Legolas estaba muy nervioso, pues estaba en medio de su padre y de su amigo los cuales se estaban mirando con cara de pocos amigos.
Su padre miraba a Aragorn con una expresión fría, mientras que Aragorn miraba a Thranduil con una expresión tranquila dispuesto a defender a su amigo
Thranduil: Haber "Aragorn" repite lo que has dicho
Aragorn: Señor Thranduil usted no se está comportando como un padre, un padre no obliga a su hijo a hacer lo que no quiere, debería de apoyarlo
Thranduil: Sin embargo es mi hijo, además se escapó de casa y está herido, no quiero que siga viajando por ahí
Aragorn: Señor entiendo su punto, sin embargo Legolas es un adulto y puede tomar sus propias decisiones así que por favor deje a mi amigo, no se lo voy a repetir
Durante unas cuantas horas Aragorn intentaba ver a Thranduil que lo que estaba haciendo no estaba bien, pero la testarudez del elfo no lo hacía ver más allá de lo que él quería. Durante un largo tiempo Legolas estaba empezando a cansarse de la pequeña pelea de niños chicos que estaban teniendo su padre y su amigo, por lo que se apoyó en una roca, notando como esta empezó a moverse, por lo que se levantó rápido y se acercó a su compañero
Aragorn: ¿Pasa algo Legolas?
Legolas: La roca se está moviendo hacia los lados cuando me senté, creo que no estamos solos los tres aquí dentro
De un momento a otro el suelo se dividió ocasionando que "la pareja" acabara siendo succionada hacia abajo perdiéndose en la oscuridad del hoyo.
Aragorn: ¿Legolas donde estás? -levantándose del suelo
Legolas: Estoy aquí- habló desde el orto lado del lugar
Aragorn fue corriendo hacia donde estaba el menor para poder ayudarlo a levantarse
Legolas: ¿Dónde estamos?
Aragorn: No lo se pero debemos salir de aquí lo antes posible
Durante unos minutos estuvieron buscando una forma de salir por donde habían caído pero era muy imposible pues la zona era muy inestable por lo que no era una opción muy viable
Legolas: ¿Encuentras algo?
Aragorn: No la verdad por esta zona no podemos salir, habrá que buscar otra salida, creo que deberíamos explorar la cueva
Legolas: Supongo que no hay otra posibilidad
La "pareja" se adentró hacia el interior de la cueva donde cada vez se hacía más difícil caminar, gracias a la oscuridad. El mayor de los dos encendió una antorcha improvisada, y mientras caminaban miraba hacia atrás para poder ver como iba su compañero, pues empezó a sentir "cosas" dentro de el hacia su compañero élfico
La cueva parecía no tener fin pues caminaron durante varios minutos que parecían horas, cansando a nuestros héroes, por lo que el mayor decidió que era momento de descansar un poco para recuperar fuerzas para continuar más al rato.
Aragorn: Legolas si quieres puedes dormir un rato, yo me quedaré a vigilar un poco
Legolas: No hace falta, puedes descansar tu, los elfos no necesitamos descansar tanto como los humanos
Aragorn: ¿Seguro?
Legolas: Si tranquilo duermen yo te despertaré dentro de un rato
Aragorn, no muy convencido acabó aceptando, acomodándose como podía, para dormir un poco; mientras que el menor empezó a vigilar la entrada por donde había entrado por si algo o alguien los hubiera seguido. Durante un buen rato estuvo todo en calma por lo que muestro pequeño elfo pudo relajarse un poco apoyando su espalda en la pared que poseía detrás de él, relajándose un poco para poder reflexionar sobre lo que sentía por su compañero, sabiendo que era muy difícil que el humano le correspondiera, pues según sus amigos elfos de Rivendel, Arwen estaba enamorada de un humano por lo que nuestro querido elfo asumió que se trataba de Aragorn.
Estuvo reflexionando un poco más hasta que decidió que era momento de despertar a su compañero, por lo que empezó a moverlo para que despertara, lo cual fue muy difícil para nuestro querido elfo pues el humano tenía el sueño muy pesado dificultando la tarea de despertarlo. Después de unos 5 minutos nuestro elfito pudo despertar al humano el cual obligo al contrario a dormir un rato; Legolas sabía que no lo iba dejar tranquilo hasta que lo hiciera por lo que aceptó a regañadientes, ocasionando una pizca de orgullo en su ego.
