ACTO II (Quinceava Escena)

Start from the beginning
                                    

Rutenlo: (entristecido) Iryutia, no llores por favor. Apenas podemos tener calma en estos días, porque no has parado de llorar durante muchos días. Ya veo que nuestro hijo está sufriendo por no poder realizar el deporte que le gusta. Es su pasión y no podemos tener problemas con él. Su equipo es importante para él.

Wenko: (reservado) Entrenador, ahora me hallo en mi etapa donde no quiero hablar con nadie. Ya le digo que no tengo la necesidad de salir a menos que sea para ayudar. Además, creo que el fútbol solo es un hobbie a comparación de las demás actividades de mi tiempo. Me da tristeza decirle adiós, pero debo aceptar mi realidad. 

Gortuno: (comprensivo) Wenko, voy a aceptar tu decisión, pero créeme que es difícil para mí. Veo que ya no quieres dialogar conmigo, pero tampoco espero que regreses. Ya no quiero forzarte a regresar si de todos modos ya no te sientes a gusto con tus gustos. Quiero que no me olvides y que nuestro contacto no termine aquí.

Iryutia: (llorando) Gortuno, mi hijo lleva entrenando por más de cinco años, pero eso va a cambiar en estos días. Ahora va a estar trabajando en un restaurante. Debe concentrarse en lo que venga de su vida. El fútbol puede ser un pasatiempo, pero nunca un oficio para su futuro. Créeme que yo como su madre me duele que deje atrás lo que sueña 

Rutenlo: (entristecido) Es triste cuando una persona no deja hacer lo que tú quieras. Es tan injusto que incluso Wenko no entienda que la vida será muy dura para él, porque quiero que pronto empecemos a enseñarle cosas. Además, creo que yo podría comenzar a ser un guía para él, porque pienso que le serviría para mejorar.

Wenko: (reservado) Gortuno, es increíbleque todavía tengamos confianza cuando ya ni siquiera nos vemos. Además, creoque posiblemente yo comenzaré a tener responsabilidades que no quiero tener enningún momento. Tal vez una buena forma de demostrarle a usted que he cambiadoes mi propia actitud. Encima estoy triste

Gortuno: (comprensivo) Iryutia, es increíble que seas una madre que no empatiza con su propio hijo. Solo eres una mujer que no sabe entender el sueño de su hijo por ser un gran futbolista. Además, creo que deberías apoyarlo incondicionalmente sin decirle que usted va a interferir en su vida. Pienso que podría tener gran éxito Wenko si es que él empieza a tomarse su oficio en serio.

Iryutia: (llorando) Rutenlo, creo que ya es tarde para hablar con Wenko. Asimismo, pienso que él está grande para asumir que nosotros no vamos a contarle todo como si fueran solo noticias positivas. Sin embargo, no creo que vayamos a decepcionarlo, porque seguramente ese chico quiere nuestra aprobación.

Rutenlo: (entristecido) Es muy lamentable que nuestro hijo deba aceptar su realidad. Si estuviera en su caso, yo me iría a un lugar deshabitado a reflexionar sobre lo que vaya a suceder con su equipo. Espero que sus amigos no se muestren decepcionados de él. Sería una pena si alguno de sus amigos viniera y empezara a llorar.

Wenko: (reservado) Padres, por favor no hablen más. Esto tan deprimido que no tengo ganas de contarle a nadie lo que siento por dentro. Mi hermandad con mis amigos se rompió y estoy tan triste que ni siquiera me quiero levantar del sofá. Siento que no voy a pasar una buena noche, porque de todas formas extraño mi modo de vivir.

Gortuno: (comprensivo) Wenko, esa es tu decisión. No voy a interferir en lo que decidas hacer, porque ese es el control de tus decisiones. Yo solo quiero confirmar si es que vas a abandonar las canchas o no. Te hago acordar que pronto va a haber un campeonato entre el equipo de Artio y nuestro grupo que se va a llamar los rojos conejos.

Iryutia: (llorando) Rutenlo, nuestro hijo está pasando por un duelo muy importante de su vida. Yo lo viví cuando tenía su edad, pero la verdad es que fue muy diferente a como él lo vive. Quisiera saber si mi hijo tiene alguna dificultad social o no, porque eso es una intriga que tengo dentro de mí. Tal vez nunca lo sepa o quizás sí.

Rutenlo: (entristecido) Wenko, no te desanimes. Pronto vas a poder retornar a la cancha cuando nuestra situación económica mejore. No quiero ser pesimista, pero creo que necesitamos un terapeuta para poder adaptarnos al contexto que estamos viviendo. Wenko necesita tener un acompañamiento profesional para vivir su vida.

Wenko: (reservado) Padre, llevo tantos días pensando en faltar a la cancha. La verdad es que los días donde jugaba fútbol ya no son los mismos que antes. Quiero dejarlo para siempre, aunque lo siga amando. Me duele decirlo, pero creo que debo enfocarme en otros aspectos. Tengo ganas de construir un negocio.

Gortuno: (comprensivo) Wenko, ahora me debo ir a mi casa. Creo que has tomado una decisión importante en tu vida. Espero que seas feliz con tu nueva vida y no voy a molestarte ni un poco más. Tal vez tus padres te hagan saber que la vida tiene muchos buenos y malos momentos, pero tú decides qué tener en tu vida.

(Iryutia Bunte se seca las lágrimas con sus dosmanos y deja de llorar) 

(Gortuno se acerca a Wenko y le da un abrazo a ese chico)

(Gortuno Iryelo Kirno se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)

(Rutenlo Lonte se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)

(Iryutia Bunte se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)

(Wenko Lonte Bunte se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)

(Cierre del telón) (Fin de la escena XV)

WENKO  (Obra teatral de deportes 12)Where stories live. Discover now