Prólogo

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En la cima de la colina en Portorosso; Luca va a intentar descender en bicicleta como parte de su entrenamiento para la carrera; Inspirado por Giulia que les muestra el tren que va a Génova.
-Quería preguntarte, ¿Tú escuela está abierta para cualquiera?
-Pues, uno tiene que pagar pero eso creo...
En ese momento Alberto se interpone entre ellos y en su conversación para volver al tema de la colina.
-¡Muy bien! Gracias Giulia, por enseñarnos la aburrida cosa que lleva al lugar horrible... Ahora hablemos de lo que importa, si perdemos la carrera nunca saldremos de aquí, Luca...
Tras su cara y la extraña actitud de su amigo, Luca trago saliva y avanzó un poco mirando la empinada bajada que le toca recorrer.
-Santa mozzarella, el descenso...
Al ver lo nervioso que estaba Giulia se acercó para dar ánimos una vez más; Algo que Alberto no espero para hacer notar su inconformidad.
-Parece aterrador, pero te daré unos consejos...
-Ya déjalo en paz un minuto...
-¿Cuál es tu problema, Alberto?
-Soy su amigo, sé lo que necesita...
-¿A si? ¿Y que necesita?
-A mi, descenderemos igual que en la isla...
Y mientras decía eso, Alberto subió a la bicicleta delante de Luca, tomando el control y comenzando el descenso a una muy alta velocidad. Giulia sólo alcanzó a decir que no lo hiciera mientras Luca lo decía de igual forma sujetandose con fuerza al asiento.
-¡Alberto, para!
-¡Es Bruno hablando!
-¡No, estoy seguro de que soy yo!
Mientras bajaban a una velocidad excesiva y al ver que su amigo no quería escuchar, Luca intentó tomar el mando pero Alberto lo negó lo que los llevo a tener que esquivar a un señor con una caja de frutas y finalmente a estrellarse en un varandal metálico y salir volando por la velocidad. Ambos cayeron en el mar, sanos y salvos con su transformación en monstruo marino.

Se esconden detrás de unas rocas para evitar que Giulia, quien encontró la bicicleta y los buscaba, los viera en su estado natural.
-Ella nos va a ver, vamos Alberto...
Antes de que pudieran salir a tierra, Alberto lo detuvo aún debajo del mar.
-Recuerda el plan, Luca, ganar la carrera para conseguir la Vespa y salir de aquí...
-Alberto, ¿Qué pasa contigo?
-Te muestro como se hacen las cosas, recuerda, actúa como yo y todo saldrá bien...
-¡Es que no quiero!
-¿Qué?
-¡Eso no va a cambiar nada, mis padres ya me vieron!
-Por enésima vez, tus padres no están aquí...
-No sabes lo que estas diciendo...
-Luca, Luca, tranquilo...
Alberto puso una mano en su hombro pero fue rechazado, fue ahí cuando tomó a Luca por los hombros y lo hizo que lo mirará.
-¿A que crees que estas jugando?
-Sueltame, Alberto...
-Luca, sé lo que estas pensando pero no te hagas ilusiones, ¿Qué crees que Giulia hará cuando vea tu cara de pez? No somos ellos, somos nosotros y ellos...
-Quiero ir a la escuela, conocer el mundo...
-¡Y te dije que lo haríamos!
-¡Tú sólo piensas en ti!
Molesto por el comentario, Alberto golpeó a Luca quien no dudo en defenderse, ahora eran dos monstruos marinos en una lucha, algo que no paso desapercibido en la superficie; Pero ellos no se daban cuenta de lo que estaban causando, cegados por el enojo del momento.
-¡Pienso en nosotros!
-¡¿Entonces porque no respetas lo que quiero?!
-¡Porque empezaste conmigo! ¡¿Lo olvidas?!
Al escucharlo, Luca dejo de pelear y lo miro con tristeza, aunque Alberto también lo miraba pero con seriedad; Se alejó de él y se abrazo un poco a si mismo.
-Alberto, yo...
-Olvidalo Luca, ya vi que no soy yo lo que quieres, esta bien, ganemos la carrera y sigamos nuestros caminos... Separados...
Después de eso Alberto nado a la superficie pero cuando miro hacía atrás Luca ya no estaba.
-¿Luca? ¡Luca, esto no es gracioso!
Al nadar se encontró con la ropa de su amigo clavada en un arpon al fondo; Tomó la ropa y la arranco, miro a todos lados con desesperación, en ese momento un bote paso por la superficie.
-Ay no, ¡Luca!
Alberto siguió ese bote y de mucho que nado al sacar la cabeza se dio cuenta que se alejaba de Portorosso al parecer aquel bote era un cazador de otro lugar. Se quedó flotando en medio del océano, mirando el bote alejarse y después a Portorosso una y otra vez.
-Lo siento, Luca...
Con lágrimas en los ojos decidió volver a Portorosso, el anochecer se hizo presente y logró llegar a la costa pero se mantuvo lejos del agua y mirando al horizonte abrazando la camisa de su amigo; Ahora las lágrimas salían a montones, no podía creer lo que sucedió.
-Luca...
-¡Alberto!
Giulia llego junto con su padre y abrazo al chico al mirar el estado en el que se encontraba; Alberto no la abrazaba pero tampoco lo impedía, no quería separarse del recuerdo de Luca.
-Alberto, ¿Donde está Luca?
-Lo siento... Yo... No pude protegerlo...
-¿Qué?
No fue necesario más explicaciones, entendieron el punto y lo trágico del suceso.

Después de algunos meses de tristeza, soledad y lamentos, Alberto finalmente aceptó la oferta del padre de Giulia al mudarse con él. La compañía mutua les ayudaba bastante y curiosamente formaban el lazo de padre e hijo; Alberto encontró un padre en él.

En cuanto a Giulia, ella tuvo que volver a Génova para continuar con sus estudios; Portorosso jamás volvió a ser lo mismo para ella después de conocer a esos chicos.

♡♡Y MENOS DESPUÉS DE GANAR LA COPA PORTOROSSO.♡♡

Sueños cumplidos.
Giulia dio fin al horrible reinado de Ercule y ahora era una chica popular en el lugar.
Alberto logró comprar la Vespa que Luca y él soñaron, sólo falta repararla y después iría a conocer el mundo para honrar su memoria por siempre en su corazón.

ł¤ De eso ya hace mucho tiempo atrás ¤ł

Ahora...
Con el paso del tiempo todo cambia, crece y madura y 6 años no pasan en vano.

En una casa mientras preparaban la cena, padre e hijo charlaban cómodamente y algo emocionados.
-Que emoción, falta poco para que Giulia vuelva...
-Viene todo los veranos desde que tenía 13, estoy seguro que está vez no fallará hijo...
-Lo sé, lo sé, sólo digo que es emocionante, podré mostrarle los avances en la Vespa y en mi arte culinario claro está...
-Hahaha, esa pasta quemada al pesto le fascinara...
-¿Qué? Papá, hablo enserio hahaha...

Después de esa cena exquisita y una despedida, Alberto salió y trepó el árbol donde dormía todas las noches bajo los peces.
-Descansa, Luca...

Luca: 》El Fondo del Corazón《Where stories live. Discover now