Tutores Divinos

20 - Ostia puta... ¡La Cartulina!

—Antes parecía apurado.

—Eehhh... ¿No crees que se haya marchado sin decir nada verdad?

—No. —La castaña contestó, acercando otra cucharada a su boca—. Algo me dice que incluso alguien como él esperaría. Se ve brusco, pero no maleducado.

—Creo que tienes razón. De hecho yo también lo creo.

—Hmph. Si de todos modos se va a ir entonces no importa. —La peli-cerezo estaba más calmada al respecto de lo esperado. Como sea, al menos tenía seguridad de que el tipo del abrigo gigante sabía cómo comportarse—. Lo dejaré pasar.

Yotsuba rió por lo bajo gracias a la actitud de su hermana mayor, Miku por su parte se encogió de hombros y continuó comiendo. Itsuki por otro lado tú o que abstenerse de hacer un comentario, lo que no fué tan difícil porque justo en ese exacto momento otra duda llegó a ella y no se aguantó las ganas de tratar de aclararla.

—Hey, Miku. —La nombrada levantó la mirada, lo que la peli-roja tomó como su señal para continuar—. ¿Qué hay de Ichika?

—¿Hm?

—Lo que quiero decir es... ¿Acaso no se suponía que ella se quedara en tu habitación por la noche? —Trató de elaborar en vista de la confusión de la castaña—. Pensé que por eso sabrías porqué no ha llegado a desayunar. Puede que duerma mucho pero ya debería haberle dado hambre.

—Ah... Realmente no lo sé. —Con esa respuesta se ganó algunas miradas, empuje suficiente para que se explicara con más claridad—. Cuando desperté ya no estaba ahí, así que pensé que ya había bajado.

—Pero yo no la he visto.

—Yo tampoco, así que no sabría decirte de que va todo eso.

—¿Será que salió?

—¿Sin avisar?

—Bueno, ella trabaja ahora, ¿No? —Decía la menor—. Además no es como que tenga que decirnos a donde va todo el tiempo.

—Si, si. Lo que digas. Pero aquí el asunto es que al menos tuvo que hacerle saber a Miku que se marchaba, precisamente para evitar esta situación.

—Ah, bueno...

—Ya no importa. —La tercera volvió a hablar—. Podemos preguntar cuándo vuelva. Probablemente la necesitaban para algo y debía ser rápida. En ese caso solo tenemos que esperar.

—¡Yeah! —Exclamó la del lazo verde—. Además de eso. Si al final solo se le olvidó entonces habremos tenido esta discusión para nada, ¿Verdad?

Nino e Itsuki se miraron entre ellas, pero eventualmente tuvieron que aceptar que lo que esas dos decían tenía mucha lógica. Con eso el tema se dió por cerrado y se decidió no verbalmente que dejarían a la hermana mayor expresar sus razones cuando volviera.

El asunto aquí es...

Qué en realidad ella jamás se fué.

De hecho, ni siquiera había despertado, y eso... Eso significaba varias cosas.

Cosas que dependiendo de varios factores, pueden ser consideradas como malas, o realmente malas.

[•••]

Aquí era como si nada hubiese cambiado. Con pocos o ningún ruido por momentos, se sentía la paz digna de un lugar utilizado para descansar del resto del mundo. Mismo lugar que alojaba a varias consciencias usándolo a su máxima capacidad.

Naturalmente teniendo en cuenta que se encontraban en un planeta que no poseía nada que significara una preocupación a tener en cuenta, el albino ocupando la habitación se mantenía en un estado de suspensión completa en lo que se recuperaba de lo que fué una noche increíblemente larga para él, llegando incluso a niveles de los que no estaba enterado, pero que en poco tiempo experimentaría de primera mano.