A life with Chishiya

Solitary Confinememt

Hace un momento me encontraba  huyendo de El Rey de Picas, tenía una herida en la pierna debido a que una de las balas rozo con ella, no era una herida grave, sin embargo me dolía un poco.

Mientras huía perdí de vista a mi novio y el grupo en donde me encontraba, probablemente ahora se encontraban muy lejos de mí, aún que estoy segura de que Chishiya no me abandonaría de esa manera.

Ahora estaba sola, herida y sin saber que hacer, pero no tenía tiempo crear un plan para buscar a los chicos, aún que eso haría cualquier otra persona yo solo pienso en que hacer para poder sobrevivir al Rey de Picas. Parecía que él no tenía límite, como si toda la ciudad fuera su campo de juego, eso lo hacía aún más peligroso.

Tal vez si entraba a otro juego el no podría atacar ya que se supone que no puede interferir en otros juegos.

Decidida, comencé a caminar hacia el juego más cercano, sólo para mantenerme a salvó mientras curaba mi pierna. Estaba atardeciendo, lo que significa que dentro se hará de noche y será más difícil. Así que aún que me doliera un poco caminar aceleré mi caminata.

Tal vez todo sería más divertido si estuviera escuchando mi música favorita, pero eso en estos momentos es algo imposible de hacer.

Cuando entre al lugar había un collar en la mesa, lo tomé y me lo puse. Solté un largo suspiró al entrar ahí y saber que estaba lejos del peligro.

Habían muchas personas, todas se veían extrañas, pero realmente no tenía tiempo de socializar en estos momentos. Sólo quería terminar el juego y salir de aquí.

Tenía la cabeza baja, esperando a que dijeran las reglas del juego.

– Dificultad: Jota de corazones.
Juego: Confinamiento.
Objetivo: Deben adivinar el palo de la parte trasera de su collar. Sin embargo, no pueden ver su propio palo. El límite de tiempo es una hora, cinco minutos antes del final, entren a una de las celdas y adivinen cual es su palo. Si no aciertan, el juego terminara para ustedes. Cuando el tiempo se acabe, sus collares explotarán y ustedes morirán. Además, los palos cambiarán en cada ronda.

– Suena bastante fácil, ¿No creen? – Habló alguien.

– Yo no estaría tan seguro. Aún no dicen cómo se gana el juego. – Dijo una voz muy familiar para mí.

No podía distinguir de quién era esa voz, pero si sabía que conocía a esa persona. Por primera vez desde que entre a este lugar, levanté mi cabeza para poder buscar con la mirada al dueño de esa voz.

– Además, la Jota de corazones se ha unido al juego como una participante más. El juego terminará cuando la Jota de corazones que está infiltrada entre ustedes, muera.

– ¿Ves? Te lo dije. – Volvió a decir esa voz familiar.

Puse más atención a quien había hablado y pude ver a un chico con abrigo blanco, tenía la capucha puesta y eso hacía más difícil poder identificarlo.

– Actividades prohibidas: Usar objetos con reflejos para ver su palo. Tampoco pueden usar la violencia o armas para matar a otros.

Se entendía bastante, el juego no tendría sentido si pudiéramos ver por nosotros mismos el palo, pues se trata de saber si podemos confiar en los demás. Pero no creo que en este lugar haya alguien en el que realmente se puede confiar.

– En pocas palabras... – Volvió a sonar esa voz. – Hasta que la Jota de corazones se equivoqué al responder y muera, este juego no acabará.

Me acerqué más a él y hablé.

– Y por lo tanto, debemos mentirle a la Jota de corazones para ganar el juego.

Cuando me acerque y comencé a hablar el chico parecía haberme reconocido, pues se acerco un poco a mí.