Teikō desea reunir a su mejor equipo para una celebración de aniversario y, por lo tanto, las seis escuelas están invitadas. Los Kiseki han vuelto a "casa": la Corte se ha reunido una vez más. Los seis, siete, prodigios del circuito de baloncesto go...
Sit down but to rewrite our history, rewrite our history, rewrite our history
(...)
Gonna start it over, don't you know what we could be
A new beginning, fighting 'til we're winning
(...)
Say come on and show the world who you really are
It' s not enough to be better than the rest
Gotta take it to the top and make yourself a superstar
(...)
You don' t need them to believe in you
Get your mission on lock and see it through
You've got all the power you need in you
— Superhero BY Simon Curtis
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Cuando Satsuki le dijo que asistiera al entrenamiento porque esto era importante —sí, con el énfasis extra en la palabra— Aomine sinceramente no se lo esperaba. Parpadeó como un búho mirando a Tōō y a su entrenador, y se rascó la oreja, sólo para asegurarse de que lo había oído bien.
—¿Qué acabas de decir, Imayoshi? —preguntó, mirando al capitán.
Su entrenador suspiró exasperado e incluso la expresión siempre agradable de Imayoshi se deslizó hacia la molestia, aunque sólo fuera por un momento.
Aun así, Aomine lo notó. Cuando estabas rodeado de gente como sus ex compañeros de equipo/hermanos, aprendías. Te veías literalmente obligado a ser observador hasta cierto punto, aunque nadie de los presentes supiera eso de él. Tetsu y Sei podían tener simplemente una expresión sencilla y Ryō era demasiado buen actor como para mostrar sus verdaderos sentimientos sin que lo indagaran. Incluso Shin escondía sus verdaderos pensamientos y sentimientos detrás de una fría (cortante) cortesía, mientras que Atsu a menudo llevaba esa expresión siempre aburrida. Así que sí, que la gente asuma lo que quiera sobre él... pero era bueno leyendo a la gente. No tan bien como Tetsu y Sei, pero tenía su parte de conocimiento, muchas gracias. Así que sí, notó la molestia en el rostro de Imayoshi, por más que fuera un breve destello.
