HERMANASTROS (Justin Bieber y Tu)

CAPITULO 37 (ULTIMO)

Luego de un viaje de 16 horas que no hice más que dormir, el avión aterrizo. Cuando llegamos a era de noche y al otro día empezábamos las clases así que llegamos directo a dormir. Mi alarma sonó a la mañana siguiente a las seis de la mañana, la apague con pereza me senté en la cama, mire a Mad que esta total mente dormida, agarre mi almohada y se la tire.

-Chaz –Dijo levantándose sobre saltada, yo la mire raro

-¿Estabas soñando con Chaz?-Dije

-¿Qué? Pff no –Dijo yo reí

-Te gusta Chaz –Dije feliz

-Ya no le digas a nadie –Dijo

-Tranquila –Dije parándome de la cama-Me bañare –Dije

-Despiértame cuando termines –Dijo y se acomodó para seguir durmiendo. Cuando termine de bañarme me puse unos Jeans azules un buzo de manga larga negro y un chaleco de Jen por arriba, me seque el pelo y salí

-Despiértate –Le dije a Mad –Entramos en 15 –Dije guardando mis cosas en mi bolso

-Siempre me haces lo mismo –Dijo y entro corriendo a bañarse, yo reí, termine de guardar mis cosas y revise mi celular para ver si tenía algún mensaje de Justin pero nada, me quede jugando en el celular hasta que Mad salió del baño y nos fuimos a clases. Luego de todo un día de clases el timbre sonó, salí de la clase y me dirigí a mi casillero para guardar mis libros.

-Hola muñeca –Dijo una vos muy conocida detrás de mí, yo me voltee y cerré mi casillero

-Hola James –Dije y me puse a caminar

-¿Cómo pasaste en Nueva York?-Me pregunto caminando a mi lado

-Bien –Dije

-¿Qué te parece si hoy salimos?-Me pregunto

-No, lo siento –Dije

-Pero te divertirás lo prometo –Me insistió

-Lo siento no puedo tengo mucha tarea –Dije

-Ya aceptaras –Dijo y se fue andando en su patinara, James era un chico muy guapo no lo negaba, era alto con un cuerpo muy bien trabajada, morocho y de unos preciosos ojos azueles, pero yo amaba a Justin, hablando de Justin, saque mi celular del bolsillo de mi pantalón y no tenía ningún mensaje de Justin, lo volví a guardar decepcionada. Hoy iría a mi lugar secreto, detrás de las gradas del campo de futbol americano empezaba un campo, había que pasar un alambrado para llegar, así que me dirigí allí pase el alambrado y me puse a caminar. Luego de caminar por unos diez minutos llegue, había una fuente vacía que arriba del todo tenía un pequeño ángel, unos pasos más al frete había un pequeño lado, amaba venir aquí. Me senté al frente de la fuente recostándome en ella, cada vez que estaba triste, estresada o simple mente quería estar sola venia aquí. Los únicos que sabían de este lugar eran Max y Mad, cuando no me encontraban por ningún lugar, sabían que estaba aquí y que era mejor dejarme sola. Simplemente venia aquí, me sentaba y me quedaba mirando el lago.

-Es hermoso –Una vos al lado mío me saco de mis pensamientos haciéndome saltar, mire quien era, era Justin no podía ser

-¿Qué haces aquí? –Dije sorprendida

-¿No me vas a saludar? –Dijo, yo sonreí y me acerque a él para besarlo –A si me gusta –Dijo separándose de mi

-¿Qué haces aquí? Me refiero a aquí en Inglaterra no aquí en mi lugar secreto –Dije -¿Cómo me encontraste?-El rio por mi preguntas

-Me vendré a estudiar aquí –Dijo sonriendo, yo me pare sorprendida

-¿Qué? –Grite

-Convencí a papa de que me dejara venir a estudiar aquí –Dijo sonriendo, yo lo abrace