🪐 CAPÍTULO VIII 🪐

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La Sala entera quedo en silencio al escuchar lo que la joven dijo. La reina la miro con incredulidad, su hija no podía haber hecho eso.... O si?

-De que estas hablando señorita???- la reina nerviosa miraba a su hija.

-Lo que escuchaste... Me casasare con Namor-

Todos los presentes hablaban en voz baja mientras la reina pensaba en que decirle a su hija; pero lo que volvía más preocupante la situación era que el sol se estaba ocultando y Namor solo contaba los minutos para volver por su reina.

-Dejeme ver el brazalete princesa- dijo M'baku mientras se ponía de pie con el ceño fruncido.

La joven se acercó a el y extendió la muñeca hacia el para mostrarle el brazalete.

-Lo que crei.... Majestad, lamento decirle que su hija ya está atada- dijo dejando caer el brazo de la joven con indiferencia.

-Que quieres decir?.... A que te refieres... - la reina se estaba poniendo de mal humor, y eso no mejoraba la situación para nada.

-Ya lo dije, me voy a casar... Y por favor, no hagan nada en contra de ellos.... Por favor- dijo la Morena mientras daba la vuelta para ir hacia el río de nuevo.

Sin embargo, con un movimiento de cabeza, la reina les indicó a las Dora milaje que le cerrarán el paso a su hija para que así no se fuera. La joven giro la cabeza ligeramente en dirección a su madre; sabia que si no salía antes del anochecer habria problemas.

-Madre.. Debo irme- gruñó entre dientes.

-No irás a ningún lado señorita... Te quedaras aqui- sentenció la reina. -No me puedo permitir perder otro hijo-

Y era entendible, la reina había perdido a T'Challa semanas antes.... Pero aunque Shuri también lo comprendía, había alguien que no.

En la superficie del río, Namor y Attuma esperaban a que el sol se ocultara por completo para ir por ella. Y Shuri lo sabía... Solo que pensaba que era mejor que no supieran nada sobre eso.

-Mamá, no lo entiendes..... Debo irme de verdad- intentaba de todo para convencerla de dejarla ir.

-No... No re irás de nuevo... No me importa si tengo que poner a cada Guardia de Wakanda para mantenerte aquí.

Luego de una hora el hombre perdió la paciencia, dejó a Attuma con un grupo de soldados mientras que el y otros dos hiban a recuperar a la joven. Furioso entró de golpe al Palacio donde las Dora milaje defendían una puerta más que otras, así que supuso que ahí debía estar su princesa.

Se deshizo de las Dora mientras que abría la puerta de un golpe, del otro lado se hallaba la joven llorando en silencio debido a lo que había pasado y sin siquiera percatarse de que alguien habia entrado.
Él se acercó a ella y se arrodilló para quedar a su altura apoyado en su lanza.

-Hey.... Todo está bien ok? Te sacaré de aqui- dijo en un tono cálido y suave.

Shuri no pudo articular palabra así que solo asintió rápidamente mientras se ponía de pie y lo tomaba de la mano; salieron de aquel cuarto y antes de llegar a la puerta principal Namor escucho una voz.

-A donde cres que llevas a mi hija??- pregunto llena de ira la reina.

La serpiente y la PanteraUnde poveștirile trăiesc. Descoperă acum