El novio de Jaemin - adp. Jaeno

Chapter 5

       Atrevida rompe hogares

Luego de que el segundo mayor recuperará su estabilidad, no continuaron con el tema y lo cambiaron completamente. Ahora todos estaban limpiando la cocina y el comedor, ayudando al dueño de la casa con el orden. Aunque lo único que quedaron al final, fueron Chenle Y Jeno, quiénes estaban lavando los trastes. Este último casi golpeó el más bajito por milímetro para que lo dejara ayudar. El de rulos se estaba negando completamente, hasta que una lamparita se encendió en su cabeza iluminando una nueva idea, por lo que finalmente acepto. se creía el más capacitado para que ella charla de suma importancia, nadie podría hacerlo como él.

- Sabes…  –  comenzó con su plan luego de haber intercambiado un sin fin de palabras con el pelirosa, encontrando aquel momento justo para hacerlo. El l mayor emitió sonido para indicarle que lo oía, estaba concentrada en secar los platos, pero sus oídos estaban puestos en él  –. No sé si  hyung le haya mencionado de ello, pero creo que me veo en la necesidad de advertirle. Usted y Jam hyung hacen una bonita pareja, no quiero que nadie ajeno se interponga en ella.

- Primero no es necesario tanta formalidad conmigo, Chenle-ssi puedes tutearme, incluso puedes llamarme hyung si deseas  – aclaro antes determinar prosiguiera –. Y segundo, eso es adorable y por la manera en la que hablas, me parece interesante, así que voy a oírte por completo antes de hablar  – y el menor asintió con su cabeza, sintiendo agradable poder tratar con confianza su mayor

- Está bien, entonces, hyung a  – dijo aquello con una ligera sonrisa, provocando una risa nasal en Jeno  –. Yo tampoco quiero sonar como un entrometido, Pero sería bueno comentárselo  – agregó antes de continuar –; hace tiempo quizá un año y un poco más, Jaemin hyung consiguió una, uhm… ¿Admiradora? Es una chica de nuestra facultad, desde que conoció a Jaemin no ha dejado de estar cerca de él cuando tiene el tiempo. Ella es amable y hasta agradable, pero a veces un poco…  – se pauso, buscando la palabra correcta para definir a la muchacha –  un poco intensa  – definió luego de encontrarla –. A lo que voy, es que ella de verdad Está súper enculada con Jaemin hyung, y no dudo en que al enterarse de la relación de ustedes dos, buscara la manera de entrometerse y crear problemas. El no le Presta atención, pero su intensidad es demasiado y bueno…

Aquel dato, - chisme más bien-, hizo reír a Jeno. Oh, claro que sabía cerca de esa chica, conocía su nombre, edad y rostro perfectamente; Shin Yuna. Su novio se había encargado de hacerlo saber mucho antes de que su relación comenzará. Aún recuerda con gracia que haya conversación que tuvo con Jaemin una salida amistosa, que no fue tan amistosa. El alto no tuvo pelos en la lengua al hablar de la chica, comentándole lo fastidio qué se le hacía está y su coqueteo totalmente indiscreto. Jaemin claramente no estaba interesado en ella y se lo hizo saber múltiples de veces, pero está parecía ser más terca que una mula y seguía intentando conquistar el día ocupado corazón de Na Jaemin.

- Oh, Chenle-ssi claro que lo sé  – agregó finalmente, sonriendo –, hablas de Shin Yuna ¿verdad?  –  Chenle asintió varias veces con su cabeza, desordenando sus rulos por la por la busco que había sido  –. Si, la conozco Jaeminie me habló de ella antes de que siquiera comenzáramos a salir.

- Oh ¿si lo hizo? – pronunció con una “o” formando en sus labios –. Genial entonces, supongo que estás preparado para cualquier cosa que es atrevida pueda llegar a causar ¿no? – el mayor río.

- Claro que sí, para Jaemin siempre estoy preparado. No dejaré que ningún atrevida rompe hogares se meta en mi relación – formó un puño con su mano, alzándolo en un gesto de fuerza, haciendo reír al contrario. Iba en serio, les costó mucho poder construir aquella relación junto a su novio, no iba a permitir algo así –. Pero dime ¿hay alguna otra admiradora o admirador que tiene sus ojitos en mi novio?
- Hasta donde se, no, hyung. Quizás hay alguno que otro por ahí, pero Yuna es la única que fue capaz de acercarse a él. Aún me sorprende que no haya tenido miedo a su cara de pocos amigos. La primera vez que lo vi, a mí sí me lo dio – agregó con una risa, contagiandosela al contrario.

