Creating a Legacy

Sargento Bray

-¿Sus padres biológicos se arrepintieron?- ahora la voz de un hombre extraño preguntaba.

-No, antes de que ella naciera fallecieron, la pareja quiso enviarla pero sus abuelos biológicos no querían la responsabilidad así que les pagaban cada mes para que siguiera lejos-

-Pero ahora está en el país, ¿cómo terminó en servicios infantiles?- la señora que sonaba amable volvió a hablar.

-La pareja dejó de recibir el pago y la enviaron, de sus abuelos no sabemos nada, no los pudimos contactar así que ha estado 3 años de familia sustituta en familia sustituta-

-Esperamos entonces poder darle un poco de felicidad mientras esté con nosotros-

-Sé que así será, ustedes son nuestros mejores voluntarios-

El ruido de sillas se escuchó seguido de pasos yendo hacia la puerta, corrí hasta uno de los bancos antes de que se pudiera abrir, y cuando lo hizo, una señora bonita con un vestido azul me sonrió al igual que el señor alto y con un traje verde gracioso de los que usaban los que iban a la guerra.

La señorita Abraham caminó hacia mí y se puso a mi altura para darme la noticia.

-Lily, ellos son la señora Bray y el Sargento Bray, cuidarán de ti-

*******

El vuelo se hizo corto en cuanto empecé a hablar con la señora a mi lado, era de Nashville, al lugar donde me dirigía y me dio una lista de lugares que debía visitar. Incluso intentó arreglarme una cita con su nieto pero tuve que declinar la oferta.

Rentar un auto al bajar del avión había sido todo un reto que duró más que el vuelo en sí pero al final tenía cómo transportarme.

Dejé mi bolso en el asiento de atrás en en la camioneta y coloqué la dirección en el GPS, después de todo, me había ido de aquí a los 14 así que no tenía idea de dónde quedaba todo.

-Yo aquí, ¿quién allá?- respondí al tercer tono de mi teléfono colocándolo en altavoz mientras conducía.

-¿Ya llegaste?- la voz de Aaron sonó desde el otro lado de la línea.

-Sí, voy en camino al campamento-

-No puedo creer que dejé ir sola al peligro al volante- dijo con diversión.

Ya solo lo decía por molestar, tal vez aún tenía un par de pesadillas respecto al trauma que le generé, pero lo estábamos resolviendo.

-No me registré como agente del FBI así que no te preocupes, lo que rompa no te toca pagarlo-

-¿Cómo te sientes?- cambió de tema, aunque probablemente era el principal por el que me había llamado.

-¿Honestamente? Nerviosa. Es tan raro regresar a este lugar pero ya estoy aquí así que..-

Entré a la ruta llena de árboles, cada vez reconocía más. A los pocos metros el cartel de "Bienvenidos al Campamento Militar de Nashville" marcaba mi destino.

-Estoy llegando así que te llamaré más tarde- informé.

-De acuerdo, estaré pendiente- una serie de ruidos se escuchó de su lado, me quedé en silencio hasta que de nuevo escuché su voz -Hailey y Jack te mandan un abrazo- sonreí a aquello mientras me estacionaba.

-Diles que gracias, cuando regrese yo los invito a cenar- suspiré -Gracias por llamar-

-Sabía que era lo mejor para que no estuvieras sobrepensando en el camino- asentí de acuerdo -Te vemos mañana, Brenn-