Capítulo XXVI

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"Doctor jojojo es que son enormes!"

Daniel no pudo evitar reír con ella "Yo se beatriz pero son los únicos que tengo. Los ajusté lo mejor que pude. No se preocupe, solo vamos a dar un par de golpes, todo va a estar bien"

"Seguro?"

"Seguro, vamos" le dijo colocándose frente al saco seguido de beatriz. "Párese así como yo" le dijo demostrandole la postura el mismo "Listo?" Beatriz solo asintió no muy segura. Daniel se hizo a un lado "Y nada, peguele"

"Le pego? Eso es todo?"

"Pero claro beatriz, de que cree que se trata esto"

"Bueno listo, allá voy" dijo betty dando el golpe más débil en la historia del boxeo.

"Doctora no, eso que fue? Saqué toda su furia!" la alentaba daniel mientras betty reía tratando de conectar un par de golpes más.

"Ya se, imagine que el saco es Hugo. Saqué todo lo que tiene dentro" con eso los golpes de betty se fueron haciendo más fuertes, pero no lo suficiente según la opinión de Daniel.

Se paró detrás del saco y le dijo "Ahora imagine que este, este es Armando Mendoza". No lo tuvo que decir dos veces para que Betty conectara un golpe tan fuerte que los sorprendió a ambos.

Betty se quedó congelada mirando al saco. "Vamos doctora, saquelo todo. Dele al idiota este".

"No" dijo Betty bajando los brazos "A ese no lo quiero golpear... ni me lo quiero imaginar... ni nada"

"Ok... ok... entonces uhm... Marcela?" le dijo sonriendo y betty no pudo evitar reír. "Está bien beatriz, entiendo. No lo tiene que hacer frente a mi. Sería como raro no? Lo podemos dejar por hoy si gusta"

"Jojojo si, doctor, tiene razón"

"Se siente mejor?" le preguntó ayudandole a sacarse los guantes.

"Si, debo admitir que me siento mejor, gracias"

"Entonces va a tomar el boxeo regularmente?"

"Jojojo pienso que no. Yo creo que me ayudó más la distracción que la parte de la violencia. Pero gracias oyó, tiene razón, el ejercicio es buena terapia. Lo tendré en cuenta"

"La terapia también es buena terapia" dijo daniel bajito poniendo las cosas en su lugar.

"Perdón?" preguntó betty sin entender muy bien lo que había creído haber escuchado.

"Nada, no me haga caso. De igual manera, me alegro le haya servido"

El momento comenzaba a tornarse incómodo. Estaban los dos ahí parados en el gimnasio sin saber que decirse.

"Eh, doctor será que me regala un vaso con agua"

"Si, por supuesto beatriz, acompáñeme" le contestó caminando hacia la cocina.

Betty tomó su saco y sus zapatos en su mano y lo siguió hasta la sala donde lo esperó.

Daniel volvió con dos vasos llenos ofreciéndole uno a betty. Ella dejó sus cosas junto al sofá y para aceptar el vaso.

"En serio no se va a sentar?" preguntó daniel señalando el sofá.

Betty solo arrugo la nariz y negó con la cabeza causándole risa a daniel "Ok bueno... que tal la biblioteca? La acabo de remodelar, le prometo que todo ahí es nuevo, nadie a entrado ahí a hacer nada."

Betty de momento no contestó así que daniel insistió "Me da no se que verla ahí parada beatriz, vamos a la biblioteca, ahí al menos puede criticar mi colección todo lo que quiera" le dijo sabiendo que eso la convencería.

ConvéncemeOnde as histórias ganham vida. Descobre agora