Parte 10

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El carruaje muy bien decorado pasaba por las calles de piedra de la capital, específicamente en la zona de mercado, un lugar lleno de gente que va y viene. 

Aun así, los pueblerinos al ver el carruaje tan hermosamente diseñado y el escudo familiar en una placa de oro, de inmediato le daban la vía libre para que pudiera pasar.

Una acción muy común, los pueblerinos instintivamente evitaban encontrarse con los nobles para así evitar problemas.

Aunque eso no evitaba las miradas curiosas, ver tan resplandeciente carruaje hacía que todos voltearan a verlo e imaginar quienes son tan afortunados en ir adentro.

- ¿¡¡¡Porque rechazaste el contrato!!!? -Exclama desesperado Tulio.-

Acaban de volver de una reunión con el Duque Manguera.

Carola tenía el rostro blanco mientras apretaba con ansiedad el nuevo pañuelo que le regaló su pequeño señor.

No es capaz de entender lo que pensaba el conejo, el duque sigo teniendo un comportamiento ejemplar de la nobleza después de que Bodoque rechazara el contrato y explicar sus razones, pero todos pudieron ver claramente que el Duque Manguera se había enojado.

¡Acaso el conejo no tiene sentido de supervivencia! ¡Por regla general, nunca se debe hacer enojar a un noble!

- La paga no es suficiente. -Contesta sin pelos en la lengua, anteriormente lo había explicado con mucha más educación pero esta es la quinta vez que se lo pregunta Tulio y ya se canso.-

- ¡¡¡Cómo no va ser suficiente!!! -Exclama el más alto.- ¿Acaso quieres que te paguen en monedas de oro? -Pregunta desesperado.-

- No. -Contesta de inmediato. No quiere provocar un malentendido.- Es solo que siento que el valor ofrecido no compensa el esfuerzo del trabajo que voy hacer. -

- Entonces si quieres oro. -Contesta Tulio mirándolo fijamente.-

El Marqués siempre sabía cómo hacer enojar al conejo.

Pero increíblemente esta vez no era su culpa.

La paga que le da Tulio aunque fue rebajada sigue siendo considerado como un lujo, no estaba esperando que el Duque Manguera le pagara igual, en realidad se estaba preparando en tener el sueldo más bajo de la compañía.

Pero había olvidado su condición de doncel.

Bodoque estaba pensando en el sueldo bajo de un hombre.

Cuando en realidad debió pensar en el sueldo de un doncel.

Y cuando leyó en el contrato de cuánto le iban a pagar, casi escupe sangre.

Olvidó completamente las condiciones desiguales entre hombres, mujeres y donceles.

Es así de simple; Si las mujeres ganan menos que los hombres, entonces los donceles merecen ganar menos que las mujeres.

En su vida pasada sintió que su género era como una carga y ahora en esta vida donde no se oculta, siente que está arrastrando una GRAN piedra por donde vaya.

= Tal vez sea por vivir como un Hombre por años. =

= Y por eso tenga el orgullo de un hombre. =

= Puedo aceptar y manejar ciertas cosas que respetan de mi género. =

= Pero si acepto ese sueldo con las condiciones negligentes que se estipulan. =

El VillanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora