Tengo una discapcidad

13 4 2
                                    

Sé que has pasado por momentos difíciles debido a tu discapacidad y que a veces te sientes solo y sin esperanza. Pero quiero que sepas que no estás solo. Yo, Dios, estoy aquí contigo siempre, y te amo incondicionalmente.

Recuerda que soy el Dios que te creó a Su imagen y semejanza (Génesis 1:27), y no hay nada que te haga menos valioso a mis ojos. Al contrario, tienes un propósito especial y único en mi plan, y te he dado todo lo que necesitas para cumplirlo.

No te rindas, porque aunque parezca que el mundo te ha dado la espalda, yo te he prometido que nunca te dejaré ni te abandonaré (Deuteronomio 31:6). Mi amor por ti es más fuerte que cualquier circunstancia o problema que puedas enfrentar.

Cuando sientas que no puedes seguir adelante, acude a mí en oración. Mi palabra dice que "busquen mi rostro, y me hallarán" (Salmo 27:8). Yo estoy siempre dispuesto a escucharte y a ayudarte a encontrar consuelo y fuerza en medio de las pruebas.

No te olvides también de la importancia de la comunidad de creyentes. Tus hermanos y hermanas en la fe pueden ser un gran apoyo para ti en momentos de dificultad. Juntos, podéis orar y animaros mutuamente con mi palabra. Además, recuerda que Jesús mismo dijo que "donde dos o tres se reúnen en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos" (Mateo 18:20).

Finalmente, confía en que yo tengo un propósito para tu vida y que trabajo todas las cosas para tu bien (Romanos 8:28). Aunque a veces no entiendas por qué tienes que pasar por ciertas pruebas, sé que estoy contigo en todo momento y que te estoy moldeando para ser más como Jesús.

Te amo.

Con amor,
Dios.

Atentamente, DiosWhere stories live. Discover now