Primer ciclo - Dos mundos. Parte I: El quiebre del cielo

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Hola, aquí con una nueva historia larga.

Advertencias: Violencia. Muerte. Incluye contenido perteneciente a religiones monoteístas, de manera literaria. Combina algunos elementos. Si te ofende o incomoda eso, te pido que pienses en tu bienestar y cierres la pestaña. Sé que el tema religioso puede ser álgido.

En los siguientes capítulos se agregaran más advertencias. Tengan presente que esta historia es sólo para adultos.

Aquellas personas que siguen aquí aun sabiendo todo eso ¡Bienvenidos a este viaje!

Una corta aclaración:

Primera jerarquía angelical: 1. Serafines. 2. Querubines. 3. Tronos

Segunda jerarquía angelical: 4. Dominaciones. 5. Virtudes. 6. Potestades

Tercera jerarquía angelical: 7. Principados. 8. Arcángeles. 9. Ángeles (Rasos)

Al inicio de los tiempos, no existía nada

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Al inicio de los tiempos, no existía nada.

Aun así, la explosión de vida se abrió paso en un instante. Planetas, estrellas y galaxias fueron creadas.

Bacterias y arqueas empezaron a circular por las atmósferas.

Los hongos se multiplicaron. Las plantas crecieron en la tierra.

Los animales poblaron los océanos. Algunos abandonaron el agua, sus cuerpos cambiaron y comenzaron a andar en cuatro patas.

Después de miles y miles de años, unos desarrollaron alas, otros colmillos, unos perdieron sus piernas y otros adoptaron una postura erguida y se hicieron llamar humanos.

Sin embargo, el plano terrenal no fue el único lugar que vio la luz a causa de la explosión de vida. Otras dimensiones también fueron creadas en ese momento.

El plano celestial era la única otra dimensión donde vivían seres pensantes.

Los animales, las plantas y los hongos vivían en el plano terrenal. En el mar, en las costas, en los valles y en las montañas.

Los ángeles vivían en el plano celestial. Eran la especie multicelular más cercana a la fuente primigenia de energía, a quienes nombraron dios.

La fuente era lo único que quedaba de la explosión de vida originaria, en todo el universo. Se decía que su energía era infinita, densa y preciosa.

Por eso, los ángeles habían evolucionado de formas distintas a los organismos de la tierra. Sin embargo, curiosamente, muchos eran similares a los humanos.

Al menos, físicamente hablando. No obstante, ya que ellos estaban más cerca de la fuente primigenia de energía, su poder era inmensamente más grande. Sus cuerpos eran altos y cuasi indestructibles. Sus capacidades físicas y habilidades mágicas no eran algo que los humanos pudieran siquiera pensar en poseer.

LeviatánWhere stories live. Discover now