Transmigrando al amigo de la infancia carne de cañón del rompecorazones

Capítulo 83

"No, no es necesario que me expliques. Todavía tengo que darte las gracias por crear un ambiente tan agradable para que Xie Sui y yo estemos solos."

Qin Mo se sorprendió.

Song Yu dijo: "Si no fuera por esta obra tuya, no habría sido capaz de reconocer mi propio corazón."

Qin Mo lo miró fijamente, las comisuras de sus labios se fruncieron lentamente, como si no quisiera hablar del tema, y dijo: "Espera un momento, ¿quieres beber algo?"

"No, ¿no has querido siempre hablar conmigo?" Song Yu simplemente abrió la claraboya* y sonrió: "Entonces hablemos. Para ser claro contigo, incluso si no le gustara a Xie Sui y no estuviéramos juntos, no sería tu turno. ¿Jugar con los sentimientos de los demás es algo que te da placer? ¿La familia Qin te enseñó ese placer de tan bajo nivel?"

(*'Abrir la claraboya y hablar claramente', lo que significa que no hay necesidad de esconderse y evadir, simplemente hay que decir la verdad con claridad.)

La apariencia amable de Qin Mo no podía mantenerse por más tiempo, desde el momento en que Song Yu mencionó a Xie Sui, una ira sin nombre se estaba extendiendo.

Ahora las palabras de Song Yu lo golpearon aún más, sus pupilas abatidas contenían una tormenta.

Song Yu enganchó perezosamente sus dedos en la taza sobre la mesa, como si estuviera diciendo algo aburrido y poco interesante: "Ni siquiera entiendo de dónde viene tu sentido de superioridad, por favor, deja a un lado esa mentalidad de juego de caza. Incluso si quieres perseguir a Xie Sui, ¿cómo puedes compararte conmigo? ¿Personalidad, apariencia e incluso antecedentes familiares de los que siempre has estado orgulloso y que te ha permitido hacer lo que quieras?"

Qin Mo golpeó con los dedos la mesa, finalmente fue el primero en enfadarse, con un tono burlón: "No te toca a ti preguntar sobre a quién sea a quien yo persiga."

Song Yu se puso de pie lentamente, sus párpados estaban delgados y sus ojos eran agudos y fríos cuando miraba a la gente: "Si no te hubieras precipitado a la muerte, crees que me habría fijado en ti."

Qin Mo: "En lugar de preocuparte por esto, deberías preocuparte por tu enfermedad." El tono de su voz que había subido por la ira bajo en ese momento, sus ojos se mostraron fríos y mezquinos mientras sonreía significativamente: "Si tienes una enfermedad terminal, no actúes de manera tan casual, si no tienes cuidado y mueres, perderás más de lo que ganarás. ¿No lo crees, Song Yu?"

"Perderás más de lo que ganarás." Song Yu repitió sus palabras en voz baja. Echo un vistazo a lo que había sobre la mesa, dos botellas de vino costosos, sus ojos se alzaron ligeramente: "Me dijiste que me sentara y bebiera algo, ¿así que piensas darme de beber vino?"

Qin Mo dijo sarcásticamente: "¿Te atreves?"

Song Yu no respondió a su pregunta. Se burló y sostuvo una botella de vino en su mano: "Te estaba diciendo tonterías antes porque pensé que te darías cuenta de que no puedes conspirar contra mí, en lugar de eso me has hecho darme cuenta de lo que pienso de Xie Sui, probablemente te enfadarías hasta la muerte."

Qin Mo lo miró fijamente, sus músculos se tensaron, su respiración era entrecortada y su piel temblaba.

Song Yu dijo suavemente: "No me atrevo."

La fría luz blanca brilló sobre el adolescente, que se irguió, alto y delgado, como un fuerte pino verde. Sosteniendo la botella de vino, sus muñecas delicadas y pálidas, con venas azules débilmente visibles.

"Creo que conoces mi segunda debilidad, no puedo beber."

Las pupilas de Qin Mo se ensancharon ligeramente, sus dedos agarraron involuntariamente el borde del sofá.