Mientras que el elfo descansaba, el humano no pudo evitar mirarlo, más concretamente algunas heridas recibidas cuando fue atacado por los orcos, haciendo que el mayor se arrepintiera aún más sobres sus acciones minutos antes del ataque. Sabía que, aunque el menor lo haya perdonado, su "perdón" no servía de nada pues el daño ya estaba echo y sabía que si pudiese volver atrás en el tiempo lo haría para poder evitar todo lo que le pasó.
Estuvo mirando durante un buen rato al pequeño cómo dormía, sobre todo las facciones de la cara las cuales eran bastantes limpias y lisas, las cuales hacían que su cara fuera bastante bonita, haciendo un ligero sonrojo en la cara del mayor y apartando la vista para poder controlar un poco su corazón pues iba muy rápido.
Durante un largo tiempo intentó calmarse, y cuando lo consiguió decidió despertar al menor para continuar con su búsqueda.
"La pareja" volvió a emprender su camino, conforme iban avanzando, iban escuchado sonidos muy extraños procedentes de conductos secundarios los cuales asustaban un poco al menor, cosa que notó el mayor pues lo cogió de la mano y lo apretó un poco dándole un poco más de seguridad para que se tranquilizase un poco para que no se pusiera más nervioso de lo que ya estaba, y de esa manera evitar llamar la atención de los causantes de los ruidos extraños los detectaran y los atacaran. Caminaron en silencio durante un largo tramo hasta llegar a una intersección con varios caminos; ambos se miraron durante unos segundos y luego miraron otra vez a los diferentes caminos.
Aragorn: ¿Por dónde crees que es?
Legolas: La verdad es que no lo se, nunca vi nada como esto, y Gimli n0 mencionó nunca esto
Aragorn: Debemos encontrar el camino correcto para poder salir de aquí
Legolas: ¿Pero cómo lo haremos?
Aragorn: Eso es lo que debemos averiguar - mirando los cuatro conductos que tenían delante suya
Legolas se quedó atónito con la respuesta del mayor, resoplando, volviendo a mirar a los cuatro túneles esperando que el mayor hiciera algo.
Legolas: ¿Estás seguro de lo que estás haciendo? - dijo viendo al mayor entrar y salir de uno de los túneles
Aragorn: Pues claro que si -entrando al segundo túnel y saliendo dos segundos después- más o menos
Legolas: Aragorn, es más fácil decir que no tienes ni idea de lo que estás haciendo en vez de hacer, lo que sea de lo que estes haciendo porque la verdad no te entiendo -levantándose de donde estaba sentado
Aragorn: Intento ver si en alguno de estos hoyos entra algún rayo de luz pero no veo nada
Legolas: ¿Y porqué no pides ayuda? Podría aver mirado esos otros dos hoyos en vez de estar aquí sentado
Aragorn: También es verdad - se rió un poco- entra en ese de allí, yo entraré en este de aquí
Legolas: De acuerdo -entrando por donde le había dicho el mayor
El menor estuvo caminando unos cuantos minutos sin ningún éxito de encontrar ningún rayo de luz por lo que emprendió el camino de regreso a la intersección, sin embargo empezó a escuchar pisadas desde el fondo del túnel, se quedó quieto unos segundos y pudo divisar una gran silueta acercarse hacia donde estaba el.
Por la silueta que divisaba supuso que era un orco de Gundabad.
Se quedó en estado de shock, no sabía que hacer y cuando el orco estuvo delante de él, salió corriendo llamando al mayor para que fuera a ayudarlo. Corrió lo más rápido que pudo, siendo en vano pues el enemigo lo atrapó y lo metió con fuerza hacia el interior de la cueva
Orco: Valla, pero si es el hijo del rey del bosque negro -tirándolo hacia la pared
Legolas: ¿Qué es lo que quieres?
Orco: Tener el control de esa zona para que nuestro señor domine la tierra media y seguro que tu papá nos dará el reino si tiene a su hijo sano y salvo -acercándose más al menor con su arma de madera, dispuesto a darle en la cabeza para que se desmayara
