A mi cuidado

Capítulo 3

Siyeon apretó sus ojos antes de abrir de a poco sus ojos para poder acomodarse a la luz que entraba por la ventana de la habitación que compartía con Bora. Apenas la castaña invadió su mente se apresuró a verificar donde estaba y fue grande su sorpresa al sentir un peso en su pecho que le impidió levantarse por completo y que al verificar que era se encontró con la tierna imagen de la pequeña castaña sobre pecho durmiendo plácidamente.

-Para no saber quien soy yo para ti eres igual de cariñosa a cuando lo sabías-acarició una de las pequeñas manos de la castaña con cariño

Se dedicó a mirar a la pequeña dormir durante casi una hora completa, sin embargo, comenzaba a sentir hambre y por ende se veía obligada a despertar a la pequeña criatura que reposaba en su pecho.

-Cariño, es momento de despertar-le susurró con suavidad mientras acariciaba la espalda de la más pequeña

La niña se removió levemente pero no se despertó, es más, se apegó más al pecho de la más alta. Siyeon rodó los ojos divertida; siempre le decía a su esposa que parecía una niña cuando no se despegaba de ella y ahora que era literal tan solo pudo reír suavemente.

-Cielo...-intentó sacudirla suavemente pero la castaña tan solo empuñaba más sus manitas para aferrarse a la camisa de la rubia-supongo que tendré que dejarte aquí para ir a hacer el desayuno

Con el máximo cuidado posible separó a la más pequeña de su cuerpo y la depositó al costado vacío de su cama y se apresuró a poner tanto almohadas como cojines alrededor del cuerpo de la más pequeña para que no fuera a rodar y caerse de la cama. La cubrió con la manta que había comprado el día anterior y le dio un corto beso en la frente antes de levantarse por completo de la cama para dirigirse a la cocina a preparar el desayuno para la pequeña y ella.

Silbaba por lo bajo mientras cocinaba los huevos revueltos para ella y la castaña, había puesto algo de música con poco sonido para poder estar atenta a cualquier cosa que tuviera que ver con la pequeña niña que descansaba en el cuarto que compartía con su esposa.

Mientras la rubia se hallaba absorta en preparar la comida, la pequeña Bora comenzaba a abrir sus ojos al sentir la falta de calidez de la más alta. Se sentó en la cama y restregó sus ojitos con sus manos mientras se daba cuenta que estaba sola en la habitación.

-¿L-lobito?-murmuró con voz quebrada

Siyeon no tardó en llegar a la habitación apenas escuchó los ruidosos y fuertes sollozos de la menor. Se alarmó al pensar que tal vez la pequeña se había lastimado, sin embargo, fue grande su alivio al ver a la pequeña intacta sentada sobre la cama.

-¿Qué sucedió cariño?-le preguntó mientras quitaba una de las almohadas que había puesto antes para poder sentarse al lado de la más pequeña

-L-lo-lobito...-la castaña colocó sus manos sobre las rodillas de la más alta para poder colocarse sobre ellas

-¿Quieres que te cargue?-le preguntó con ternura mientras arreglaba el cabello desordenado de la más baja

La niña movió su cabeza de forma afirmativa mientras estiraba sus brazos a hacia la rubia que sonrió con ternura mientras tomaba a la pequeña para cargarla en sus brazos y levantarse de la cama para volver a la cocina de nuevo.

-Lobito-Bora miraba la puerta del baño que había en el cuarto a la espera de que la mayor saliera-lobito, lobito, lobito, lobito, lobito...

-¿Qué sucede cielo?-le preguntó mientras salía del cuarto de baño con su cabello mojado y una toalla cubriendo su cuerpo

-¡Lobito!-la castaña se levantó con torpeza del suelo y corrió hacia la rubia para abrazarse a una de sus piernas

-Cariño, solo estuve en el baño unos cuantos minutos-la más alta sonreía ante lo cariñosa que era la más pequeña-Namu y JiU no tardarán en llegar así que debo vestirme, ¿Me dejas por favor?

-Shi-le respondió separándose de la mayor

-Gracias-le sonrió mientras caminaba hacia el armario para sacar su ropa, siendo observada atentamente por la castaña-sobre la mesa del comedor te deje unas galletas y un vaso con leche para que comas, ve mientras termino de arreglarme, ¿si?

-Eta bien-obedeció mientras salía de la habitación y caminaba con rapidez hacia el lugar donde la esperaban las galletas y el vaso de leche que le había dicho la rubia

Pasaron alrededor de 15 minutos cuando justo la puerta principal fue tocada llamando la atención de la castaña que estaba apenas terminando de beber la leche de su vaso. Se bajó con torpeza de la silla y justo en ese momento Siyeon apareció por el pasillo ya vestida y con su cabello aun mojado pero bien peinado; le sonrió a la castaña apenas notó como caminaba hacia la puerta.

-Déjame abrir a mi cielo-le dijo acariciando su cabeza con cariño, Bora asintió obediente

Apenas la más alta abrió la puerta Minji entró con rapidez mirando a todos lados, confundiendo a la rubia.

-¿Dónde está mi pequeña amiga?-fue lo primero que dijo, sin embargo se calló apenas notó a la pequeña castaña escondida detrás de la pierna de la rubia frente a ella-awww, ¡Que linda!

La mayor trató de acercarse a la castaña, pero esta se aferró más a la pierna de Siyeon con algo de temor de la chica que la miraba con una enorme sonrisa.

-Minji, la asustas-Siyeon se agachó frente a la castaña e inmediatamente sintió sus bracitos rodear su cuello para que la cargase

-Lo siento, pero se ve muy tierna-dijo viendo a la pequeña que ocultaba su rostro en el cuello de la rubia

-Mejor pasen para que podamos hablar-se hizo a un costado de la puerta para que la pareja pasara-y así tal vez puedas ganarte su confianza