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31/01/23

El corazón de zenitsu estaba devastado, se sentia inútil, débil y sobre todo traicionado, el menor aun no asimilaba las palabras de ese patán, solo queria regresar a su casa y no tener que portar un traje que odiaba y estar cerca de kaigaku casi todo el dia.

Era como su esclavo y lo odiaba.

-¿Zenitsu sigue sin comer? -dijo kaigaku a uno de sus guardaespaldas.

-Aun no da un bocado señor. -dijo el señor mientras acomodaba el plato de kaigaku.

-Caprichoso... -dijo entre dientes.

-

Zenitsu estaba sentado en un rincón de esa habitación que tenia mil camaras, porque debia estar aqui, cuidando de su abuelo traicionero.

-¿Porque no veniste? -Pregunto kaigaku abriendo la puerta con molestia - te vas a morir de hambre, mocoso.

-Y que. -dijo con arrogancia -ni que te importara...

Kaigaku chasqueo la boca y fue rápidamente hacia el agarrando directamente su cuello para estrangularlo, sintiendo como ponia fuerza en su mano.

Zenitsu trataba de quitar la mano pero tontamente podia estaba perdiendo oxígeno de forma rápida.

-Te dije que vas a comer, te lo ordena tu amo y no acepto un no por respuesta. -dijo soltando su cuello y jalando su cabello.- si no harás caso a las buenas, te voy a educar a las malas, niño malcriado.

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Zenitsu miraba con lágrimas aquellas marcas en su cuello blanco con remordimiento.

Como habia acabado en ese lugar, solo queria regesar a casa y visitar a sus amigos una vez más.

-No te sientas mal con el amo kaigaku... -dijo un chico más joven que zenitsu.

Optó por no decir nada y lo miró.

-El es bueno, si te portas bien el será bueno contigo. -dijo sonriente poniendole vendas en las manos.

Zenitsu solo miraba las acciones del menor y continúo mirando sin decir una palabra.

-¿Zenitsu cierto? -pregunto tímidamente guardado las vendas y mirandolo.

El mayor asintió.

-Un gusto me llamo katashi. -dijo mostrando una sonrisa gentil.

-Un gusto...- dijo al fin hablando.

Continúo limpiando sus heridas, su mente estaba nublada y nisiquiera tenia el tiempo de pensar en ese traicionero que era su abuelo.

No quería ni siquiera verlo, ahora era esclavo de alguien que ni siquiera conocía, pero no negaba que era guapo, realmente atractivo y odiaba sentir atracción, porque le encanta cuando kaigaku le pegaba.

Era un sentimiento que queria borrar de su mente y sobre todo de su ser, debería estar asustado para el trabajo al que lo mandarian.

-Zenitsu te manda a llamar el amo.- dijo la mano derecha de kaigaku.

Sin objeción y sin salir alguna palabra fue sin más que decir, mientras caminaba pensaba en que seria de el, su carrera, su vida social, la casa de sus padres... No quería perder el único recuerdo que tenia de ellos, solo con pensarlo estaba derramando lagrimas tratando de ocultarse de forma inútil.

Sin percatarse de que habia llegado a esa grande habitación con una puerta demasiado grande de un color café chocolate, toco tres veces hasta escuchar el famoso "pase".

Estaba todo muy oscuro, nisiquiera entraba la luz, solo miraba a todos lados teniendo la misma repuesta, le hizo recordar todos esos amargos momentos donde en su vida pasada habia estado en una habitación igual.

Sintió como alguien habia bloqueado su boca con una corbata y lo atraía hacia el.

Sin poderse soltar, sintió como una de las manos de su agresor tomaban sus caderas agresivamente sin dejarle escapatoria.

-Te estaba esperando... Mi pequeño esclavo.-



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Holaaa una disculpa por mi ausencia realmente he estado algo inestable y también ando con mi escuela, necesito salir.

En fin les traigo el capítulo de esta trágica historia.

No sabemos que pase pero uy se viene fuerte.

Disfruten, comenten.

Chauu

Pd. Disculpen las faltas ortográficas

La Ambición, El Sexo Y El Amor [KaiZen] [omegaverse] Where stories live. Discover now