«¿Esa es mi expresión?» (+18)

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—Bueno, ya pudieron ver, por mayoría de votos pueden quedarse —Informa el patrón sonriéndole a ambos.

—Oyakata-Sama yo no- —Trata de hablar Muichirou pero Yuichirou se lo impide tomando su mano.

—Creo que si no hay problema entonces podemos hacerlo, no quisiéramos botar dos años de entrenamiento como si nada. Aunque también quisiera decirles que si hay alguna incomodidad con nuestra presencia nos lo informen para así hacer algo al respecto, mientras tanto nos quedaremos —Habla con seguridad y mira al menor haciéndole entender que le siga el juego, que era cierto lo que decía y ya no quería que renuncien.

—¿Muichirou? ¿Que dices? —Pregunta Ubuyashiki.

—Creo que sí... Está bien —¿Tan rápido cambiaba de opinión?, Tanjiro no podía evitar observarlo con el ceño fruncido.

«Ese demonio lo está manipulando»

—Aunque antes, quisiera saber porqué el joven Tanjiro me empujó —Dice Yuichirou observando al burdeos —Nunca te he visto pero mi hermano me habló de tí ¿Tienes algo en contra mío?

Tanjiro rueda los ojos y niega.

¿Todavía tenía el descaro de decir que no lo vió cuando claramente recibió una amenaza de parte suya?

Já.

No había motivo para decirlo porque quizá no le creían así que mejor calló.

No puede evitar sentirse incómodo, aparte de eso le molesta el hecho de que Muichirou acepte todo lo que su hermano le pida —Esa fue mi bienvenida, nada más —Agrega.

—Oh bueno, entonces espero que nos llevemos bien —Le habla estirando su mano —¿Amigos? No me gusta tenerle rencor a nadie, si te he caído mal o hecho algo desagradable espero que no vuelva a pasar, una disculpa —Agrega sonriente y Tanjiro corresponde su saludo sólo para no quedar mal.

Los pilares sonríen, ese era el Yuichirou que conocían.

—Gracias por aceptar mi amistad —Suelta y lo observa fijamente —En serio... Espero que nos llevemos bien en algún momento.

Tanjiro dice lo mismo.

«Ahora queda encargarme de tí...»

(• • •)

Las dudas habían sido resueltas por fin, Yuichirou resultó siempre estar vivo y ahora vivía con Muichirou en su finca siendo pilares. La teoría de que era un demonio se descartó por completo ya que Yuichirou en ningún momento emitió algo así, no se quemaba con el sol y según lo que vieron: Comía lo que ellos hacían, cosa que los verdaderos demonios no podían hacer sin vomitar.

Dos semanas pasaron desde aquél entonces, Tanjiro fue enviado algunas misiones junto a Muichirou, y aunque al principio sólo fue para sacarle información, no pudo. No había pruebas de nada, empezaba a creer que lo que vio sólo fue un error y estaba siendo cegado al saber que Muichirou ya le pertenecía a alguien.

Tanjiro había tenido una leve atracción desde que tuvieron su primera misión, admiración, mejor dicho, pero simplemente no pudo evitar sentir un gusto conforme fue pasando más tiempo con el menor. Por eso quería ayudarlo, quería el bien para él, pero Yuichirou se estaba interponiendo en todo eso. Sabía que ambos no vivían bien, podía sentirlo en el aroma del peli negro sin desapercibir nada, y lo peor es que al Yuichirou ser su hermano si habían peleas él no podía hacer nada, ni ayudar, ni hacer que se separen ya que lo verían normal “discutir” entre hermanos. Creía que las relaciones incestuosas por sí solas no podrían existir, al parecer estaba muy equivocado.

—¿En que piensas Tanjiro? —Pregunta Muichirou al verlo tan callado, ambos estaban caminando en medio del bosque con la oscuridad presente.

—Oh... Sólo pienso en qué hacer más adelante —Responde.