Capítulo 1

48 20 9
                                    

Amanece en el hemisferio norte del planeta Misterio, los dos soles se elevan en el horizonte como hermosas esferas brillantes, uno es grande y azul mientras el siguiente es pequeño y amarillo, del otro lado se ve una hermosa estrella de neutrones o también conocida como Pulsar y a unos grados cerca de esta se logra ver con gran facilidad la rojiza y hermosa luna de Misterio.

La actividad cotidiana de las personas inicia con normalidad, vendedores, doctores e ingenieros se dirigen hacia sus lugares de trabajo, algunos van en su propia nave y otros en los abarrotados transportes públicos, los cuales van tan repletos que se asemejan más a latas de sardinas llenas hasta el tope que a una nave, esto es algo que se repite a diario en esta enorme ciudad.

Las ciudades de Misterio no son precisamente pequeñas, a decir verdad, son enormes con grandes rascacielos y amplios mercados con centros comerciales, parques y bases militares como cualquier ciudad de la Tierra pero con una gran y notable diferencia: Misterio está habitada no sólo por humanos, sino también por un centenar de razas provenientes de todas partes.

Hoy es el día 182500 desde que sus antepasados llegaron de la tierra, una placa digital en el centro de la ciudad llamada “Génesis” muestra esta cifra acompañada de una frase “La Tierra es la cuna de nuestra civilización pero Misterio nos salvó de la extinción”.

El general de la ciudad: Iron, está sentado en uno de los balcones de la gran base militar observando con mucha atención como la luz de los soles trata de penetrar el oscuro mar pero sin éxito, de repente su concentración se interrumpe por el ruido de la rechinante puerta automática que da al balcón, Iron mira de reojo y se da cuenta que es su Hija, Amelia.

Ella se sienta junto a su padre, el cual muestra una mirada fría y vacía, ella lo mira a los ojos y enseguida baja la mirada—Mi larga búsqueda ha cosechado frutos, encontré una medicina experimental para tu enfermedad Padre, los Busters me la ofrecieron.

—Te he dicho mil veces que olvides el tema, mi muerte es irremediable—responde Iron mientras observa a Amelia sacar de su bolsillo un recipiente tubular de color verde.

—Has hecho tanto por este planeta padre, el pueblo es próspero, la riqueza abundante, la medicina es tan avanzada que nuestro índice de vida supera los 120 años, tú no puedes morir sin pelear, nuestros médicos encontrarán la cura pronto—dice Amelia mientras pone la medicina en las manos de Iron y una lagrima rueda por su rosada mejilla. —Los médicos han hecho todo lo posible, ellos no pueden erradicar lo que hay en mi cabeza, ya que siempre se empeña en aparecer de nuevo y con más fuerza, es irónico que, a pesar de todos los avances en la medicina, un tumor cerebral aún sea tan mortífero—responde el General.

—¿Y las visiones siguen empeorando?— pregunta Amelia.

—Todo lo veo distorsionado, más pequeño, más grande o más distante de lo que en realidad se encuentra pero realmente ya me estoy adaptando— dice Iron mientras sonríe con ironía.

—Te envidio por mantener tu buen humor a pesar de la situación, yo estaría totalmente deprimida si estuviera en tus zapatos, por cierto...

En ese momento entra el joven comandante Loz interrumpiendo la reunión de padre e hija para informar— ¡Señor, el transporte de Amelia ha llegado, la están esperando para llevarla a la carrera en Altar!— informa el joven mientras mira de pie a cabeza a Amelia.

—Mi madre merece saber lo que pasa contigo padre, no la dejes fuera de esto te lo pido— Amelia se retira mirando con desprecio al Joven Loz. —Amelia piensa que me he dado por vencido, pero está muy equivocada no dejaré que esta enfermedad acabe conmigo y con todos los planes que tengo—dice Iron mientras mira el Planeta Antártico hogar de los Spank, enemigos de Misterio, que se divisa majestuosamente en el firmamento justo en medio de los dos soles.

—Señor, tenemos que irnos, caso contrario no llegaremos a tiempo a la carrera de su hija—dice el nervioso Loz.

Iron se pone de pie y de repente un mareo muy fuerte nubla su visión, Loz actúa rápidamente y ayuda a Iron impidiendo su caída, finalmente se dirigen hacia el hangar y suben a su nave acompañados de varios soldados fuertemente armados. Atilia, la bella esposa de Iron mira desde una ventana la partida de la nave, mientras se despide moviendo su mano derecha; con una mirada irónica,  muerde sus labios muy sensualmente mientras un hombre besa sus glúteos con desesperación. Atilia cierra la ventana y da rienda suelta a sus bajos instintos con aquel hombre llamado Insu, General de la ciudad vecina y mejor amigo de Iron.

Altar:

Iron, Loz y sus Soldados se encuentran ya en Altar, el cual es un planeta rocoso ubicado más allá del Planeta Kepler a unos 40 millones de kilómetros de Misterio, su estrella principal es un Pulsar, el firmamento es un completo espectáculo visual, en aquel lugar se lleva a cabo una competencia interplanetaria anual, es una carrera en la cual participan los mejores soldados de toda la galaxia excepto la marginada Tierra.

La pista de la carrera es un lago, un gran lago de tonalidad roja lleno de rocas gigantes, especies depredadoras, laberintos naturales por dentro y fuera del agua, definitivamente es el lugar idóneo para poner a prueba la astucia y habilidad de todos los competidores. Cada año el evento es organizado por los Lymm, una especie alienígena muy audaz y con una audición muy aguda pero hay una característica que los distingue de las demás especies, ellos no son fuertes físicamente pero su inteligencia es capaz de crear las más fulminantes armas de destrucción, en su mayoría son científicos muy talentosos o recolectores de minerales en los asteroides y lunas de toda la galaxia.

Iron, sentado en su Palco, se percata de la llegada del General del planeta antártico, el líder de los Spank. Su estado de ánimo cambia por completo, el Spank se sienta en el palco consiguiente al suyo, las miradas de los dos generales se cruzan, de repente se escucha un sonido extraño y estruendoso, esa es una señal de que la carrera ha comenzado. Todos están alborotados apoyando cada uno a su competidor, Loz y los soldados de Misterio están muy emocionados apoyando a Amelia desde las gradas, están tan entretenidos que no se dan cuenta que un extraño encapuchado volando mediante unos propulsores en su dorso se acerca lentamente al palco de Iron, el extraño saca un arma de su bolsillo y se dispone a matar a Iron por la espalda, el Spank asienta su cabeza confirmándole al asesino que actué de inmediato.

Planeta Misterio Vol.1 "Invasión a la Tierra"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora