Desesperanza

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Shinjuro veía a través del cristal la cría que ha nacido, no siente nada, no siente amor hacia ese pequeño ser inocente que no tiene ni la más remota idea del motivo de su existencia, solo estaba ahí en una incubadora, dado a que fue un cachorro muy grande un parto natural fue un poco difícil, natural en un cuerpo tan pequeño como el Kamado,

Esa cría significaba el fin de su gobierno, el fin del mando, el fin de su poder, kyojuro no se despegaba del burdeos, cuál estaba en cama dormido por su larga noche, para ellos, el cachorro con nombre junai era reglado de navidad, se sentían en las nubes, inmensa felicidad,
Claro que ....a Shinjuro le da igual,

viendo que todos estaban distraídos, hurto a su propio nieto, todo lo había planeado muy bien,
Pues ni su hermano ni siquiera su hijo menor podían entrar al hospital más que el, reglas son reglas, tomó ventaja de ellas, sería algo bastante rápido no es así??
Pero....el es incapaz de matar su propia sangre, se maldice a si mismo si la sangre Rengoku llegase a estar en sus manos,

Aunque bueno, ya conocía la historia del Burdeos, no era estúpido, debía conocer el Omega que se acuesta con su hijo, lo investigó todo ese tiempo y vaya, sorpresa fue saber que este tenía pareja antes de pisar su territorio,

Shinjuro salió con el bebé en brazos a la puerta tracera del hospital, ahí lo esperaba una camioneta que recién compró, solo por este momento, condujo un largo tramo,
Miraba de vez en cuando a esa cría, que tan maldito corazón frío debes tener para no sentir amor, ni remordimiento, no al ver sonreír al pequeño recién nacido, cuál aún tenía sus ojitos cerrados,

Cómo no podía amar la descendencia de su propio hijo mayor ? Al parecer no, por qué después de más de media hora conduciendo se estacionó en la recidencia de un anciano reconocido Sakonji Urokodaki, sabía bien que ese anciano ya no vivía, así que su nieto se quedó con lo que había,

El rubio tomó un sobre naranja y al cachorro, bajó tranquilo del vehículo y tocó la puerta repetidas veces, hasta que un joven de ojos de un melancólico azul abrió la puerta,

-señor ... Eh...puedo ayudarle con algo ?

-bueno.... Dejarme pasar para hablar sería un exelente comienzo sabes ?

El muchacho asintió y se apartó un poco, no desconfiaba de una persona cuál tenía un bebé en brazos....verdad ?
Shinjuro entró tranquilamente, esperando a que el joven cerrase la puerta

-bien....iré al grano, me imagino que no entiendes que pasó con Tanjiro Kamado

-bueno.... El no me ha respondido los mensajes hace tiempo.... No lo sé señor, supongo que me terminó,

-no sientes ..rabia ?

-en su momento, pero si el no quiere estar conmigo está de más querer obligarlo

El mayor solo reía ante sus palabras, le dió aquel sobre, busco asiento para poder descansar la espalda, después de todo ya la edad causaba estragos

-esto... Que es ??

-el motivo por el cual te dejó, adelante puedes abrirlo

El azabache lo hizo pero hubiera querido no hacerlo, eran fotografías de quien era su pareja y el amor de su vida teniendo sexo con otro hombre, habían miles de fotografías y en todas siempre se veía tan....feliz, no sabía que sentir al respecto, si ya no lo quería y quería irse con otro debió a verle dicho no es así?? No creía merecer tal cosa

-bueno....y usted que busca con esto ?? .... Burlarse de mí ?

-no sientes la irá apoderarse de tu corazón ??

Preguntó con cierta cizaña, y bueno giyu no sentía odio o algo similar solo.... tristeza, no decía nada ni mostraba emoción alguna,
A Shinjuro le pareció convincente su expresión nula ante toda la situación

Necesitamos un Príncipe Where stories live. Discover now