ALL MONSTERS... ARE HUMAN. (STEREK)

Capítulo 1: Un corazón desolado.

Comienza la nove! Bueno, como hoy me sentía generosa decidí empezar la novela, aquí teneís el primer capítulo, espero que esté bien, mañana intentaré subir cap de mi otra nove "Algo extraño..." Espero que os haya gustado, gracias por leer, espero sus comentarios y votos!!! Besos!

PD: Por favor, comentad, no estoy muy segura de esta nove y si no comentaís no sabré que tal ve y si os gusta la idea o no.

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Narrador omnisciente POV:

-Stiles... Por favor, nunca quisimos hacerte daño... Fue un error... Perdónanos. Vuelve, te necesito, te necesitamos. Stiles... – rogó Derek acercándose al chico con los ojos llenos de lágrimas.

-¿No creen que ya es demasiado tarde para pedir perdón? El Stiles que conocían ha muerto, ustedes lo mataron, era débil, bueno y demasiado tonto. Pero no os preocupéis, yo soy una versión mejorada de Stiles. – dijo este con una sonrisa cínica en su rostro apartándose más de Derek.

-Tú no eres Stiles... ¡Tú eres un monstruo! – rugió Scott intentando levantarse del suelo.

-Scotty, Scotty, Scotty... – dijo Stiles acercándose a este con una expresión sombría y divertida. - ¿Sabes la diferencia de cuando estuve poseído por el Nogitsune y ahora? – susurró al oído de Scott. – Que ahora... Soy más yo que nunca. – rio burlonamente mientras golpeaba el pecho de su examigo y lo mandaba bien lejos.

-¡Scott! – gritó el pequeño Liam corriendo hacia él.

-¡Stiles! Como te atreves... – gruñó Ethan abalanzándose sobre Stiles.

-¡No! – gritó Derek interponiéndose en el camino se Ethan. – Es más fuerte que nosotros, déjalo Ethan. – le convenció.

Ethan con eso se dio la vuelta y fue junto a Liam a ayudar a Scott.

-Stiles, por favor, deja esto, yo te... – comenzó a decir Derek acercándose nuevamente a Stiles.

-¡Cállate! ¡Ni se te ocurra decir eso Derek! No tienes ningún derecho a decirlo después de lo que paso, así que ahora a dormir, mi querido sourwolf. – y con eso, Stiles golpeó a Derek dejando a este inconsciente.

Stiles se dio media vuelta hasta donde estaban Malia, Kira y Lydia.

-No te acerques más. – ordenó Kira empuñando su catana.

-¡Tu no me das ordenes maldito zorro! Primero vienes y te interpones entre Scott y yo y ¿ahora lo pretendes hacer entre las chicas y yo? No te lo permitiré, vas a quedarte muy quietecita.

Y Kira quedó totalmente paralizada de pronto.