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Todos celebraban la aparición del erizo más famoso en todo Mobious.

Tres meses en que Sonic The Hedgehog a estado salvando vidas de cosas triviales como robos menores, construcciones en ruinas a punto de caer e incendios extrañamente masivos. Son tres meses en los que él y Tails no se ven, no notaba el paso de los días por andar pensando siempre en ayudar, y sin darse cuenta esta donde está. Acostado en la rama de un árbol, justo en este momento donde su cabeza empieza a maquinar y hacerle entender que su decisión haya sido la mejor.

Ninguno sabe nada del otro desde que se fue dejando la carta, de verdad creyó que era buena idea pero, ahora se arrepiente con todas sus ganas. Es decir, tails no es un fanático del drama y es más que probable que se haya enfadado mucho con él, y en algún momento cuando se lo cruce se lo va a reprochar... Sin embargo a Sonic le gusta ese lado mandón y serio del zorro, le hace recordar que siempre tiene a alguien que le presta atención y le importa, ese momento amargo le trae color a su mente, disipando muy sutil ese enorme charco gris dentro de su cabeza, "¿Por qué me trae tanto color cada vez que lo veo?", pensó al instante.

Siempre se pregunto el porqué de su condición, Sonic solía pasar sus días viendo todo con tonos demasiados grises, hasta que llegaron Tails y Amy, ese par le traían una infinidad de tonos vivos a su sistema y al entorno donde se encontrasen, era simplemente mágico y extraño. No importa la hora, o el lugar, solo con pasar el tiempo con alguno de los dos le trae una felicidad inmensa a Sonic, lo disfruta y le confunde al mismo tiempo.

Al día siguiente tomó carrera con rumbo a la casa de una familia mayor, cargando consigo pan y leche, cruzaba la calle principal cuando sintió una muy mala sensación de estar siendo observado, parecía imposible teniendo en cuenta que eran las cinco de la madrugada y las callen estaban desiertas, lo más preocupante era que esa mirada venía con aire morboso, curioso y depredador. ¿Será solo intuición suya?. Con eso le suma las noches sin dormir —duerme dos días a la semana— para estar completamente seguro de que ya están dando los efecto el insomnio; solo faltaba el mareo y la pérdida de memoria.

Pasaron los segundos y en un instante ya se mostraba con esa típica sonrisa mientras le entregaba la mercadería a aquella familia de cuatro integrantes.
Se despidió convencido de que podría dejar la mañana y pegar el ojo, sin que mencionace nada de su plan la señora del hogar lo invito a pasar la noche, cosa que le vino al pelo a Sonic que sin rechistar acepto agradecido. Entró, dejando a la molesta sensación atrás,

Y a ese ser que lo acosaba sin piedad.

Su siesta duró nada más que cuatro horas y media debido a lo acogedora de las mantas, saludo, acomodó las cosas y salió volando en busca de ayudar, habitualmente trota por las calles o se sube al edificio más alto, su visión no es perfecta claro, pero sus oídos lo compensan demasiado bien, y ahí simplemente pasa el resto del día, ayudando, reparando o haciendo cualquier cosa que lo mantenga distraído, alejado de su mente y nervios carcomiendo su interior a velocidades sobrehumanas. Hasta ahora se encuentra calmado y activo.

Hasta después del incendio dentro del granero... Sonic oyó los gritos de ayuda y los mobian le avisaron casi al instante, llegó en un parpadeo y se apresuró con baldes llenos de agua, los bomberos cayeron segundos después y sin labiar comenzaron a ayudar, eventualmente lograron disipar el fuego y Sonic tuvo la chance de entrar para salvar a los aldeanos atrapados adentro, sin creerse que adentro se encontraba su compañero Tails, fue difícil divisarlo bien por todo el humo, pero él estaba seguro de que era el zorro. Apresuró el rescate y saco a todos de esa destruida construcción, recibiendo los halagos e agradecimientos echo prisa en busca de su ahora muy creída alucinación, "¿por qué le hago caso a mi cerebro?, es imposible que Tails esté aquí.", se reprocha buscando con la mirada desesperada al joven zorro entre la multitud. Llegando a los callejones del pueblo.

Al ver por más de media hora no logró percibir al chico por ningún lado, suspiro, de repente sintió una mirada, la misma mirada que aquella noche, el escalofrío le recorrió con total rapidez por el cuello bajando hasta la espina dorsal, frío, denso y aterrador.

Volteó congelado del miedo por tal sentimiento y sus ojo no pudieron creer lo que percibían, sus labios temblaban de nerviosismo al igual que sus enguantadas manos mientras daba ligeros pasos hacia atrás, ¿realmente no le fallaba la vista?, ¿enserio era el verdadero Tails?. Su pulso aceleró instantáneamente, el chico solo lo observaba de forma tranquila frente a él, con esos enormes ojos celestes y mostrando su sonrisa común como si no supiera que es lo que pasaba.

—¿Ta–Tails?, ¿Qu–qué haces a–aquí?—, pregunto intentando mantenerse lo más sereno posible.

Su contrario ensanchó su gesto y una voz forzada le respondió, "Solo vine a verte, fue realmente genial el como ayudaste a esos... ¡seres no relevantes! de ese incendio.", como si de un corto se tratase el chico lo dijo de manera muy extraña.

— ¿"No relevantes"?—. Sonic no lo pensó ni un poco y en menos de un segundo pudo observar con claridad de que algo andaba demasiado mal.

—¿Así que... ¿de verdad crees que fui genial?, el verdadero Tails no sólo diría genial...

El héroe esbozó una sonrisa extraña, mientras caminaba de manera tranquila y peligrosa hacia el zorro, que por su parte no le veía problema alguno a su amenazadora forma de acercarse. Al contrario de eso, solo trataba de no despegar la mirada de él. Sonic lo llevaba poco a poco hasta chocar con una pared y ahí habló.

—¿Quién eres en verdad? —, susurra de forma amenazadora.

—¡Yo soy Tails! —, Afirmó.

—¡Mentira!, ¡dime que es lo que buscas!.

—¡Te busco a ti, busco a Sonic!.

El erizo volteó confundido, ¡¿como diablos puede contestar de forma tan natural?!, el que debería estar temblando es el zorro no él!.

—¡Deja de bromear, dime por qué te pareces a Tails y por qué actúas tan raro!. ¡Tu no eres él, de eso estoy más que seguro!—, exclamó desesperado tomándolo de los hombros.

El joven rubio esfumó su tan alegre sonrisa, y sin titubeos simplemente lo besó, dándole una corriente eléctrica por todo su cuerpo, Sonic esta estupefacto, congelado, aterrado, "¡¿Que mierda está pasando?!", piensa del pavor.
El momento fue silencioso, el héroe no reaccionó hasta que comienza a sentir unas manos sobre su pecho, en ese instante impactó un golpe con enorme fuerza sobre el ojo del menor, lo que causó un choque entre ambos. Sonic se alejó y observó molesto al joven.

No podía para de observarlo.

Sobre todo con ese ojo destrozado enrojecido echando chispas.

Amor Robótico.

Amor RoboticoWhere stories live. Discover now