🍂~×☕ONE-SHOTS🍂☕ ArgPer//⚘

No te iguala

Fue la cagada, le puso en la bolsa incluso más de lo que necesitaba ¿Pero qué más iba a hacer? Estaba apresurado y no se daba cuenta.

Ya cuando por fin llegó a la casa del peruano, fue a ver si su pareja seguía descansado, estaba en lo correcto.

Prepararía lo que tenía en mente, milanesas, es lo único que tenía pensado.

—Piensa gil, no seas sálame- –Se dijo así mismo, listo, una idea surgió. Hizo tanta vaina para decidir hacerle una ensalada de frutas. Tampoco era pésima idea, lavó, peló y cortó las frutas, para mezclar y echarle alguna que otra cosa. —Listo- ah, sí, sí, el agua o no sé, bue, ¿un jugo creo que da o no? –Definitivamente estaba hablando solo para poder calmarse y ordenar sus ideas.

—Dale, dal-

—¿Arge? —Preguntó el peruano.

—NOOOOO, ANDÁ VOS A DORMIR.

—Tengo reunión y qué chucha, no grites.

—Es que-

—Es que, qué

—Bue, quería hacerte el desayuno porque ya vos sabés que hoy es San Valentín

Perú sonrió. —Igual no hubieses podido hacer nada, me iba a despertar incluso más temprano, solo que alguien ayer s-

—Ya entendí, igual ¿me podés dar un besito?

—Ya no hay ni buenos días.

—Ya, ya, es que estoy distraído.

El otro lo fue a abrazar.

—Te levantaste temprano por gusto, hoy es trece, mañana es catorce.

Argentina sacó su celular, era cierto. —Ah, bue, igual, supongo que ya te dejé desayuno.

—Si, si, anda duerme tú no más.

—Bue, voy.

 Antes de irse Perú le dio un pequeño beso en los labios y se sentó en una de las sillas, prendió la televisión, vería al menos la tele treintena minutos y luego directito a palacio de gobierno.

Mientras tanto Argentina abrazó el peluche que había ahí y durmió, eso sí, tendría que ir a comprar algo en la tarde, no quería pasar lo mismo que hoy.

En la mañana siguiente, el peruano ya se había despertado a las cinco y tantos, estaría en reunión hasta medio día y probablemente surgirían más cosas.

Antes de irse le dejó una cartita en la mesa al argento, junto a una caja de chocolates y un pequeño peluche, podría estar ocupado pero esos pequeños detalles nunca se le iban a olvidar, y más aún si se trataba del Argentino, aprovechó ya para irse en darle un beso en la frente, notó una sonrisa esbozada en el rostro de su pareja, quizá fue algo inconsciente de parte del él, acarició la mejilla de este para darle un beso bastante corto y suave en los labios, luego, fue a la reunión que tenía pendiente ese día.

Argentina, listo, ni bien se fue el peruano, se dejó de hacer el dormido, tenía que tener todo listo para la noche. Se reforzaría ahora incluso más.

 Y fue así, en la noche, música ni tan alta ni tan baja, un lindo detalle en la mesa, y aunque no se le diese mejor la cocina como a su pareja, disfrutó hacer la cena. Si todo había salido como quería, era porque no sacaba al peruano de su mente.

Sus cariños, sus besos, su todo, simplemente lo amaba desde que fueron pequeños, y aunque lo quisiese negar, era imposible, y aunque también en un pasado no se convencía, ahora miraba aquellos recuerdos tontamente pensando en que hubiese sido de su vida sin él.