𝙊𝙝 𝙣𝙤, 𝙂𝙧𝙖𝙮 𝙚𝙨𝙩𝙖́ 𝙘𝙚𝙡𝙤𝙨𝙤 ║ Gray x Chester

oh shit, here we go again

¿Alguna vez, una persona totalmente desconocida, te ha pedido una cita de la forma más extraña posible?

Quiero decir, que de pronto llegue a tu casa, toque tu puerta, te confiese su amor, y después ¿te invite a una cita?

Bueno, si no te ha pasado, a Gray sí que le sucedió.

Y ese fue sólo el inicio de la más extraña historia de amor que jamás hubiera imaginado.

La primera vez que lo vió, pensó en que sería un tipo sin oficio ni beneficio, alguien que vive debajo de un puente y sin el más mínimo conocimiento de modales.

Realmente creía que ese tipo había probado todo tipo de sustancias ilícitas conocidas y no conocidas.

Pero todos esos pensamientos no podían estar más alejados de la realidad.

A excepción de las sustancias ilícitas, eso sí que lo seguía imaginando.

Para él, Chester era la viva imágen del misterio.

Quizás al decir eso, muchos se imaginarían algún tipo de persona con capucha y ropa oscura, pero, vamos, esque con ese chico sólo vives pensando en "¿Qué hará ahora?"

Desde que lo conoció, ha estado prestando absoluta atención a todos sus movimientos, tratando de conocer al 100% todo de él.

Hasta el momento, sabía que le gustaban demasiado los dulces, en especial las grageas. Le gustan los días soleados, en ciertos días se molesta con facilidad, le gustan las bromas y el humor negro, también es un famoso youtuber el cual goza de vivir de su fama, es fanático de las películas de humor, y, al parecer, tiene una muy extraña atracción por los hombres altos y musculosos.

Eso último realmente le molestaba.

Gray no era alto, tampoco era musculoso, entonces, ¿porqué lo escogió a él?

Buster es uno de sus más grandes amigos, también estaban El Primo, Bull, e incluso Frank, pero, de todas las personas, escogió a un hombre bajito con cuerpo delgado.

¿Porqué?

¿Porqué lo escogió a él de entre todos los hombres grandes y fuertes que habían en todo Starr Park?

ー¿Ya saliste de tu crisis existencial?ー preguntó el conocido bufón, mientras comía un pequeño caramelo que claramente Mandy le dijo que no comiera.

El mimo volteó su mirada de su bastón a su novio, quien se encontraba sentado en el pequeño trono falso a la entrada de la tienda de dulces.

ーDesde hace rato estás mirando esa cosa. Sí, estoy igual de delgado de tu palo, ¿y qué?ー soltó con molestia.

Gray negó, y alzó una mano para restarle importancia.

ーSólo estaba pensando…ー

ー¿En Lola?ー

ーEn tí.ー sonrió ladino.

Las mejillas de Chester se encendieron, y soltó una corta risilla.

ーBien jugado, monja.ー

El mimo rió de igual forma, mas su momento de novios se detuvo en el momento en el que la campanita de la tienda se hizo escuchar.

ー¡Dulces! ¡Dulces dulces dulces dulces dulces!ー exclamó una pequeña niña, quien saltaba de alegría mientras que detrás de ella caminaba su hermana mayor, con una pequeña sonrisa.

La más alta se detuvo frente al bufón, al mismo tiempo que la pequeña continuaba saltando, con el objetivo de ver por encima del escritorio de dulce.