Regulus Black y tú [COMPLETA]

Hermanos Black

-Suéltame -ordeno.

-¿O qué?

-O terminarás en la enfermería -sonrío-. ¿No te da vergüenza que te gane tu hermano pequeño?

-Escúchame, guapa -aprieta su agarre-, si tu novio vuelve a tocar a mi pequeña ratita, no seré yo el que termine en la enfermería.

-Los problemas que tengas con tu hermano, me los paso por el coño como el papel higiénico -tiré de la manga y logré que la soltara.

Giré por otro de los mil pasillos que tiene este castillo, pero me quedé ahí quieta, oculta a la vista detrás de una columna. No soy tan tonta como para no haber notado que Regulus nos seguía.

-La última vez te dije que la dejaras, fue por las buenas -escuché a Regulus-. Parece que no aprendes.

-Tú tampoco -responde Sirius-. Llevas años detrás de ella, y la verdad es que nadie entiende por qué. ¿Ahora eres feliz, o no es como esperabas? -empieza a reír a carcajadas-. ¿Ya le contaste tu secretito? -Regulus no respondió-. Eres muy valiente a la hora de cerrar el puño y muy cobarde para abrir la boca.

-Lo que hable con mi novia es cosa mía.

-Si supiera la verdad, no sería tu novia.

Escuché un golpe en la pared.

-No te metas en mi vida.

-¿Llamas vida a esto? Siempre intenté protegerte, pero hiciste caso a mamá -hace una pausa-. Intenté que vinieras conmigo cuando me fui, pero estabas en casa de esa maldita serpiente.

-Nunca lo entenderías.

-El que no lo entiende eres tú -le contradice Sirius-. ¿Alguna vez imaginaste en como reaccionará _____ cuando se entere?

-No tiene porqué saberlo.

-Aún no entiendo como se lo ocultas. ¿Es que no os acostáis? Tendría que haberte visto la marca.

Sirius empezó a reirse de nuevo.

>>Tuvo que quedarse con el Black más aburrido.

-¿Estás celoso? -se notaba diversión en el tono de voz de Regulus.

-¿Por ese troll? Ya le gustaría tener el privilegio de que yo fuese detrás suya.

-Estás celoso -afirma-. Pero te diré un secreto -baja el volumen-, tú no sabes tratar a las mujeres, por eso prefieren al Black de Slytherin.

-Pero yo las conozco, sé como reaccionan entre ellas. ¿Qué crees que piensa tu chica cuando las otras babean por ti?

-Digamos que no le da importancia.

-¿Tampoco se lo has contado? ¡Eres una caja de sorpresas, hermanito!

Escuché pasos que se aproximaban y no me quedó otra opción que trepar por la columna. Le vi pasar por debajo forzando una risa. Regulus fue por el mismo camino pero en silencio. Bajé cuando ambos giraron la esquina.
Bueno, más que bajar me caí de culo.

-¿Espiando de nuevo, Prayed?

Ay, mierda...

-¿Puedo ayudarte en algo, Peeves?

-¿Sabe tu novio que le espías?

-Pues claro que lo sé -responde Regulus llegando a donde estoy con Peeves-. Piérdete por ahí, fantasma gruñón.

-¡NO SOY UN FANTASMA!

-¿Ves que me importe?

Peeves se fue de ahí enfadado.

>>¿Escuchaste todo?

Se veía serio y nervioso, como si temiera la respuesta.

-Lo siento...

-Necesito que me dejes mi espacio. No puedes estar siguiéndome a cada paso que doy.

-¿Y tú sí? -me encaré.

-Si te seguí es porque vi a Sirius.

-Claro, como la primera vez, ¿no? O como cuando discutí con Severus. ¿Y qué me dices de leerme la mente?

-Ya te dije porqué lo hice.

-Eres un mentiroso. Dijiste que conmigo era diferente, que querías conocerme y darme privacidad.

Es la primera vez en mi vida que encaro a alguien sin echarme a llorar de camino.

-Si fueses sincera no tendría que hacerlo.

-¿Y tú eres sincero? -subo el tono de voz-. ¿No tienes nada que decirme de "tu secretito", o qué tal de las chicas que te van detrás? ¿Y si todos tienen razón y realmente estás jugando conmigo?

-¿Después de todo lo que hice en estos cuatro meses aún dudas de si te quiero de verdad? -se le quebró la voz.

Se sentó en el suelo apoyando la espalda a la pared y apoyó su cabeza en los antebrazos sobre sus rodillas. Me arrodillé a su lado izquierdo. Intenté cogerle la mano, pero se intentó apartar.

-Regulus -acaricié sus hombros, parece que se relajó-, lo siento. Cuando me enfado no pienso en lo que digo.

Con su brazo izquierdo me sentó a su lado y se abrazó a mi. Terminó tumbado en el suelo con su cabeza apoyada en mis piernas.

Estuvimos en silencio un rato haciéndole esas caricias en el pelo que tanto le relajan. Íbamos a llegar tarde a clase, pero seguro que ninguno de los dos teníamos pensamiento de asistir.

>>Me he pasado -no respondió-. ¿No vas a decir nada? -suspiré-. Lo siento, mejor me callo -por inercia, después de muchas semanas, comencé a rascarme las cutículas de las uñas-. Sé que hablo demasiado, pero es -me seco una lágrima-...

-¿Todavía sigues con eso? -se incorpora.

-Lo siento -susurré.

Regulus solo suspiró.

-Deja de disculparte por todo -me sujetó las manos y me inmovilizó-, y deja de hacerte daño -carraspea-. Tenemos que hablar. ¿Esta noche?

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¿Black de Gryffindor o Black de Slytherin?