Kimetsu no Invertd

Capítulo 5

Mantuvo su mirada centrada en el monstruoso demonio que le estaba sonriendo, de un momento a otro el suelo comenzó a temblar por lo que tuvo que dar un salto, rápidamente desde el suelo salieron un montón de brazos que el tuvo que cortar lo más rápido que pudo para que no lo descuartizaran en ese momento

No voy a ganar si solamente esquivo sus ataques como un cobarde pensó el Tomioka mientras que veía lo que creía era una sonrisa en el demonio que atacó con la intención de aplastar su cabeza

- Concentración Total: Respiración del Agua: Cuarta Postura: Golpe de Marea - se comenzó a acercar a gran velocidad, cada vez el ángulo de los ataques de ese demonio se hacian más pequeño, si fallaba su ataque estaba completamente condenado

Pero si su corte era preciso, podría vengar a Murata y a Makomo y pasar la Selección Final, había logrado ser eficaz y decapitar al demonio

Pese a ello su caída fue poco agradable puesto que fue recibido por un árbol, cuando se recuperó del golpe pudo notar una extraña expresión en el demonio, Tristeza??

- descansa - dijo mientras agarraba la mano del demonio que pocos segundos después rompió en llanto, el Tomioka simplemente no comentó nada, se mantuvo en silencio

Pará cuando el demonio se volvió finalmente polvo, Giyu simplemente continuó con su camino, tras el paso de más tiempo se cumplieron los 7 días, había sobrevivido, al llegar al lugar donde estaban los supervivientes pudo notar que sólo estaba el mismo y otras 3 personas

Un albino con varias cicatrices en el rostro, el otro era un pelinegro que se veía extrañamente aliviado, otro era un rubio y por último una chica ciertamente muy linda, su cabello negro con las puntas moradas hacían juego con sus ojos lilas, aun que su sonrisa le parecía algo aterradora

Que... Solo somos 5?? Pero si eramos como 30... no puedo ver a ese chico de hace unos días, acaso el está muerto?? Sus pensamientos fueron destruidos rápidamente por las dos chicas que los habían recibido 7 días atrás, tras una explicación dada por esas gemelas de los rangos de los cazadores de demonios varios cuervos salieron volando en su búsqueda, el cuervo que se poso en su antebrazo se veía tan calmado y se notaba algo mayor, pese a ello no le tomó importancia

- bien ahora... Donde estas las katanas?? - dijo el albino de las cicatrices en un tono amenazador mirando a las gemelas

- quiero mi katana, la que cambia de color, la katana que puede matar demonios - dijo tras haberse acercado y agarrado del cabello a una de las chicas y exigía una respuesta, Giyu no soporto más ver aquel suceso por lo que se acercó y agarro al albino de su brazo

- sueltala - dijo con voz serio y tratando de hacer que el albino le hiciera caso, el chico se mantuvo mirándolo unos pequeños segundos para luego hecharse a reír

- y si no quiero que me harás?? - el Tomioka simplemente frunció el ceño mientras que aumentó su agarre en el brazo del albino, sabía que podía partirle el brazo, pero prefería no hacerlo

- ahhh, esta bien carajo - dijo el albino mientras soltaba a la chica de su cabeza y se alejaba agarrándose de su brazo

- bien ya que terminaron, ahora todos por favor eligan un trozo de acero famahagaje - dijo la otra chica, Giyu simplemente asintió mientras que se acercaba a ver los múltiples trozos de Metal que estaban hay, no estaba seguro de cual escoger pero sintió que uno de ellos llamaba a su nombre por lo que lo tomó

Tras varias horas casi había regresado con su querido hermana mayor y con Urokodaki, estaba tan agotado por el largo viaje que sentía que su cuerpo podía fallecer en cualquier momento, eso le trajo a Giyu un fugaz recuerdo