— Creo que lo mejor sería ocultar a Lou en algún lado, sin nada que pueda rastrear su ubicación —Subió al auto y cerró sus ojos recargándose en el asiento, Maddison lo pensó unos segundos.

— Háblalo con él, es decisión de ustedes pero no te preocupes el plan está listo para tu próximo partido, he contactado con otras celebridades y creen que si hay pruebas contundentes pueden dar declaraciones.

— De acuerdo, iré con Louis —Murmuró cortando la llamada, soltó un último suspiro y encendió el auto.

Camino al departamento pasó a comprar galletas y un ice coffee para Louis, sabía cuanto los amaba, bajó del auto por fin en casa con una fingida sonrisa, no quería preocupar a Louis por lo que estaba sucediendo, cuando entró al departamento solo hubo silencio, frunció el ceño confundido pues Louis siempre tenía música o series de fondo en la televisión.

— ¿Mi amor? Ya llegue —Habló fuerte tratando de que Louis lo escuchara, un sollozo del castaño lo dejó helado.

Caminó rápidamente hasta la habitación y encontrar a su novio abrazando sus rodillas mientras lloraba en la cama le partió el corazón, junto a él estaba su móvil, dejó las cosas en el buró y subió a la cama rápidamente atrayéndolo a su pecho, no estaba seguro de lo que había ocurrido pero podía compartir el sufrimiento del castaño.

— ¿Que sucedió, mi amor? ¿Estás lastimado? —Murmuró preocupado mientras besaba su cabello, el castaño negó tratando de controlar su llanto.

— Ya saben quien soy, Harry —Balbuceo rebuscando con fuerza el cuello de Harry, su lugar seguro. El rizado se inclinó levemente para dejar que se ocultara ahí.

— Era algo que iba a suceder, Pastelito, pero yo estoy aquí para protegerte —Susurró con cariño sobre su sien.

— Descubrieron mis fotos antiguas y se están burlando de mi, dicen que un asqueroso gordo como yo no merece estar contigo —Soltó un sollozo de nuevo aferrándose al rizado, Harry frunció el ceño.

— Lou, bebé no debiste ver los comentarios, ellos no tienen razón, nunca haz sido asqueroso y tu físico no me importa tanto como tu corazón, ademas, siempre has sido precioso —Lo apartó un poco para sujetar sus mejillas y verlo fijamente, Louis sentía vergüenza — Eres lo más perfecto que existe en este mundo, Louis Tomlinson, con tu bonita pancita o sin ella —Dejó un beso suave en sus labios acallando sus sollozos.

Después de besar todo su rostro hasta que no quedara ninguna lágrima más, lo ayudó a recostarse en la cama, el castaño parecía un tanto sedado por su llanto, Harry se dedicó a acariciar su cuerpo con suavidad mientras lo arrullaba, Louis no quería dormir pero tampoco quería detenerlo, se sentía demasiado protegido entre sus brazos.

— ¿Nunca dejarás de amarme? —Murmuró despacio mientras miraba a su novio, el rizado negó muy seguro de su respuesta.

— Nunca, ni en un millón de años —Dejó otro beso en sus labios y rozó ambas narices con dulzura.

— Dijiste que nos casaríamos después de la universidad —Sonrió nostálgico y Harry lo imitó.

— Lo haremos, pronto —Besó su mejilla y se recostó más cómodamente a su lado. Las amargas palabras de Jeff golpearon su cabeza y tragó saliva tomando la mano de Louis — Hay algo que no te he dicho, Lou

— No me asustes de esa manera —Murmuró mirándolo, Harry suspiró mientras negaba.

— Jeff quiere que me comprometa con Olivia, es evidente que eso no pasará, no tienes porqué preocuparte por eso, pero además, ya sabe de ti como todo internet...¿Crees que deberíamos escondernos en algún lugar? —Murmuró mirando el océano rebelde en sus ojos.

FATBOYWhere stories live. Discover now