Secreto De Amor [Messichoa]

Capítulo 6

La mañana llegó haciendo que Memo despertara entre sus pañuelos llenos de mocos y la televisión aún encendida en los créditos de la quinta película romántica que se reprodujo durante la noche.

Se levantó de la cama y caminó al baño para comenzar a hacer su rutina y poder ir a entrenar con sus compañeros de equipo, no pasó mucho tiempo desde que entró al baño pues trató de apurarse para tratar de llegar temprano al lugar donde la selección mexicana entrenaría.

Durante todo el baño estuvo pensando en su situación, las palabras de Martino recorrían por su mente una y otra vez, no sabía que haría pero en sus planes no estaba darse por vencido y menos ahora después de haber compartido un beso con Leo.

Cuando estuvo listo bajó y tomó uno de los transportes privados donde la mitad de sus compañeros estaban esperando a partir a su destino pero al no estar completos tenían que esperar a los demás.

—¡Guille!—Alexis lo saludó.

—Hola a todos—Contestó mientras se adentraba a la pequeña camioneta—¿Por qué aún no se van?

—Tenemos que ser al menos la mitad para poder irnos—Se quejó Alexis mientras se acomodaba de manera extraña en su lugar—Sólo faltaba uno así que ya podemos irnos, que los demás se esperen por huevones.

Memo solo rió y se sentó para poder empezar la marcha pero apenas arrancó la camioneta dos personas corrieron hacia ella pidiendo entrar:

—¡Déjenos entrar!

Kevin golpeó la ventana para que abrieran haciendo que la mitad de la selección riera y comenzara a grabarlo.

—No abra chofi—Edson gritó impidiendo que el chófer abriera—Déjelos afuera.

—Abran chingada madre—Ahora era Andrés quien golpeaba el vidrio haciendo que el chófer se asustara y abriera la puerta.

Ambos entraron y algo enojados comenzaron a mirar mal a sus compañeros y a hablar entre dientes.

Memo miraba todo entre risas pero cuando miró a Andrés algo enojado trató de aliviar la situación.

—Ya Andrés—Memo habló alto para que su amigo lo escuchara.

—¿Acá estabas cabrón?—Preguntó Andrés sorprendido—¿Por qué no me ayudaste wey?

Memo le sonrió algo apenado—Es que se tardaron mucho y ya nos queríamos ir.

Andrés asintió lentamente tratando de lucir decepcionado pero todo se arruinó porque le ganó la risa haciendo que todos rieran con él y de él.

—¿Por qué tardaron mucho? Yo los vi cuando se subieron al elevador, pero como no me esperaron me baje por las escaleras—Preguntó Alexis.

Andrés y Kevin se miraron, el mayor solo negó al recordar lo pasado mientras que el menor rió a más no poder.

—Pues no Kevin le apretó a un botón en el elevador y lo detuvo—Kevin rió aun más fuerte contagiando a todos—Y tuvimos que llamar al hotel y nos sacaron de ahí.

Kevin reía tanto que comenzó a derramar lágrimas—Luego... A Andrés.

La risa no dejaba hablar a Kevin mientras que Andrés rogaba que no dijera nada más.

—Ya Kevin, supera.

—¡No!—Gritó mientras se reía—A Andrés... Lo... Tuvieron que...—Su risa comenzó a contagiar a los demás que esperaban impacientes la historia que contaba Kevin—Lo tuvieron que... Cargar entre dos guardias... Porque no alcanzaba subir—Kevin se arrodillo en el piso de la pequeña camioneta mientras agarraba su estómago—Y lo... cargaron... como bebé.