¿Qué haces cuando todo lo que creías que era verdad, resulta ser una mentira?
Harry Potter siempre creyó que sus padres eran James Potter y Lily Evans, pero resulto que todo este tiempo una venda cubría sus ojos.
Sirius Black llego a su vida, para q...
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Hordas de diversos hechizos eran lanzados en el Ministerio de Magia, al parecer el pequeño Potter jamás podría mantenerse tranquilo y había decidido huir a una misión secreta en medio de la noche con el único objetivo de encontrar una prematura muerte.
Afortunadamente para el aun inexperto grupo de estudiantes suicidas, como venía llamándoles Lucinda Avery en todo el camino, la Orden del Fénix llego a tiempo para ayudarles a ganar aquella batalla contra mortifagos
-Avada...- Bellatrix Lestrange alzaba su varita cuando sintió una punzada sobre su cuello interrumpiéndola
-Mantente a salvo- Sirius Black asistió agradecido de ser salvado y corrió rápidamente hacia Harry para protegerlo.
Esta no era su batalla.
Después de todo, Lucinda Avery y Bellatrix Lestrange tenían cuentas pendientes por arreglar.
Detrás de ella, Lucinda sostenía con fuerza su varita, fue imposible para ella no incrementar dicha fuerza al notar como los ojos de aquella bruja brillaban al reconocerla y como todos los recuerdos llegaban a su memoria. Se convertía nuevamente en aquella adolescente temerosa por no querer cumplir su destino -Dulce Avery, ¿Vienes por más Crucios? ¿No tuviste suficiente con todos aquellos?- rio burlonamente -Esta pequeña perra creyó que con no decir nada, sus amigos estarían vivos- sintió como la punta de la varita de la más joven se encajaba más en su cuello, impidiéndole respirar -¿Toque un nervio sensible? Me pregunto que pensaran tus padres cuando les cuente que finalmente la rata sucia de su hija ha decido ver la luz del Sol.
Nuevamente, tenía que luchar con sus demonios del pasado y el demonio mayor estaba frente a ella.
Sonrió cuando sintió como el agarre disminuía -Sigues siendo igual de imbécil, temiéndole a las decisiones de mamá y papá, deja de luchar Avery y únete a donde perteneces, sigue los pasos de tu hermano.
Lucinda por primera vez, pudo reaccionar ante la mención de sus padres, alzo con más fuerza su varita -Jamás- saboreo cada letra de aquella palabra antes de soltar un Crucio en su dirección.
Devolviéndole un poco de todo el dolor que ella le había causado, aun podía sentir sus cicatrices arder ante aquellos recuerdos.
Bellatrix Lestrange igual de demente que siempre, reía con fuerza por los efectos de su hechizo favorito.
Al parecer la pequeña Lucinda Avery, había crecido.
Alzo su varita para contratacar pero perdió su objetivo al ver como Sirius Black corría hasta ella y desaparecían en la brevedad de un hechizo de aparición.
Harry leía el Profeta, Lucius Malfoy había sido capturado y enviado a Azkaban junto a otro grupo de mortifagos, una pequeña victoria para el niño que vivió.
