「ᕼᴇᴀᴛʜᴇʀ: Տᴜɴғʟᴏᴡᴇʀ」

II

Basil se encontraba junto a Hero y Mari. Él picaba trozos de manzana y los contrarios picaban otras frutas mientras platicaban animadamente, el rubio era feliz con sólo escucharlos.

En frente de ellos estaban; Aubrey, Sunny y Kel jugando.

-¡Tengo algo importante que contarles! -Dijo de repente Mari, obteniendo toda la atención de Hero y Basil.

Una vez que se dio cuenta de esto, continuó.

-Nuestros padres consiguieron un lugar en el próximo recital, para Sunny y para mí-Dijo Mari con una sonrisa de total felicidad.

-¡Eso es increíble, Mari! Felicidades... Dime cuando tengan fecha y estaremos allí, ¿Verdad, Basil? -Se notaba bastante la alegría en la voz de Hero debido a la noticia que había comunicado Mari, y su sonrisa.

-Oh, claro, estaremos encantados de asistir-Respondió Basil mientras seguia en su tarea.

-¡Y a quién no vaya le cortamos la cabeza! -Dijo Mari con los ojos llenos de fuego y brillo.

-No creo que eso sea necesario... -Habló Hero un poco preocupado aunque sabía que era broma.

-Con esas amenazas quien no iría, Mari-Agregó Kel, sentándose en el pasto, tomando una manzana, fingiendo un tono dramático.

-A ti directamente te mataría... ¡De un ataque de cosquillas!-Gritó Mari para abalanzarse sobre Kel y empezar a atacarlo con cosquillas.

-¡Hero! ¡Basil!, ¡Ayudenme! -Rogaba Kel entre lágrimas de risa.

Hero solo negó con la cabeza, y Basil desvío la mirada, para darse cuenta de que Sunny y Aubrey habían desaparecido de su campo de visión.

-Voy al baño-Dijo simplemente el rubio y se paró.

Conforme iba caminando, no pudo visualizar a Aubrey ni a Sunny. Se detuvo un momento para intentar localizarlos pero igualmente no los vio.

Miro hacia dónde estaban Mari, Kel y Hero, ninguno lo estaba mirando, así que cambió su rumbo para buscar a los dos azabaches.

Se adentró un poco en el bosque, y apenas dió dos pasos hasta escuchar la voz de Aubrey, la siguió. . .

Ahora lo bueno es que los había encontrado definitivamente.

Lo malo es que estaban muy, muy pegados, medio abrazados, y Aubrey tenía puesto el suéter color verde de Sunny, al parecer ambos compartían un momento muy lindo. . .

Sentía... ¿Tristeza? ¿ira? ¿Decepción? ¿Celos? No le importaba, ahora sólo quería borrar esa imágen de su mente.

Intentaba que las lágrimas no salieran mientras corría hacia el interior de la casa de la familia de Sunny.

Se encerró en la sala principal y finalmente dejó salir todas las lágrimas, intentando no hacer mucho ruido.

¿Por qué llegó a pensar que Sunny sentía algo más que solo preocupación? .

Sunny nunca tendría sentimientos por él mientras Aubrey existiera.

Porque ella era perfecta, perfecta para Sunny.

Y el no era ni la mitad de todo eso.

Aveces desearía ser la, hermosa, valiente y perfecta Aubrey. . .

𝘞𝘢𝘵𝘤𝘩 𝘢𝘴 𝘴𝘩𝘦 𝘴𝘵𝘢𝘯𝘥𝘴 𝘸𝘪𝘵𝘩 𝘩𝘦𝘳, 𝘩𝘰𝘭𝘥𝘪𝘯𝘨 𝘺𝘰𝘶𝘳 𝘩𝘢𝘯𝘥
𝘗𝘶𝘵 𝘺𝘰𝘶𝘳 𝘢𝘳𝘮 '𝘳𝘰𝘶𝘯𝘥 𝘩𝘦𝘳 𝘴𝘩𝘰𝘶𝘭𝘥𝘦𝘳, 𝘯𝘰𝘸 𝘐'𝘮 𝘨𝘦𝘵𝘵𝘪𝘯𝘨 𝘤𝘰𝘭𝘥𝘦𝘳
𝘉𝘶𝘵 𝘩𝘰𝘸 𝘤𝘰𝘶𝘭𝘥 𝘐 𝘩𝘢𝘵𝘦 𝘩𝘦𝘳? 𝘚𝘩𝘦'𝘴 𝘴𝘶𝘤𝘩 𝘢𝘯 𝘢𝘯𝘨𝘦𝘭
𝘉𝘶𝘵 𝘵𝘩𝘦𝘯 𝘢𝘨𝘢𝘪𝘯, 𝘬𝘪𝘯𝘥𝘢 𝘸𝘪𝘴𝘩 𝘴𝘩𝘦 𝘸𝘦𝘳𝘦 𝘥𝘦𝘢𝘥 𝘢𝘴 𝘴𝘩𝘦