- Y dime, ¿tú tienes algún admirador? – cuestiono el mayor alzando sus cejas sugestivamente, robándole un sonrojo a Chenle –¡ ¡oh! ¿Eso quiere decir que sí? – molesto con una sonrisa, el menor negó –
Uhm, entonces… ¿es que tú eres el admirador secreto de alguien? – preguntó ahora, logrando que su contrario se sonrojada aún más.

¡Bingo! pobre Chenle, ahora sería el quién fuera sometido a un interrogatorio.

- ¿es alguien de tu facultad? – pregunto y el otro negó. Por alguna razón, parecía que el gato le había comido la lengua, aunque que gato había tenido lindos ojos de perrito y pelo rosa –. Uhm, entonces es alguien de tus amigos? – supo que había acertado cuando escucho la risa tímida de Chenle – ¿Yeji? ¿Soojin? – comenzó a nombrar los buscando a alguien algún cambio en su rostro y cuerpo.

Con el nombre de las chicas Fue totalmente indiferente. “YunkHei”,” Jeongin” pero nuevamente se mostró indiferente.

- ¿Jaemin…?  – pregunto Jeno en un tono abajo y casi aterrado pero el menor oír el nombre de su amigo negó apresuradamente.

- Oh, ¡no, hyung, por favor!  – chillo haciendo una mueca de asco

- Está bien, Chenle- ssi. Pero esa mueca no era necesaria ¿sabes? Mi novio es lindo y no me sorprendía que te gustase – hablo casi ofendido, Chenle riendo apenado. En un susurro continúo: –. Entonces es Jinsung, ¿cierto? – Pregunto finalmente y sonrío malicioso cuando el sonrojo del contrario volvió a sus mejillas, mientras asentía lentamente con la cabeza.

- S- Sí… – comentó en tono bajito, acercándose más el mayor. Por alguna razón este le transmitió completa confianza, así que no temía contarle su secreto más íntimo –. El  me gusta desde hace mucho tiempo, pero nunca pude decírselo. Me da terror pensar que por ello, se aleje de mí y por lo mismo, de nuestro grupo de amigos. El es bisexual, por lo que sé que hay una pequeñísima oportunidad para mí. Pero no quiero arriesgarme, nunca recibí algún tipo de señal de su parte y tampoco quiero perderlo…

- Oh lo entiendo  – murmuro ahora Jeno, con una mueca rara en su rostro –. Pero, ¿realmente nunca te dio una señal? ¿o eres tú quién nunca la noto? – cuestionó ahora, Chenle lo miro extrañado – ¿Acaso nunca notaste Cómo espera tu atención? Me gusta hacer ver mucho y llegué a pensar que estaba enganchado por ti. No es por ilusionarte, pero no creo que sería malo tomar el riesgo de declararte ¿comprendes? Quizás te encuentras con una sorpresa… – sugirió, dejando su menor pensando en silencio hasta que nuevamente hablo; – pero si no quieres arriesgarte del todo, solo has de saber que te interesa sin decírselo directamente ¿sabes a lo que me refiero?

- Uhm, sí. Creo que sí, hyung  – respondió dudoso, pero tenía una idea en mente.

- Inténtalo para ver si te rechaza o no, tal vez así puedes encontrar qué hacer con seguridad. sólo si lo deseas, si no quieres declararte y mantener todo un secreto como siempre lo hiciste, está bien lele – el nombrado sonrío por aquel nuevo apodo –. Después de todo son tus sentimientos y tú sabes como manejarlos, y solo te aconsejo por si deseas ayuda.

- Si, Jen  – no pudo continuar su palabras porque el rey de Roma acaba de entrar a la cocina, cortándole la respiración al preguntar.

- Oh, ¿te gusta alguien, hyung?  – sus palabras retumbaron en los oídos del llamado hyung. Los grandes ojos de Jinsung estaban sobre él, sin saber si reflejan curiosidad o decepción. Dos emociones totalmente diferentes, pero no podía leerla.

Jeno miro al par, más concentrándose en el chico de rulos, que de repente se había congelado en su lugar sin saber que responder. Creyó que debía ayudar, por lo que estuvo apunto de habla,  pero Chenle lo hizo primero.

- Si, me gustas tú – salto tan repentinamente que Jinsung no fue el único sorprendido, el pelirosa también.

El menor de todos se desarrolló fuertemente con su lindos ojos llenos de sorpresa y poniéndose tímido totalmente. El mayor ys se sentía sobrar, por lo que en silencio salió de la cocina, haciéndoles señas de ánimo a Chenle.

Suerte, susurro. Quizás la necesitaría. ¡Animo, Chenle-ssi, fighting!.