. ݁ ✦ ݁ .⠀FINAL POINT. ⠀⠀ ͏͏͏͏͏͏ ͏͏͏͏͏͏ ͏͏͏͏͏͏〔 Chirisu 〕

⠀⠀ ͏͏͏͏͏͏ ͏͏͏͏͏͏ ͏͏͏͏͏͏ ͏͏͏͏͏͏★ ͏͏͏͏͏͏⠀⠀000.

Extendió la mano, esperando que Arisu la sostuviera.

Un momento de silencio absoluto, muy apenas podía escucharse de fondo el parloteo de la gente que transitaba por las calles, junto con el ruido de los autos y motos. Era un ambiente frío pero agradable, digno del invierno que se les venía encima.

La mente del pelinegro maquinaba para pensar en qué decisión tomar. ¿Ponerle un punto final a su vida o continuar con ella y sobrellevar el dolor? No podía decidir entre la una o la otra.

━Ya no tengo casa...

━Puedes quedarte en la de Tatta o en la mía━ sugirió el muchacho más bajo, se inclinó un poco y Arisu levantó la cabeza para observarlo, ━vamos, tengo los dedos fríos.

Finalmente, luego de aquella pequeña conexión de miradas que tuvieron el de ojos negros se atrevió a tomar la mano ajena, sintiendo de inmediato una corriente eléctrica recorrer el brazo al rozar aquellos dígitos fríos, su cuerpo tembló, aunque terminó por afianzar el agarre y levantarse del suelo.

━Tatta seguramente está dormido, vamos a mi casa.

Ambos hombres emprendieron camino hacia la zona residencial del menor, el silencio profundo en el que se sumió la situación le permitía a Arisu repasar lo que había pasado recién. Todo transcurrió tan rápido que su cerebro aún estaba en estado de shock, completamente sorprendido por haber estado a punto de morir de esa forma.

Pero estaba completamente seguro de su decisión, ¿por qué había cedido así de rápido?

Escuchó el sonido de un yesquero y volteó la cabeza, su sorpresa fue mucha al ver a Shuntarō encendiendo un cigarrillo. Guardó el mechero en su bolsillo y dejó escapar el humo que había retenido en sus pulmones, luego devolvió el cigarro a sus labios. ━No esperaba ver a un doctor fumar.

━La mayoría de personas lo hacen, es dañino, pero ayuda a relajar la mente y combatir el estrés━ murmuró el muchacho al mismo tiempo que el humo se escapaba de su boca, parpadeó varias veces, había consumido alcohol esa noche y no se encontraba del todo sobrio, ━ahora entiendo mucho mejor a Hikari.

Arisu asintió en silencio.

Jamás había estado de esa forma con Chishiya. Eran amigos, por supuesto, pero no al punto de querer salvarse la vida al otro, muy apenas se dirigían la palabra y era gracias a los amigos que tenían en común.

Habían perdido tres, sólo quedaban dos.

El malestar se adueñó de su mente otra vez, quiso llorar, pero se tragó la molestia de su garganta y demostró silenciosamente que era una persona fuerte. Gracias a Shuntarō, sus ganas de seguir adelante habían renacido.

━Gracias, Chisiya.

━Es mi trabajo salvar vidas.

━No estabas en horario laboral━ escuchó la risa de Chishiya y algo dentro de él se removió. Su risa era tan parecida a la de Usagi.

Se dirigió nuevamente al cuerpo en movimiento de su amigo. El perfil de Shuntarō era bastante atractivo, con la mandíbula perfilada y aquella manzana de Adán que le hacía ver mucho más masculino. Sus párpados casi estaban cerrados, y la esclerótica rojiza, quizás por el sueño, el cigarro o por alguna otra cosa que haya consumido antes.

Por alguna razón, algo en él le hacía recordar a su difunta novia. Como aquella vez que estuvieron caminando en la calles después de una fiesta donde Usagi había ingerido todo tipo de cosas, era una muchacha atrevida.

A pesar de lo mareado que se sentía por los vasos de cerveza que cargaba encima, no podía dejar de admirar el rostro de Usagi de perfil, esos ojos casi cerrados y rojos, con esos labios hinchados y el cigarro entre ellos. Usagi le miró, dejando escapar el humerio y dándole luego una sonrisa. ━Te ves gracioso tambaleándote así, deberíamos irnos.

━No, no quiero━ titubeó el muchacho, agarró el cigarro ajeno y lo tiró a un lado para posteriormente acercarla hacia él. Sus labios rozaron, y bastó con un par de segundos en contacto rígido para que se juntaran como rompecabezas y se movieran lenta y dulcemente, Arisu acariciaba la cintura de la más baja.

━Te amo demasiado, aunque estés todo borracho━ susurró tras separarse la deportista, sacándole en el proceso una pequeña risa a su pareja.

━Yo también te amo.

Cuando regresó a la realidad, se dió cuenta de que ya estaban por llegar a la residencia de Chishiya, quien ya había botado lo poco que quedaba del cigarrillo a un cesto de basura.

Tras llegar, Shuntarō le permitió al mayor por dos años que hiciera lo que necesitara. Tomó un baño caliente, comió un sándwich que el rubio platinado le preparó y se acostó en el futón que había sido preparado para él, al lado de la cama de Chishiya.

━De verdad te lo agradezco━ no podía dormir, se mantenía sentado en el fino colchón mientras observaba a la nada misma, con la cabeza ligeramente inclinada hacia la cama. Estaba tan fuera de sí que dudaba si realmente era real o no lo que estaba sucediendo.

━Ya duerme, mañana debes buscar trabajo para que dejes de ser tan fracasado.

Arisu no respondió y Shuntarō se acurrucó entre las sábanas en busca de calor, no costó mucho para que cayera en los profundos brazos de morfeo. En cambio, Ryōhei miraba al techo en busca de una respuesta a su duda.

¿Por qué no había elegido ponerle punto final a su existencia?

Un suspiro escapó de sus labios y se dedicó a tratar de dormir, relajando su cuerpo entero en el proceso. Desvelarse sólo le haría perder aún más la cabeza.