Rhaenyra & Daemon | One Shots

Lágrimas de Felicidad (+18) Parte II

¿Cómo no querría? ya no aguantaba las ganas de reclamar el cuerpo y alma de su adorada princesa.

Daemon repatió húmedos besos a lo largo del cuello de Rhaenyra, logrando que suspirara de placer. Los besos fueron bajando hasta toparse con el vestido, así que ágilmente pasó ambas manos hacia la espalda de la joven y sus dedos fueron abriéndose paso por la suave piel.

Sus manos volvieron al frente para bajar la parte superior del vestido y se encontró con el maravilloso cuerpo de Rhaenyra en todo su esplendor, definitivamente ya era toda una mujer.

Antes de balbucear o decir cualquier cosa que delatara lo atónito que estaba, siguió su camino de besos por la delicada clavícula hasta llegar a los pechos de su Rhaenyra.

Daemon se puso de pie, la movió hacia la orilla y le bajó el vestido hasta los tobillos, dejándola completamente desnuda.

—¿No deberías usar algo debajo de esto?

—Hoy no planeaba salir de aquí—habló sonrojada.

—Me encantas—respondió su tío con un tono de adoración.—Creo que falto yo—comenzó a quitarse el cinturón.—Espero que disfrute de la vista princesa.

Ante la atenta mirada de Rhaenyra, Daemon retiró por completo su cinturón y se deshizo de sus ropajes, dejando para el final sus pantalones.

La princesa moría de ansiedad, nunca había visto a un hombre desnudo y siempre imaginó que Daemon estaría "bien dotado", estaba en lo cierto.

Los ojos de Rhaenyra se abrieron más de la cuenta al detenerse en el totalmente erecto miembro de su tío, tenía unas gotitas en la punta y se preguntó a qué se debía. Con nerviosismo y timidez, estiró su mano y lo tocó.

—Te ayudo—su tío le tomó la mano con delicadeza y la instaló en la base de su masculinidad.—Desliza tu mano, así... de abajo hacia arriba, puedes ir acelerando el ritmo.

Rhaenyra quería darle el máximo placer y movió su mano con una rapidez que sorprendió a Daemon

—Princesa, princesa—suspiró—No tan rápido...no quiero acabar en tus bellas manos, al menos no en esta ocasión.—con lentitud se subió a la cama y se colocó de rodillas a un lado de Rhaenyra.

—Veamos si estás lista para mi—Daemon tocó delicadamente el punto sensible de Rhaenyra y ella cerró las piernas instintitavemente.

—Sshh, calma querida sobrina—el príncipe se las separó—Estás tan mojada...¿te has tocado antes?

—Sí—respondió con timidez, "mientras pensaba en ti" dijo para sus adentros.

Daemon introdujo solo un poco su dedo del medio en la húmeda y estrecha entrada de Rhaenyra, ya imaginaba el placer que le entregaría su virginal cuerpo. Repitió el proceso varias veces para que se acostumbrara a la sensación y sumó un dedo extra.

Ella estaba muy sensible y el toque de su tío la hacía temblar.

—Definitivamente estás lista—Daemon quitó sus dedos y sin quitar los ojos de los de su sobrina, llevó sus dedos a la boca para probar los dulces fluidos.

—Deliciosa—se encaramó sobre ella—Eres una verdadera exquisites.—la besó con pasión y pegó levemente su cuerpo al de ella, siempre sosteniéndose con sus antebrazos para no aplastarla.

—Te haré el amor dulcemente princesa—besó su frente—Verás que nadie más podrá hacerte el amor como yo...

Rhaenyra se sentía sobreexcitada y el palpitar de su entrepierna la tenía casi jadeando.