Never Again.

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Una suave ventisca meneaba las hojas de los árboles de aquella isla. Era de noche, y las luces de los hogares estaban en su mayoría apagadas, pocas eran las tabernas que seguían abiertas, con sus barras llenas  de gente alcoholizandose, y sus damas repartiendo la bebida mientras meneaban sus caderas, dulce licor que nubla a la gente y calienta sus cuerpos en días tan fríos como el presente.

Un hombre rubio de abrigo de plumas y gafas, estaba rodeado de damas, con una copa en mano y apenas sonriendo, tenía ya tanto tiempo que no estaba en uno de esos lugares... Era un lujo, un privilegio, realmente añoraba esas épocas de libertad, antes de que es estúpido niño apareciera... Pero estaba bien, ahora podía empezar de nuevo, una oportunidad más para dominar a la maldita humanidad. Estaba perdido en sus pensamientos, no le daba mucha importancia a la gente que lo rodeaba, sinceramente no tenía ganas de conversar con ellos, parecían de poco intelecto y realmente no le agradaba la gente tonta. Hasta que la entrada de un hombre llamó su atención, pues al abrir la puerta una leve ventisca acompañada de arena llegó hasta él.

Bajó sus gafas apenas para observarlo bien, un abrigo de piel colgaba sobre sus hombros, el humo del puro lo rodeaba, su cabellera negra y brillante, peinada toda hacia atrás y un enorme garfio de oro. ¿Era ese hombre que tanto le gustaba? ¿Qué probabilidad  había de encontrarlo en esa isla? Sonrió, pues su destino había hecho eso mismo, y no iba a dejarlo sonriendo solo. Siguió con la mirada al hombre del abrigo: llegó a la barra y pidió lo que parecía ser un Bloody Mary, apagó el puro, se quitó el abrigo y dio un trago a la bebida cerrando los ojos. El rubio de gafas sonrió un poco, era sublime observarlo, tan refinado, pulcro; definitivamente era ese el tipo de persona que más le agradaba, nada de prostitutas baratas o mujeres de alcurnia, no, nada era mejor que un pirata con un gusto exquisito, confiado y con un exuberante placer al dolor.

Dejó a las damas y a los tipos que lo rodeaban, sin decir palabra y sorprendiéndolos, pero no por eso dejaron de beber y decir idioteces. El rubio se acercó a la barra donde estaba aquél hombre que tanto le gustaba, y se sentó a su lado.

-Pero miren lo que trajo la marea, ¿Estás perdido, Croco-chan? - Empezó la conversación el rubio que rebasaba los tres metros. Después de eso pidió un Tequila Sunrise, para tener una especie de excusa para estar en la barra, además de hablar con el hombre de garfio, por supuesto.

-Doflamingo. - Habló con esa voz profunda que poseía el pelinegro. - No había sentido tanto asco desde que comí langosta en mal estado. No te sentó bien la prisión, te ves más demacrado que de costumbre. - Sonrió con malicia, algo que el menor tomó bastante bien.

-Búrlate lo que quieras, Crocodile, escapé del nivel seis sin necesidad de aliarme con el tipo que me derrotó. - Sonrió haciendo que el más bajo gruñera. - Ouh, ¿yo no debía saber eso? - Preguntó inocente, Crocodile miró a otro lado, dándole la espalda y remarcando que deseaba terminar con esa conversación. - ¿Qué haces aquí, Crocodile? Tu no eres del tipo que anda de taberna en taberna en islas irrelevantes, además, estoy seguro de que este no es tu tipo de ambiente, es demasiado bajo para alguien de tanta clase como tu.

-Deja de adularme, sea lo que sea que quieras no te lo daré. Y mis motivos aquí no te incumben.

-Leí de tu alianza con Mihawk, debo admitir que me pone un tanto celoso. - Hizo un puchero y pasó su brazo por los hombros de Crocodile. - ¿Qué ya olvidaste cuando tú y yo hacíamos equipo? Solíamos ser muy buenos. Escuché que no tienes los recursos que solías tener, y yo también tuve bastantes bajas por el mocoso, pero si trabajamos juntos podremos recuperarnos rápido.

-No me interesa. - Crocodile se apartó de su lado bruscamente, para que el rubio dejara de abrazarlo por el hombro, marcando distancia. - Mi alianza con Dracule es justo lo que necesito, no quiero problemas por tipos tan llamativos como tu. - Cerró los ojos convencido mientras se encogia de hombros. - Además, ya te lo dije, la única manera en la que trabajaría contigo, sería que fueras mi subordinado.

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⏰ Last updated: Apr 29 ⏰

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