🍃 Malhumor & Depresión 🌊 [ SaneGiyuu ]

XVIII

—¿Rengoku-San está bien? ¿Lo pudo salvar? ¿Puedo verl- —Un golpe. Sus palabras fueron interrumpidas por el fuerte puñetazo que había recibido.

—¿¡Te das cuenta de lo que hiciste?! —Gritó el mayor tomándolo de su traje y levantandolo para tirarlo al suelo fuertemente.  —¡Por tu culpa! ¡No hiciste nada por él, dejaste que muriera!

Los kakushis llegaron antes de que los gritos siguieran y se dispusieron atender a los heridos, Zenitsu e Inosuke no entendían lo que pasaba, pero la gran tristeza que sentían opaco sus confusiones. Kyojuro Rengoku había perdido la vida en batalla, no pudieron hacer nada por salvarlo. La pareja que tanto amor había demostrado y que tanto esfuerzo había dado fue separada. Tengen quedó en total soledad, y no pudo hacer todas las cosas que prometió hacer con su pareja, todo había sido arruinado.

El cuervo se encargó de dar la noticia a todos lo pilares, y cuándo Giyuu con Sanemi la escucharon,  no supieron cómo reaccionar. Más cuándo no habían podido despedirse de él como lo debido, la última vez que se habían visto sólo discutieron, se sentían fatales por ello.

«Chicos, ánimo, nosotros no nos daremos por vencidos, daré todo de mí por hacer que vuelvan»

Sus últimas palabras.

«Jodete» «No te metas en esto Rengoku»

Sus respuestas.

Giyuu y Sanemi se encerraron en una burbuja luego de ello. Ya no hablaban con nadie, no se les veía y se sentían fatales por cómo las cosas terminaron, se sentían terribles al saber que lo último que trató de hacer Kyojuro fue hacerlos razonar, mostrándoles su llamativa sonrisa, una la cuál volverían a ver. Tanjiro no se dirigió con Tomioka luego de ello y todo se había vuelto gris para los demás.

No más bromas, no más planes, Tengen no veía motivo de seguir con eso.

...

Habían pasado 4 meses.

El pilar del sonido había seguido realizando sus misiones para poder distraerse, y ahora estaba camino al distrito rojo. Su plan era eliminar a una luna demoníaca para renunciar al puesto de pilar, y sólo necesitaba reunir algunas chicas para que encuentren a sus ayudantes Suma, Hinatsuru y Makio, quienes ya se encontraban en el distrito.

—Sanemi, Giyuu,  —Antes de partir reunió a ambos pilares para hablar con ellos.  —Gracias por venir —En su voz ya no se sentía el entusiasmo que tiempo antes mostró, Uzui sólo era una persona con el corazón roto y con el motivo de vencer demonios, nada más.

—Lo sentimos mucho —Ambos pidieron disculpas dando una leve reverencia. Uzui sonrió ante ello.

—Por favor resuelvan las cosas... —Pidió haciendo que los pilares dirijan su vista a otro lado —A Kyojuro le hubiera gustado ver lo bien que se habrían llevado. Giyuu date cuenta de lo que trama ese niño, Tanjiro no tiene buenas intenciones.

—No lo metas a él...

—Sanemi, —Ignoró al peli negro —No todo lo que piensas es verdad, hablen y resuelvan las cosas. —Dijo calmado. —Kyojuro me dijo que, nunca los iba a olvidar y que sonrían por él.

Unas cuantas lágrimas se formaron en los ojos de ambos pilares, aún les dolía recordar la muerte del hashira, pero antes de que pudieran llorar Tengen les dio una fuerte cachetada, más que nada a Tomioka. —Esto es de parte de Kyo, él no quiere que lloren por su muerte, así que sonrían y cuidense mucho. —Dijo  sinceramente y con ello desapareció.

Los hashiras se tocaron su rostro tratando de aliviar el dolor, pero eso era lo de menos, tal vez y sí se lo merecían.

—Tomioka...