram, pero ella sin dura era tímida, lo descubrió el día de su encuentro en el baño como se sonrojó con su simple presencia.
Eso fue una de las tantas cosas que le gustaron de ella, era igual de rebelde pero solo lo era cuando estaba con sus "amigas" ,Regina George y Gretchen Wieners, como ella las había apodado, era mas que evidente que las chicas no le caían bien. Una suave caricia en su desnudo hombro interrumpió sus pensamientos.
— Buen día,cariño —murmuró la sensual pero suave voz la peli-negra, mientras seguía acariciandola, haciendo que la morena girará levemente su cabeza mirándola.
— Buen día — respondió la chica girando por completo, para después tomar la cintura de esta acariciando levemente.— ¿Como dormiste?.
— Perfectamente, cielo. — contestó sacándole un sonrisa a la morena siendo correspondida por la peli-negra.— Me siento tan segura a tu lado becky, me haces demasiado feliz, cielo.
Mas no recibió respuesta de la chica Díaz, solo un abrazo y una sonrisa sincera que para ella significó todo. Pues Rebecca no acostumbraba el contacto físico.
—Te quiero Lylian, nunca te dejare sola, lo prometo.— murmuró la mayor volviendo a abrazarla. Se sentía de la mierda, ella sabia que aquella promesa no la cumpliría, no durante su tiempo en All Valley, no con la castaña de lindos ojos cerca de ella. Por esa razón, decidió cortar totalmente el lazo que tenia con la ojiazul. Haría completamente feliz a su bella novia.
[•••]
Pocas horas después, las chicas se encontraban caminando hacia el lugar donde sería el torneó, al llegar se encontró con sus amigos y hermano, aunque este un poco alejado entrenando, sus golpes se veían mas fuertes de lo normal.
—Tranquilo Miguel, te dislocaras el brazo, eso es lo que debiste hacer esa noche — exclamó recibiendo una mirada molesta de todos y un golpe en el brazo de parte de su novia por lo dicho. — Lo siento...quise decir que debes dejar un poco para el torneó.
— Ni te molestes —le dijo Aisha —. Ha estado enojado desde que rompieron.
—Esa chica es una perra total.— habló molesta la peli-negra, recibiendo una mirada de Rebecca.
