- Si yo, yo también lo dije pero no quería admitirlo- dijo algo asustado mientras tomaba de su malteada.
- Pero en fin- dijo el pequeño de los White para después mirar a Roberts- ¿cómo está eso que no vivías aquí?
- Oh es que mi papá consiguió trabajo en otra ciudad cuando yo era pequeño, entonces nos mudamos. Pero mi hermano y yo siempre queríamos volver, para vivir aquí y todo eso; mi hermano obtuvo una beca y se vino a estudiar, mientras que yo tuve que esperar hasta que mi mamá consiguió una casa y así fue como ella y yo nos vinimos.
- ¿Qué hay de tu papá?
Le di una patada por debajo de la mesa a mi hermano para que dejara de preguntar, pero el solo me miro algo enojado.
- El todavía está en la otra ciudad, mañana llega para pasar tiempo con nosotros. Y si mal no estoy en unos meses su trabajo volverá a ser aquí.
- Eso es genial- dijo esta vez la pequeña Bell- digo, lo más que yo he salido es a... olvidenlo, no he salido de la ciudad.
Todos soltamos una pequeña risa para después seguir platicando, hasta que Owen habló.
- Bellatrix me dijo, que Venus es muy callada cuando se trata de ella.
- Osea que si tengo amigos chismosos.
- ¿Qué es de la vida de los White?
- Solo vivimos con papá- inició Matteo para después mirarme y hacer que yo prosiguiera.
- Si, mamá se fue con un compañero de trabajo. Nos dejó y dijo de lo peor de nosotros, entonces papá tomó las riendas solo. El trabaja en el hospital y pues nosotros tenemos que hacer mucho aseo.
- Vaya, eso sí no me lo esperaba. Pero creo que fue mejor.
- ¿A qué te refieres?
- Bueno, siento que con una pequeña cosa que allá pasado hace unos años no serias la persona que eres ahora. No sé, tal vez no estarías hoy en el centro comercial a un lado de nosotros.
Le miré sorprendida, no se que esta pasando dentro de mi pero sin duda quiero a este chico más tiempo a un lado mío.
[...]
- TIENES QUE SER SU NOVIA -Bell no paraba de decirlo, desde que nos despedimos de Owen no paraba de decirme la gran pareja que podíamos ser ambos-
- ¿No te has puesto a pensar si yo quiero ser su novia?
- Es que conociéndote ya te gusta -mire a mi padre que había terminado de ser informado sobre un tal Owen-
- Que gran ayuda del hombre que una vez me hizo cambiar de lugar en la sala de cine porque un niño al ver el asiento a un lado mío libre se fue a sentar para estar junto a mí.
- Si, pero porque sabía que tu no gustabas de él.
- Y el no parecía buen tipo para ti -concluyó el más pequeño de los White haciendo que solo lo mirara con gran odio-
Ignore lo que dijeron y me dispuse a hacer la cena mientras ellos charlaban sobre Owen, se ganó la atención de todos en poco tiempo.
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[...]
Habían pasado tres días desde aquel encuentro en el centro comercial, seguía pensando en Owen y no tenía idea del porqué.
Estábamos en clase de química, mezclando sustancias y cosas así, la verdad no tenía idea de que estaba haciendo solo se que estaba dejando que Owen... Oliver, era Oliver, dios otra vez. Que Oli y Bell hicieran todo, se les da más la química y a mi álgebra.
- ¿Venus?
Di un brinco del susto para ver consigo a Owen que me veía con cierto humor gracias a la reacción que tuve.
- Vine a buscarte -no sé porque estoy nerviosa pero lo estoy.
Miré como se acercaba lentamente para sentarse a un lado mío.
- Podemos tener las dos horas libres e irnos, la maestra esta enferma entonces no hay problema, ¿tu que opinas?
- Amm.
- ¿Amm?
Miré su rostro, creo que si me estoy enamorando. Oh maldita sea.
Miré rápido a otro lado para poder hablar, pero en ese momento logré escuchar un sonido de asombro y al mismo tiempo de admiración, abrí lentamente los ojos que por los nervios los había cerrado para darme cuenta que Owen miraba aquel dibujo que hice durante el experimento.
- ¿Tiene un significado en especial?
Eran dos personas, como de mármol, besándose, y atrás se podía ver un poco del cielo de la noche estrellada justo donde se veía la luna.
- Yo, no lo sé. Es decir, solo comencé a dibujar dejando que todo lo que sentía saliera a flote y al parecer la clase de química es la mejor clase para hacer esto.
Dejo de prestarme atención para tomar la libreta, mi mochila y al último mi mano. Cuando sentí su tacto juro haber sentido también el cielo en ese momento, pero para mi lastima la soltó al ver que ya me había levantado de la silla.
- A la pregunta que anteriormente me hiciste, ¿te parece si vamos al parque que esta a diez minutos de aquí?
El sonreía, dios que bella sonrisa, me encanta.
- Hay un lago que lo más seguro este congelado pero no deja de estar hermoso.
- Acepto tu invitación con la condición que me concedas una salida mañana.
Guau, esta vez si abrí los ojos a más no poder. Sería mi primera cita y con el, juro que si me lo hubiera dicho por mensaje de texto hubiera gritado y tal vez mi hermano hubiera llegado corriendo para saber que pasaba.
- Yo acepto.
Tomo mi mano para caminar a su camioneta y así ir a el parque que tanto me gustaba.
Se estacionó para así bajarnos y comenzar a caminar, estábamos en pleno invierno y a pesar de parecer oso bien abrigado seguía teniendo frío, y creo que Roberts lo noto puesto que no dudo en abrazarme.
- Recuerdame para la próxima traer una cobija -dijo riendo al ver mi expresión-
- Hasta yo voy a traer una.
El camino hasta el lago fue silencioso pero cómodo, llegó una parte del trayecto en el que el me dio un pequeño beso en la mejilla confundiéndome, pero al parecer el estaba esperando eso desde hace mucho.
