La organización

133 13 0
                                    

Gustabo

Nunca me había sentido dividido hasta el día de hoy. Tengo a mi organización esperando por un plan que nos saque de esta, el CNI incluso el FBI ya deben tener nuestros nombre y apellidos, no tardarn mucho en ubicarnos.

Y por el otro lado está Horacio que me pide que me vaya con el. Si viniese de otra persona le pegaría un tiro por el simple echo de pensar  que yo traicionara a los míos para ir con los de Conway.... pero es Horacio... una de las tres y únicas personas que quiero — dos de ellas están muertas.— ¿Cómo puedo negarme a que me salve?

Mi corazón y mi mente están en conflicto... Es algo jodido e increíble... nunca había sentido algo así, jamás había tenido que elegir entre el corazón o mi mente, por el simple echo de que antes no tenía o al menos estaba "dormido".

– ¿Gus? – La dulce voz de Horacio hizo que levantase la mirada hacia el.

– ¿Si? –

– Estas muy pensativo... ¿Enserio te cuesta tanto dejar esta vida atrás? –

Me quede en silicio durante unos segundos, no sabía que responder... ni si quiera sabía si quería responder.

– Ya veo... ni si quiera yo puedo hacerte cambiar de opinión... Sabia Conway se equivocaba. –

– ¿De qué hablas? –

Horacio no despegaba la mirada del suelo y eso era algo que me mataba, el cabron sabe como poner esos ojitos tristes.

– Conway dijo que si alguien podía hacerte entrar en razón sería yo... ¿no se que le hizo pensar que funcionaria?–

Se perfectamente porque dijo eso el cielo, el también lo ha notado, quizás Horacio no porque no conoció como era el Gustabo de antes, el Gustabo que era después de que el se fuese y Conway me intentase convertir en una pequeña versión de el.

Horacio no sabe cómo era pero Conway si, el viejo a notado el cambio que he dado desde que este crestitas está por la ciudad, ese viejo astuto sabía lo que hacía cuando te envió a ti... ese viejo verde me conoce más de lo que me gustaría admitir.

– Te hizo venir porque sabe que me importas, el puto viejo sabe que... me gustas. – Horacio levantó sus llorosos ojos hacia mi, por el bien de mi estabilidad mental y emocional si acaso tengo algo así, retire la mirada.

– ¿De qué sirve si estás dispuesto a seguir con ellos hasta el final? Gus solo hay un final y es la muerte... El FBI no negocia... si te importará... si me quisieras te quedarías conmigo, prefieres morir que estar con... –

Lo bese haciendo que dejase de decir tonterías, el correspondió al beso aunque sus lágrimas no dejaban de caer y mojaban  ligeramente mis mejillas.

Me separe y limpie sus lágrimas.

– Llorón. – El mi miró entristecido. – ¿Quién dice que voy a morir? Mis balas son más rápidas antes de que me maten los mataré yo a ellos – Horacio negó con la cabeza.

– Son más... no eres inmortal. –

– No... pero ellos tampoco, sobre todo tu tampoco. Te prometo que arreglaré esto y luego iré contigo. –

– No –

– Horacio... ¿Y que quieres que haga? ¿Voy y les digo "Ey chavales me voy con mi novio que hos jodan, por cierto mi puto padre va a arrancaros a todos la cabeza mientras yo que he echo cosas peores que vosotros me voy de rositas"? –

Horacio se mordió el labio.

– No es eso... yo... debi haberte parado antes... en parte es mi culpa. –

Me gustas...   Gustacio Where stories live. Discover now