Ian Está Prohibido (Completa)

Capitulo 2: la primera pelea con Ian

Capitulo 2: La primera pelea con Ian

La mañana siguiente me levanté muy temprano y bajé a la cocina, olía a rico café recién hecho, noté que ahí estaba mi mamá de pie apoyándose de la encimera, terminando su taza de café mientras andaba su teléfono.

—¿Vas a salir? —pregunté al notar que estaba vestida de manera muy presentable y hasta llevaba tacones, de verdad que ahora mi madre se arreglaba mucho más que antes y lucía radiante, tal vez tener un novio joven la estaba rejuveneciendo.

Estuviera feliz si no lo despreciara.

Ella alzó la vista por medio segundo ofreciéndome una sonrisa antes de volver a ver su teléfono.

—Sí cariño, iré por un momento a solucionar unas cosas, será rápido —dijo apenas mirándome.

—Ah —murmuré y tomé una taza para servirme un poco de café para luego sentarme en el taburete dando un sorbo, amaba el café por la mañana.

—Traeré un pavo para cocinar de cena —dijo mi mamá—, viene el primo de Ian que es chef, tiene un buen trabajo en Inglaterra, puede que se la lleven bien —me guiñó un ojo—. Aunque es un poco menor que tú.

¿Su primo?

Ahora que lo pensaba nunca conocí a la familia de Ian, ni tampoco habló de sus primos o algo así.

Al parecer con mi mamá iba muy en serio.

—No me gustan menores. —después de que lo dije me sentí algo incomoda y le siguió un silencio muy incómodo, mi mamá no me dijo nada al respecto pero creo que le incomodó que le dijera eso porque de hecho ella estaba saliendo con alguien menor.

Eso me daba una rara sensación como de... no lo sé ¿molestia?, ¿de verdad iban a casarse? bueno, tenía un anillo, pero aun así...

—Ah —continué diciendo, intentando llenar el silencio— ¿también su primo se va a quedar aquí?

—Solo unas semanas —dijo— luego va a tomar un avión a Inglaterra.

Lo que faltaba, íbamos a estar rodeado de la familia de Ian.

Mi mamá guardó su teléfono en su bolsillo y me miró por fin.

—¿Te incómoda? —preguntó.

—¿El qué? —pregunté.

—Ian —dijo— noto que estas algo incómoda con él.

Uhm, al parecer no fui nada disimulada.

—No lo conozco —dije y no era del todo mentira ya después de tanto tiempo éramos 2 completos desconocidos.

—Quisiera que se la lleven bien —dijo—, que podamos compartir juntos, que lo veas como un buen padrastro.

Me reí, joder ¿ver a Ian como mi padrastro?

Imposible.

Apenas podía verlo sin querer vomitar ni despreciarlo.

—Mamá no puedo ver a Ian como mi padrastro —dije—, pudiera ser mi hermano.

Y de hecho era mi ex.

Que horror.

Ella giró los ojos terminando de tomarse todo el café como si fuera whisky.

—No ignores que literalmente le doblas la edad. —dije, realmente no estaba nada de acuerdo con esto.

—Para el amor no hay edad —replicó girando los ojos.

—¿De verdad es amor o se aprovecha de ti? —dije algo molesta.

—No estoy para tu celos hija -replicó-, soy feliz así que te pido que seas feliz por mi.