Después de masajear el coño de Julia con mi rodilla ya no habíamos hecho mucho. Ese día la rubia me dejó caliente con la excusa de que se iba a meter a la ducha y mientras se bañaba escuché unos gemidos colarse por debajo de la puerta.
Me frustraba estar caliente, me había masturbado con una de sus braguitas sucias puestas pero no había sido suficiente, la necesitaba a ella y tenía que conseguirla ya.
Ese día íbamos a bajar a la piscina, yo llevaba un bikini blanco que al estar en la luz del sol o en contacto con líquido hacía que se notaran mis pezones a través de la delicada tela al igual que mi coño. Julia por otro lado llevaba un traje de baño completo de color rosa claro.
No nos habíamos dirigido la palabra en toda la mañana ni vuelto a hablar de lo que había pasado cuando llegué.
-Tengo hambre
Julia me volteó a ver y sin contestar a mi demanda verbalmente, se dirigió a la cocina, la escuché buscar entre los cajones y aproveché para empezar a tocarme, llevé mi mano a mi coñito y empecé a frotarlo de arriba a abajo sobre el biquini, empecé a sentir cómo se ponía pegajosa mi rajita y se hinchaba cada vez más mi clítoris, seguí así por unos minutos hasta escuchar los pasos de Julia acercándose de nuevo con fresas y un tarro de chocolate en las manos.
Quité mi mano de mi coño rápidamente y la miré aún agitada, sentía mis tetas pesadas por la excitación.
-¿Qué hacías?.-me preguntó con la mirada puesta sobre mi coño aún cubierto con el bikini.
-Nada, nada...
-Eso no es lo que parece.-murmuró con una sonrisa juguetona en los labios.
Bajé la vista y efectivamente, mi bikini tenía una mancha circular que exponía me había estado tocando y seguía muy húmeda.
-Me pones muy mal Julia, necesito que me toques
-¿Qué tanto?-. Preguntó metiéndose una fresa chocolatada entre los labios.
-¿A que te refieres?
Me distraía ver cómo limpiaba el chocolate de la fresa jugando con la lengua sobre la punta.
-Muéstrame que tanto me necesitas, quiero ver cómo te tocas mientras piensas en mí.
Sin medir palabra me dirigí a uno de los camastros y levanté mis brazos llevándolos hasta el nudo que amarraba mi bikini, lo deshice hasta sentir como colgaban mis tetas. Tenía los pezones duros, parecían suplicar por ser tocados y eso es precisamente lo que hice, agarré mi pezon derecho y empecé a masajearlo, amasé mis tetas y fui apretando la punta de mi aureola mientras imaginaba que era sus labios los que hacían el trabajo.
No sé en qué momento empecé a mover mis caderas contra el camastro pero mi cuerpo inconscientemente buscaba fricción contra mi palpitante coño, había empezado a gemir lentamente. Dejé de tocar mis pezones y me abrí de piernas sobre el camastro, puse una pierna a cada lado y aún con las bragas del bikini puestas empecé a frotar en lentos círculos mi coño, los gemidos se intensificaron.
-Así es como me pones.-gimoteé mientras la veía a los ojos aún con la mano entre mis piernas.-¿Quieres ver por debajo?
Julia no contestó enseguida, parecía pasmada y sus pezones se marcaban por debajo de su bañador, se relamió los labios y asintió.
-Dímelo, no te escucho.-dije intentando no soltar un gemido.
-Quiero ver tu coño, muéstrame que tan mojado está.
Empecé a quitarme la parte de abajo del bikini, la deslicé por mis piernas y la tiré a un lado, coloqué de nuevo mis pies a los costados dejando mi coñito abierto y húmedo.
Julia se relamió los labios viendo mi coño mientras se acercaba a levantar mis bragas húmedas del suelo, las tomó por el centro y se las llevó a la nariz, haciendo que mi coño palpitara ante la escena.
La observé fijamente sin tocar mi coño, ella me miraba a los ojos mientras pasaba su lengua por la humedad de mis bragas, eso fue mi límite, bajé mi mano a mi centro y con el coño abierto empecé a frotar mi clítoris, gemía alto y desesperadamente diciendo su nombre, quería imaginarla tocándome, quería que fueran sus delicadas manos las que se deslizaban dentro de mí. Me metí un dedo, mientras seguía frotándome, di un respingo ante la nueva sensación pero mi cuerpo no tardó en acostumbrarse pidiéndome más, empecé a cabalgar mi mano, movía mis caderas en círculos gritando de placer, quería sentirme llena.
Continuará...
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Espero les haya gustado preciosas <3 cuéntenme sus fantasías, me encantaría escribirlas. 😘
