Mackensy Lupin

8. Él, Su Propia Perspectiva

Cedric.

Mirar las estrellas..
Algunos encuentran que es una pérdida de tiempo. A otros les da igual. Pero a ella.. Hasta sus ojos se iluminan con solo mirarlas..

Cierro los ojos un momento. Respiro la brisa, y dejo que todo en mi mente se aleje.

Necesitaba esto.. Alejarme de todos y poder respirar. Respirar sin que me digan cuantas veces hacerlo, relajarme sin que me digan cuanto tiempo puedo hacerlo.. Hacer lo que quiero por un instante y ser yo mismo..

Pero aquí estoy, con ella.

Cuando la conocí era una chica linda, si, pero igual que muchas otras.. O eso creía.

Debo admitir que no la conocí en un buen momento. No le hablé bien. Empezamos de la peor manera posible, pero aquí estamos..

-¿me dirás que te ocurre? -.

Abro mis ojos y veo a mack, con esos hermosos ojos celestes con un toque verdoso mirandome fijamente.

-¿Qué ? - le pregunto algo confundido.

-se que algo te ocurre- se sienta y sigue mirándome- no es fácil ocultarme cosas..

No lo sé, tal vez sea una estupidez y no deba hacerlo. Pero no puedo decir qué- porque sinceramente no sé qué es- me genera confianza en ella..

-estoy cansado.. -.

Puedo ver como una pequeña sonrisa se forma en sus labios.

-solo llevamos un día de clases..- se le escapa una pequeña risa- ¿Cómo es posible que ya estés cansando?

Tomo un poco de aire y suspiro. Jamás le había contado a nadie esto- ni si quiera a mis amigos que conozco de niño- así que me tomo el tiempo de relajarme. No quiero volver a hablarle mal..

-no es cansancio físico.. - le digo sentandome al igual que ella- es algo dentro de mi. Algo que cada año crece, que me hace.. Que me obliga a ser algo que no puedo seguir siendo..

Su sonrisa se desvanece, y es reemplazada por confusión y atención.

-¿A qué te refieres? - pregunta apoyando sus codos contra sus rodillas para así apoyar su cara en sus manos.

No sé cómo decirlo. Es difícil expresar lo que sientes, cuando todo el tiempo estas fingiendo.

Algo que no me esperaba ocurre. Mack se acerca a mi, toma mi mano y me sonríe.

-confía en mí.. - sonríe- tal vez no pueda hacer mucho para ayudarte, pero por lo menos tendrás a alguien con quien hablar..

Y algo que no pasaba hace mucho tiempo ocurre.. Puedo ser quien realmente soy, porque algo me dice que puedo confiar en ella..

-siempre tengo que tener la imaginen del chico perfecto.. - sujeto su mano y miro al cielo- notas prefectas, jugador de quidditch perfecto, compañero perfecto, amigo perfecto.. Y sobre todo, hijo perfecto..

Vuelvo a mirar a Mack. Con solo ver sus ojos puedo leer lo que siente. Y ahora solo puedo ver tristeza y sorpresa.

-¿desde cuando? - me pregunta apretando mi mano.

-desde siempre.. - le digo y una sonrisa triste se forma en mis labios..

Y otra vez.. Vuelve a sorprenderme.

-no eres un chico perfecto- dice sonriendo.

Quedo algo aturdido por sus palabras. Esperaba que dijera cualquier cosa menos eso.

-Mack..-.

-no eres un chico perfecto por lo que le muestras a la gente- sonríe- ¡y nadie puede ser perfecto!. Pero si eres una gran persona.. Porque intentas dar lo mejor de ti a los demás, aunque eso te este destruyendo..

Me quedo en silencio..

-no tienes que hacer lo que te impongan las demás personas. Si quieres ayudarlas esta bien, y eso te hace una gran persona. Pero no puedes
hacer que ellas elijan como debes vivir tu vida..

Lágrimas.. Es lo único que puedo ver. Nublan mi vista y empiezan a deslizarse por mis mejillas..

-necesitabas esto.. - me abraza.

Su abrazo es cálido y reconfortante. Me tranquiliza, me siento mejor.. Porque por primera vez, puedo decir como me siento, y me libera de un peso enorme..

Apoyo mi cabeza en su hombro y ella me sigue abrazando.

-pudiste reconocer que era lo que te estaba haciendo daño- deja de abrazarme y toma mis hombros con sus manos- ahora es momento que hagas lo que realmente quieres hacer..

Lo que realmente quiero hacer..

-¿Qué has pensando en hacer muchas veces y nunca lo terminas haciendo? - pregunta sonriendo.

No me cuesta mucho encontrar la respuesta. Es algo que llevo años pensando..

-sígueme.. - me levanto y le extiendo mi mano.

Ella la toma y la levanto de un salto.

-¿a dónde vamos? - pregunta emocionada.

La observo un momento y sonrío.

-a realizar lo que siempre quise
hacer.. -.

Ella sonríe y empezamos a correr por los pasillos ya oscuros de Hogwarts.

Vemos a algunos duendes caminando por el corredor, pero ninguno nos dice nada, así que seguimos corriendo hasta llegas a los barriles de la sala común.

-¿enserio? - pregunta alzando sus cejas- ¿es una broma?.

Ohh no, claro que no es una broma.

-¿enserio lo que más querías hacer era venir a la sala común? - vuelve a preguntar.

-claro que no- rio y suelto su mano.

Me mira algo confundida y me genera más risa.

-esto es lo que siempre quise hacer- le digo mientras me giro y toco mal la melodia en el barril.

-Cedric Diggo.. - no alcanza a terminar.

El barril se abre y nos arroja listos y litros de vinagre.

Debi admitir que no pensé que fuera tanto. Pero este nos arrastra hasta las escaleras.

-¿estás bien? - le pregunto cuando al fin deja de arrastrarnos esa ola de vinagre.

Ella deja reposar su espalda en el suelo y cierra los ojos.

-estas completamente loco- dice con una sonrisa en sus labios-.