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"Estábamos buscando las razones
Para jugar según las reglas
Pero poco a poco nos dimos cuenta
Que eso era para tontos".

"Mary on a cross" - Ghost.

Habían pasado varios meses, el fin de sus estudios en Gusu Lan había llegado

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Habían pasado varios meses, el fin de sus estudios en Gusu Lan había llegado.

La mayoría saldría feliz de por fin regresar a casa después de el infierno que el maestro Lan Qiren les había hecho pasar por un año entero.

Pero había un grupo de jóvenes que se iban bastante alterados.

"¿Wei Ying?"

El llamado asintió.

"Todo esta en su puesto Lan Zhan, no te preocupes."

El joven de túnicas blancas negó.

"¿Estás bien?."

El pelinegro sonrió.

"Estoy nervioso Lan Zhan, no quiero que nadie tenga que salir herido o peor, temo por madre y por padre."

Lan Zhan decidió que lo mejor era callarlo antes de que empezara a sobrepensar y decidiera no irse.

Pasó sus brazos al rededor de la cintura de su pareja y sostuvo su cabeza en el hueco entre su cuello y su hombro.

El olor del sándalo invadió la nariz de Wei Wuxian y por un momento su mente se puso en blanco.

"Gracias Lan Zhan."

"Mnn"

A lo lejos un pequeño grupo de personas veían la escena y se sentían un poco preocupados.

"A-Cheng, ¿Crees que A-Ying pueda con la presión?." Preguntó Madam Lan.

El joven chasqueo la lengua.

"Claro que no, no estará tranquilo hasta que pasé todo y ustedes manden una carta a Lotus Pier diciendo que están todos bien."

Los dos adultos en ese grupo suspiraron.

"No tienen de que preocuparse, ese imbécil ahora tiene dos razones para cuidarse más, y si lo olvida, yo me encargaré de que las recuerde." Dijo acariciando la espalda del bebé de un año y tres meses.

El joven de amarillo apretó la mano del niño que tenía al lado.

"Wei Wuxian ya no puede arriesgarse sin pensarlo, además,  ahora no solo tiene a la señorita YanLi a su lado, tiene a un hermano menor muy malhumorado, un cuñado muy galán,  dos suegros que lo aprecian, dos padres que lo aman, dos pequeños que lo esperan de regreso, y otro cuñado muy agradable." Dijo el único Jin presente.

"Oh, gracias Joven maestro Jin, no sabia que me consideraba galán." Dijo el más grande de los jades gemelos.

Zixuan rodó los ojos.

Reescribiendo sin tragediasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora