Volviendo a besar a la alfa al verse correspondida, Jennie suspiro encantada debido a la delicadeza, a comparación del beso anterior se sentía dulce y suave.
De hecho si calentura casi baja de no ser porque la alfa le tocó el trasero y lo estrujo con sus grandes manos, seguía siendo la Lisa que ella conocía, la callada y tímida Lisa.
Sintió como los besos bajaban a su cuello dejando un rastro húmedo debido a la saliva de la alfa, el como abría y chupaba suavemente su boca la tenía soltando pequeños jadeos, pero estos se vieron interrumpidos por la misma Lisa que le tapó la boca.
— Guarda silencio Jennie —ordenó, Jennie supo e identificó la orden, pues aunque no estaba usando la voz, su tono firme le hizo obedecer—
Tragando saliva en un intento de retener el pequeño hilo que resbalaba de sus comisuras, Jennie se tapó la boca sola, con Lisa en su cuello, justo sobre su pecho y abriendo los botones de su blusa con los dedos, sintió su sostén ser jalado hacia abajo y sus senos rebotar hacia arriba.
Se mordió los labios en un intento de callarse cuando la lengua caliente de la alfa rodeo la aureola de su pecho antes de chupar mandando escalofríos a todo su cuerpo. Las sensaciones se arremolinaban en su cabeza confundiendola, la lengua de Lisa, una de sus manos manteniéndola fija en su lugar apresandola fuerte por la cintura donde seguro quedaron marcados sus dedos y otra de sus manos colandose por su falda.
Sin embargo todo eso acabo de repente cuando Lisa, la giro cubriendo a la omega con su cuerpo y subiendo su ropa rápidamente.
— Te vas a enfermar si sigues usando las blusas así Unnie —regaño con un tono aniñado, pero su cara denotaba total seriedad—
— ¿Buscaban algo señoritas? —preguntó la vieja bibliotecaria, por suerte para Jennie no las había visto, ella no se había dado cuenta, pero Lisa había mantenido a su lobo alerta de cualquier olor o sonido a parte de Jennie—
— Unnie y yo buscábamos un libro de física para ver sobre la radiación electromagnética —respondió Lisa con una sonrisa y la mujer riera por su entusiasmo, al ser ya mayor sus sentidos había disminuido considerablemente, solo había ido buscando algo porque un jovencito dijo algo sobre un aroma extraño—
— Están en la siguiente sección —sonrió amablemente la mujer ignorante a las fuertes palpitaciones de la omega y la erección de la alfa, el aroma a excitación estaba presente, pero ya no era capaz de sentirlo—
— ¿Enserio? —preguntó Lisa haciendo un puchero y Jennie entre cerrará los ojos con incredulidad— Es que esto es tan grande —exagero Lisa abriendo las manos hacia el techo y l a mujer negara antes de darse la vuelta para volver a su lugar—
— Anda jovencita, las tareas no esperan a nadie —
Y dicho esto se marchó dejando a una alterada omega y a un frustrada alfa.
— Ni una sola palabra —Lisa silencio a Jennie cuando hizo amago de hablar— tengo una mamá estricta —
— Eso explica la gran actuación y cambio de voz —dijo Jennie limpiando su cara, a penas se dio cuenta que incluso una lagrima de placer había salido, iba a limpiarla, pero Lisa lamio su mejilla todo el recorrido y tomó sus labios en un beso profundo y lento—
— Esto no se queda así —prometió dándose la vuelta— toma el libro y apúrate, de verdad tienes muchos trabajos atrasados que entregar—
— Ya voy jefa, relajate —
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