Uno se levanto rápido para golpearla pero ella dio una vuelta para después dar un salto e impactar su pie en la cara del chico.

-¿De do de sacaste esos movimientos de Kungfú?.-preguntó Tyler viendo como los jóvenes peregrinos se quejaban de dolor.

-Mi tío me enseño. Paso cinco años en un monasterio tibetano.-respondió Merlina.

-¿Tu tío era un monje?.-inquirió.

-Prisionero.-aclaró ella para después observar como Dylan fruncía él ceño.

-Será mejor que nos vayamos, de lo contrario la directora nos va a terminar encontrando.-pronunció él, sin embargo bufo molesto al ver como él sheriff.- Olvidalo...-susurró.

-Tyler, ¿Qué esta pasando aquí?.-preguntó el Sheriff.

-Los estaban molestando y los pusieron en su lugar.-respondió haciendo que el sheriff mirara a Dylan primero y después a Merlina.

-Me imaginó que solo él.-Dylan negó con la cabeza, nunca le gusto "lucirse" en algo.

-En realidad Merlina hizo la mayor parte y ahora tenemos que irnos.-resistió él impulso de agarrarla de la mano e irse de la cafetería ya que estaba seguro que él terminaría peor que aquellos chicos.

En ese mismo instante entro la directora Weems mirando a los chicos aun tirados, su mirada se dirigió rápidamente a Merlina.

-Me disculpo, sheriff. Ella se me debió escapar.-Weems sonrió nerviosa.-Señorita Addams y señor Sinclair. Nos vamos.-agrego viendo a ambos. Él papá de Tyler detuvo a Merlina ganándose una mala mirada de Dylan.

-Momento, ¿Eres una Addams? No me digas que Homero Addams es tu padre.-Merlina asintió con la cabeza en respuesta.-Ese hombre debería estar preso por homicidio, supongo que de tal palo, tal astilla. Voy a vigilarte.-dijo con desagrado.

-Lo mejor será irnos.-hablo la directora para agarrar a Merlina y a Dylan de los hombros para que salieran de la cafetería.-No puedo creer que se metieran en problemas sobre todo tu, Dylan.

-Ellos llegaron molestando.-repuso Dylan en tono resignado aunque agradecía haber perdido su sesión de terapia.

De camino de vuelta a la academia, Weems los regañaba a ambos, pero resaltando él comportamiento de Dylan. Ya que ante la directora estaba sorprendida por como causo problemas junto a Merlina.

-Es tu primer día y ya te vigila él Sheriff Galpin. Y tú Dylan pensé que eras más sensato...-Weems ya no siguió hablando debido a la interrupción de Merlina.

-Usted, solo ve lo que Dylan muestra.-pronunció ella, haciendo que la directora frunciera el ceño con desconcierto, mientras que él castaño solo sonrió de lado.

Sabía a lo que Merlina se refería, sin duda era la primera en darse cuenta. La percepción que tienen de ti supone una enorme carga, la mayoría del tiempo pasaba la mayor parte de su vida preocupándose por no romper moldes ni sobresalir. Sin embargo aquello lo estaba llevando a ser infeliz, algo que negaría en voz alta.

¿Donde había quedado "ser positivo"?

No importaba las circunstancias al menos perdió seción de terapia y se divirtió un poco en la cafetería. En la carretera Dylan vio como él humo blanco salía de un camión rojo.

-Parece un accidente. Esperó que él conductor este bien.-pronunció la directora.

-Murió.-habló Merlina, mirando por la ventana.-Se rompió él cuello.-agregó segura de lo que decía.

Aunque Dylan estaba en la parte de atrás, entrecerro los ojos ligeramente ¿Como lo supo? Definitivamente algo ocultaba Merlina. Si bien no era su asunto no entendía porque su interés en ella.

Al llegar a Nunca Más, antes de irse a su habitación. Merlina lo detuvo agarrándolo por él hombro.

-¿Qué pasa?.-preguntó con duda, al tiempo que se volteaba a verla.

-Me ayudarás a escapar ¿cierto?.-ella solo quería asegurarse que así fuera.

-Probablemente me meteré en problemas, pero si te ayudaré ya te lo había dicho ¿Tienes un plan?.-inquirió Dylan aunque también quería preguntar sobre lo que pasó con esa camioneta. Pero presionar a las personas nunca le resultaba y esta vez quería hacer las cosas bien.

Merlina miro un lugar mas oculta y para sorpresa de él, lo jalo de la mano. En si la sensación resultó extraña tanto para ella como para Dylan.

La cuestión es que este noto como algo pareció moverse en la mochila de Merlina, por lo que decidió preguntar que tenía adentro.

Una mano salio de la mochila sorprendiéndolo.

-Dylan, él es Dedos.-Aclaro Merlina observando la sonrisa entusiasmada de él.

Dylan empezó a hablar con una expresión relajada en su rostro sobre lo increíble que debía ser tener a Dedos. Él portaba una camisa de color beige y aunque odiaba todo tipo de color, probablemente no lo admitiría en voz alta pero ese color le quedaba bien.

 Él portaba una camisa de color beige y aunque odiaba todo tipo de color, probablemente no lo admitiría en voz alta pero ese color le quedaba bien

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
𝑪𝒐𝒍𝒐𝒓𝒔 | Merlina AddamsWhere stories live. Discover now