Camine unos tres pasos atrás y me senté sobre un escalón de la entrada mientras observaba a Adam seguir limpiando el auto.

-¿Hace mucho que trabajas para Steven?- pregunte.

-Se podría decir que trabajo hace años para el señor Seymour-

-Que raro, no te había visto en la empresa-

-En realidad, Steven me llama cuando necesita que cuide a alguien-

-¿Alguien? ¿Cómo quiénes?-

-Como tu-

El seguía lavando y refregando el capo del auto pero en algunos momentos me dirigía su mirada .

-¿Cuánto tiempo pasa entre cada trabajo?-

Esto me podía servir sobre mi investigación, esa era mi única intención.

-Meses o años-

Podía notar como cada vez que yo aumentaba las preguntas, Adam se pone mas tenso.

-¿Sabes quien es Jennifer?-

Su cuerpo se tenso y dejo la esponja a un lado.

-¿Jennifar? ¿Jennifer? ¿Como dijiste?-

-Jennifer- repetí.

-No, nunca oí hablar de ella, ¿Por?-

-Por nada en especial-

-Yo... tengo que hacer unas llamadas, avísame cuando quieras ir a algún lado- dijo nervioso.

El se limpio las manos y entro en la casa, mis preguntas lo habían puesto así, suspire y me levante también, busque mi iPhone y le marque a Steven, ocupado, ¿estaría Adam hablando con el?, vi el numero de mi madre entre las llamadas recientes y me di cuenta que no la había llamado en tres días, le marque y a diferencia de Steven, ella me respondió al tercer tono

-Cariño-dijo ella y pude escuchar un suspiro de su parte.

-Mamá, perdón por no llamar, no tuve tiempo-

-Lo entiendo hija, yo solo estaba asustada de que me olvides de nuevo-

Sentía como si una daga me hubiera atravesado el estomago al escuchar esas palabras.

-Sobre eso hablaremos luego, sabes que nunca te olvidaría-

-Lo se, solo que desde lo de Elliot..-

-Ya basta, eso no sucederá conmigo- la interrumpí al escuchar el nombre de mi hermano mayor.

-De acuerdo-

-¿Cómo fue tu día?-

-Bien, como te conté, la florería que inaugure cada día va de bien a mejor-

-Me alegro mucho- dije sonriente.

-¿Y tu con Cameron? ¿Qué tal? -

Pensaba que era el mejor momento para decirle todo, menos que Cameron me abusaba y golpeaba, eso la pondría mal.

-Terminamos hace meses, no te lo dije porque estaba deprimida, pero por suerte conocí a alguien que me ayudo-

Era mentira pero en cierta forma también verdad.

-Oh, lo lamento ¿Quién dices que te ayudo?-

-Eso no importa, creo que ahora estamos en un relación y el me llevara la semana que viene a Texas-

-¿Hablas enserio?- pude sentir la emoción en su voz.

-Muy enserio, no puedo esperar para verte-

-Hija, no sabes cuanto espere este momento-

-Yo también mamá-

-Entonces nos vemos en unos días-

-Así es-

-Hay cielo, no sabes lo feliz que me haz puesto, te mostrare la florería y como arregle todo el jardín delantero-

-Estoy ansiosa por verlo, Ma' tengo que irme, mañana te llamare, te amo-

-Te amo mas hija-

Con una sonrisa corte la llamada, unos ruidos vinieron a mis oídos, pasos, de seguro Adam esta aquí, le pediría que me lleve a la empresa. Necesito hablar con Steven.

Pero al abrir la puerta me di cuenta que eso no era necesario, Steven caminaba rápidamente hacia donde yo me encontraba.

-Necesitamos hablar- dijimos los dos al mismo tiempo pero lo ignore.

-Ahora mismo-concluí.

El se dio vuelta y comenzó a caminar, lo seguí hasta que llegamos a su despacho, el pensaba hablar todas mis inquietudes como si fuera un negocio.

Entramos y el se acomodo sobre uno de los sillones, me senté en el del frente para enfrentarlo.

-Tengo varias preguntas-dije.

-Yo una sola, ¿Que mierda te dijo Erika?- dijo enojado.

Lo mire confundida, ¿el sabia quien era Erika?

-Eso no te tiene que importar-

-Solo di lo que te dijo-

-No-

-¡Tengo derecho a saberlo!-grito

-¡Y yo tengo derecho a saber porque quieres que este aquí!-

-¡Eso no te tiene..!-

-¿Quién es Jennifer?- lo interrumpí recuperando mi tono, el se puso rígido como una roca al instante, su mirada se hizo distante y su boca se formo en una linea recta. - ¿Qué tengo que ver yo en todo esto? ¿Cuales son tus juegos? ¿Cuando te cansaras de mi?

El tomo su cabeza entre sus manos y podía sentir su respiración agitada.

-Steven,solo dime-

-Yo..no puedo-pude apenas escuchar

-Si puedes-

-No-

El se levanto del sillón y me tomo por los brazos obligándome a levantarme también, puso sus manos en mis mejillas y su mirada seguía igual de distante pero esta vez podía ver algo mas, dolor.

-No pienses mas en eso, solo espera un poco mas hasta que este preparado-

Su tono parecía desesperante.

-¿Me dejaras?-

Su pregunta resonó por toda mi mente, tan solo en pensar en irme un vació se formaba en mi ser, negué lentamente con la cabeza y no tuve tiempo a respirar porque en menos de un segundo tenia los labios de Steven sobre los míos.

Sus labios eran como los recordaba, dulces y cálidos. Disfrute de cada segundo, el mordió mi labio inferior unas cuantas veces y luego se separo pero comenzó a bajar depositando besos en toda mi clavícula hasta llegar a mi cuello.

Mi respiración aumento cuando el comenzó a mordisquear mi sensible piel, mezcle mis dedos entre sus sedosos cabellos y pude sentir esa agradable ola de calor sobre mi, aumentando cada vez mas.

Tome a Steven de su camiseta y lo obligue a subir su cabeza de nuevo acoplando nuestros labios, en ese momento, no pensaba, solo era el, yo y una extraña conexión que no puedo explicar.

La puerta sonó unas cuatros veces pero Steven parecía no darle importancia, por mas que no quería, me separe de el. Trate de recuperar la respiración y me encamine hacia la puerta, del otro lado estaba Kenny, le sonreí y salí de allí.

Subí hacia mi dormitorio y al cerrar la puerta me tumbe de golpe en la cama, Steven no estaba dispuesto a brindarme información pero en lo único que podía pensar es en ese momento, sus besos y su delicadeza, algo a lo cual no estoy acostumbrada.

Cerré los ojos y eleve una mano hacia mis labios entonces sonreí inconscientemente....

Listo, otro capítulo más, OMG QUIEN DIABLOS ES JENNIFER?

Voten y comenten!

Gracias por leer!

Más que mi jefeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora