Capitulo 4

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Al despertar, me voy directamente al baño, tenía muchas ganas de vomitar, pero tampoco tenía nada en le estómago.

Después del intento, me meto a la ducha y me baño. Para tener dos días. Me había ido de la mierda, ya no quiero estar aquí, solo quiero devolverme a casa.

El agua fría que salía de la ducha no me afectaba, ni la sentía. Solo estaba ahí parada mirando a un punto fijo, sin pensar en nada, simplemente existiendo.

El susto que me lleve ayer, hizo que regresará a aquel día. Aquel que pensaba que había superado.

-Vera, estaré abajo por si me necesitas, Susan y yo queremos hablar contigo un poco, claro si tu quieres. -Dice Sam del otro lado de la puerta.

Sentí que se quedó unos segundos como esperando mi respuesta, pero simplemente las palabras no me salían.

Al sentir que se alejaba, alcance a escuchar cuando cerraba la puerta.

Salí de la ducha y busque una pijama larga. Hoy no quería salir por lo menos hasta que me sintiera mejor.

Mientras cepillada mi cabello frente al espejo, pude notar que estaba tan perdida en algún lugar del mundo, por lo que parpadeo rápidamente. Me siento en la cama tomando mi celular y al encenderlo vi que tenía tres llamadas perdidas de Iván, por lo que le regreso la llamada.

-¡Hola! Lo siento, ayer salí con mis amigos y no podía contestar. ¿Cómo estas? ¿Cómo la estás pasando?

Silencio, solo había eso.

-¿Vera me escuchas?

-Si, si te escucho.

-Te pregunte que como estabas, ¿todo esta bien?

Pensé las mil maneras de decirle que no, que quería que viniera por mi, pero si le decía, sabía que si les decía serían capaces de dejar todo y venir por mi, sin importarles nada.

Tomo un poco de aire antes de responderle.

-Si, todo está bien, todo ha sido muy divertido, muchas cosas nuevas y he conocido a un grupo de chicos muy amigables.

-Me alegra demasiado que te estés divirtiendo, y más que empieces a Socializar.

-Si.

-Vera lo siento tengo que colgar mañana tengo que levantarme temprano y ya es muy tarde.

No

La vista se me nubla, los ojos se me llenaron de lágrimas al instante, coloco una mano tapando mi boca, no podía permitir que me escuchase. Pero por más que lo intente al apretar los ojos se me escapó un sollozo.

-¿Qué pasa? ¿Estas bien? -preguntó preocupado.

-Si, todo está bien es solo... Que los estoy extrañando un poco.

-No pienses que voy a decir que también me haces falta, y si lo digo quiero que sepas que estoy con mucho sueño a punto de dormirme y no pienso lo que digo.

Sonrió.

-Vale, Dile a mamá y a papá que los quiero mucho, y saluda a la Enana.

-Lo haré.

-Esta bien, descansa.

-Vera, quiero que sepas que si necesitas algo puedes llamarme, o escribirme, aunque no conteste, ahí estaré al pendiente de ti, recuerda que hay días malos pero vendrán días muy buenos, solo Animo todo estará bien.

Solo eso, solo eso faltaba para volver a derrumbarme.

-Te quiero. - dicho esto, me cuelga antes de burlarme de él.

Más allá de la bellezaWhere stories live. Discover now