Secuestro, Juegos y Amor... ¿Hay algo peor que eso?

Capítulo 2. La decisión y sus consecuencias

Pov. Chishiya

Me encontraba todavía afuera de la Oficina del jefe, seguí pensando sobre lo que me acababa de decir, me sentía impotente por no poder hacer nada, si no cumplía con lo que me decía me van a despedir, pero si Hiro no recibe su transplante ahora puede morir y yo no quiero vivir con ese sentimiento, pero también está mi hermano, Daisuke necesita un transplante pronto.

Shuntaro...-le hablan a Chishiya-

Tan metido estaba en mi pensamientos, que no note cuando alguien me estaba hablando, hasta que me gritan al oído

¡Shuntaro! -me gritan al oido-
¡Oye! ¿que te pa... -volteó a verlo- Oh, Makoto, eres tú
Pues claro, ¿quién más seria? -me pregunta-
No lo sé, tal vez, Daisuke -le digo de vuelta-
Él no puede salir de su habitación, ¿recuerdas? -me comenta-
Si recuerdo, pero ya conoces a Dai, le da igual las reglas y más cuando quiere libertad -le digo con burla-
-se ríe- Bueno, no puedo argumentar nada ante esa lógica, pero ese no es el caso, ¿que paso? -me vuelve a preguntar-
Porque lo dices -lo vi confundido-
Te vi muy pensativo, por eso me acerque, para ver qué tenías y ver si puedo ayudarte -me comenta-
Verás...

Terminé contándole acerca de lo del transplante, le conté a detalle, tal y como me dijo el jefe y como me sentía con el tema, que quería ayudar a ambos pero no sabía cómo.

Vaya, si que es un tema muy complicado -me dice-
Si -suspiro- la verdad no se que hacer -le digo-
Mira, tú siempre has hecho lo que crees correcto, sin importar las consecuencias, tal vez ésto es más complicado debido a que, la vida de tu hermano esta en juego, pero yo sé que tú vas a hacer lo que crees que es lo correcto, independientemente si tu hermano es una de las partes implicadas -me dice con una sonrisa- además puedes hablarlo también con Daisuke y ver lo que el te dice, de ahí, tomas una decisión y haces lo que tu corazón te dice que es lo correcto -termina de decir-
Muchas gracias Makoto -le doy un abrazo-
-corresponde- No tienes nada que agradecer, se que tu hermano es mi mejor amigo, pero, tu también eres mi amigo y si te puedo ayudar en lo que sea y pueda, siempre lo voy a hacer -se separa del abrazo- Ahora ve y habla con Dai
Claro, nos vemos Makoto -me despido-
Nos vemos Shun -se despide de vuelta-

Me sirvió mucho hablar con Makoto, es un gran amigo, me alegro mucho que Dai tenga un amigo como Makoto a su lado, ahora voy a hablar con Daisuke sobre este asunto, aunque ya se lo que tengo que hacer, pero saber lo que Dai piensa sobre este asunto es importante para mi.
Ya me encuentro frente la puerta de habitación de Dai, obvio primero tocó, para ver si esta despierto o no

-tocó la puerta- Dai, ¿puedo pasar?
Adelante -escucho que dice- ¿paso algo? -me pregunta-
-entro- en realidad, si -le hago saber-
¿Qué pasó? -me pregunta preocupado-
A mi, nada, no te preocupes, lo que pasa, es otra cosa -me acerco a su cama- es sobre tu transplante
¿Que pasa con eso? -me mira confundido-

Empecé a platicarle sobre lo que me dijo el jefe, luego le dije lo que estuve pensando cuando salí de la Oficina, le comenté que me encontré con Makoto en el pasillo, que le había contado todo y por último lo que Makoto me había dicho

Y ahora quiero saber que piensas tú -le digo-
¿Lo que pienso yo? -me mira intrigado-
-sólo asentí-
Que te puedo decir Taro, pienso lo mismo que Makoto -me dice- solo tú sabes lo que tienes que hacer, si los demás piensan que esta mal pero tu sabes que es lo correcto, entonces que importa lo que te digan, sea la decisión que vayas a tomar, yo siempre voy a estar de tu lado -me agarra la mano- se que lo estas dudando por que mi vida esta en riesgo, pero, yo puedo aguantar otro mes esperando un transplante, Hiro no, y yo no quisiera que cargaras con el peso de una muerte, sólo piensa muy bien sobre tu decisión y las consecuencias que está puede traer -me acaricia el cabello de forma cariñosa-
Lo sé, yo sé a lo que me arriesgo, pero vale la pena el riesgo y las consecuencias, si puedo salvar la vida de un pequeño, que me confío su vida y yo no pienso fallarle -le digo muy seguro-
-ríe muy sutil- Ese es mi hermano, siendo tan amable como siempre, cada día me siento más orgulloso de ti -me da un beso en la frente-
Y yo me alegro de tener un hermano como tú a mi lado -lo abrazó-