1era parte.

10 1 0
                                    

Fandom: Dimmu Borgir. Susperia, Mustis.

Palabras: Too much blood, vampires.

••••••

Ophelia soportó el impulso de mirarlo, Øyvind se había presentado a media noche, reclamando su acoso.

Ophelia no diría que lo acosó, que lo espiaba, es sólo que si él saldría con su mejor amiga, ella se asegura que sea legítimo, no es que Ophelia fuese una chica hermosa, en realidad no lo era, pero Eleanor no era más agraciada que ella, se podría decir que Eleanor en realidad era normal pero estaba enferma, ella tenía una grave afección y necesitaba de muchos cuidados, su albinismo le causaba toda clase de angustias e idas con un médico particular, y luego de que en la clase todo el mundo la ignorara, de pronto llega y se le acerca aquel chico, rebelde, caótico, Øyvind Mustaparta, ¿Quien le creería? Ni siquiera al más insulso. Vaya, ni la misma Eleanor se lo creía pero estaba cegada por su persona, y su gusto por los chicos de ese tipo, aunque Øyvind siempre había sido muy particular, vestía así de extravagante y con esas perforaciones llamaba la atención de la gente conservadora que siempre ha sido en Viken. 

Y entonces ella simplemente estuvo observando externamente a su amiga y él empezar a "salir" hasta que no pudo más, no lo soportó y los siguió cuando ellos iban juntos y Øyvind la dejaba en su casa, vaya patraña resultó ser porque los vio irse a la casa de él, y cuando ella husmeó en su jardín, ellos estaban.... haciendo cosas extrañas, aunque esa no es la palabra para catalogar lo que vio: en una banca colgante de madera del porche de la casa de Øyvind, Eleanor estaba sentada rígida cómo un cadáver, y...desde su cuello y labios caían lágrimas rojas, el uniforme de su escuela, su falda y camisa manchadas, mojadas de sangre, fue tanta que Ophelia quedó petrificada sin poder hacer más que mirar cómo su mejor amiga, que siempre tenía la piel de leche estaba ahora cincelada en rojo, gotas cayeron en el pasto, sin embargo, fue más horrendo ver el cabello largo y suelto de su amiga tener el color de su sangre, su forma delicada bañada en sangre, sus ojos casi rojos natural (por su albinismo) abiertos de par en par mirando la nada, en realidad Eleanor lucía como una persona drogada y Øyvind estaba encima de ella, literalmente encima, Øyvind estaba sin playera sólo con pantalones de jean y arrodillado, respiraba con dificultad y todo su torso cubierto de hebras de sangre, sus manos sosteniendo las muñecas retorcidas de Eleanor; lo que evitó que Ophelia gritara por auxilio es que la mirada de Eleanor cobró vida y entonces la miró, pestañeaba como si estuviera saliendo de un trance, Ophelia había retrocedido del susto y quebró una ramita con sus zapatillas, Øyvind al tiempo que giraba su rostro Ophelia ya se daba a la fuga, pero tal parece, por las actuales circunstancias que siempre sí supo que fue ella, lo cual es en realidad imposible, pero Øyvind está aquí, ¿Cierto?

-Quiero saber si serás un estorbo para nosotros ¿o sólo tu pequeño acecho se debe a que ya no eres el mundo para Eleanor?

-Disculpa, ¿Qué?

-¿Cansada de que ya no gire alrededor de tí?

-No es por eso -Ophelia apretó las manos en puños en su costado y sus dientes se aplastaron entre ellos, empezando a bullir por la presencia fresca, arrogante, y pasiva de Øyvind. Él apenas y le miraba con algo más que aburrimiento. 

-¿Y bien? 

-No te involucra a tí en nada, así que ¿Por qué no mejor te largas de mi casa?

-Es justo, tú entraste en la mía sin permiso. 

Ophelia abrió la boca sin poder refutar a eso. Øyvind se veía complacido sin embargo siguió atacandola verbalmente.

-Sólo vine a decirte que dejes de meter las narices dónde no debes, o me veré en la obligación a actuar en consecuencia.

-Vete al diablo, Eleanor es mi amiga, la quiero, y estoy cuidando de ella, ella...no debe...no puede verte...no eres adecuado para ella.

-¿Adecuado? -para consternación de Ophelia, Øyvind rio apenas un poco, ella se estremeció ante el sonido, masculino -No me digas que estás celosa de quién dices querer tanto. No puedes ser más hipócrita.

-¿Celosa? ¿De ti? Por favor, así que lárgate, da igual no tienes derecho a aparecerte así, como si nada, a las 12 de la mañana por el amor de Dios, y déjame decirte patán de cuarta que, no le harás nada que pueda dañar a Eleanor, si ella quiere estar contigo bien, pero vete con cuidado que si le haces algo juro que..

Ella estaba tenía miedo, ni siquiera había podido dormir pensando en todo, ¿Lo habrá imaginado? 

Y cuando ella sólo llamó llorando a la casa de los padres de Eleanor, sopresa, ella le contestó y dijo que en realidad estaba bien. 

Eleanor no recordaba haberla visto en el jardín de Øyvind, y los padres de Eleanor respondieron que su hija estaba bien cuando preguntó luego de llamar por segunda vez a su casa. 

Qué carajos estaba pasando.

Ophelia tenía una idea pero no quería darle vueltas a esa, cosa fantasiosa, porque los cuentos de hadas no son reales, ¿Cierto?

De la nada, Øyvind pasó de estar sentado en la silla de su comedor a estar frente a ella, casi, sobre ella, cerca de la alacena donde Ophelia estaba reclinada y de brazos cruzados, tan pronto Øyvind estuvo frente a ella tan cerca que sus narices se tocaban, dejó caer sus brazos como gelatina. Trata de no temblar tanto en realidad.

-¿Qué? ¿Me morderás, fiera? O acaso...¿es que esperas que yo haga lo mismo contigo?

Øyvind susurró, Ophelia sintió un estremecimiento en su pecho, los ojos de Øyvind le veían de forma intrigante, Ophelia cerró las manos en puños, rascando sus palmas con sus uñas. Resistiendo.

Se había estado replanteando aquella visión la del jardín toda la maldita tarde y noche, era en realidad una suerte que no llamó a la policía o la habrán tomado de loca, pero, ella sabe lo que vio, y ella no quiere confirmar sus ridícula teorías, pero Øyvind tan cerca de ella, era casi tan horrible como inquietante, su altura, su delgadez, su...mirada.

-No te tengo miedo, enfermo de mierda.

-Pues... deberías -. Øyvind suspiró en su cuello antes de alejarse dejando cosquillas en su garganta, en cuanto Ophelia dejó de distraerse con sus manos tratando de calmar su piel del cuello, Øyvind ya había desaparecido sin el menor ruido en el suelo de madera, desvaneciendose como una sombra ventosa.

_____________

Nota: ahre hasta ahora yo bien cumplidora, ya vamos al 5to día y seguimos según yo pa' largo. Ésta es una primera parte, ya saben, si me han leído en TVD fandom (encuentras mi fanfic cómo Veronica Perfoliata del original Elijah Mikaelson) sabes que tengo mi propia forma de hacer de vampiros, así que esperad por más, pienso volverlo un short-fic porque me gustó como fluyó mi inspiración a las 4am. Realmente tengo más que ofrecer que lo que se ve a simple vista como una novela de adolescentes llena de clichés y sin una pizca de originalidad, si ya me has leído sabes que no será así (guiño, guiño).

Gracias por leer.

Too much blood, vampires (Mustis-Dimmu Borgir) Kink/goretober 2022.Where stories live. Discover now