Estado de Limerencia: Obsesivo y Peligroso +21

Capítulo 1

Muy pocas personas saben esa parte de mi historia, más que nada porque quienes lo saben se encuentran lejos de donde vivo actualmente o están a tres metros bajo tierra. Es imposible que ese dato haya salido de esas personas porque traería como resultado la desgracia y él perder todo por lo que he estado luchando yo para salir adelante después de enterarme.

Estoy molesta porque el mencione algo tan personal como lo es el saber que la que yo suponía era mi madre también sea mi hermana mayor a la cual le encantaba meterse en la cama con mi padre haciendo que de ese maravilloso amor según lo llama ella salga yo. Sé que adora meterse en su cama porque cuando tenía ocho años los escuchaba a través de las paredes de mi cuarto cuando ellos creían que yo estaba dormida, en aquel entonces era una niña feliz la cual amaba a sus padres y soñaba de grande tener un amor como el que ellos dos se demostraban y aun se siguen demostrando. Pero esa fachada se cayó cuando yo tenía quince años.

Era súper tarde, el ensayo se alargó más de la cuenta, logrando que me perdiera la cena con mis padres, cena la cual hacíamos juntos todas las noches sin excepción alguna, solo que en este día es especial debido a que mi padre regresaba de viaje después de una temporada fuera de casa, me despedí de mis compañeras alegando que ya era tarde y debía llegar a mi casa pronto sino mis padres se podrían preocupar.

En el camino, voy pensando en cómo explicarles que el ensayo se demoró por culpa del retraso del maestro y como el director de la escuela de danza lo retuvo una hora más encerrado en su oficina para una charla, como si este no pudiera esperar a que se terminara la clase.

Llego a la puerta de mi casa, introduzco la llave y quito el pasador, abro la puerta y me encuentro con la casa a oscuras, escucho voces en la oficina de papá, dos de ellas me son familiares pero la tercera me es desconocida. Lentamente me acerco para escuchar y saber el motivo de la discusión. Cuando estoy apoyada con mi ojera en la puerta, escucho claramente como la voz desconocida dice.

- Maximus, quiero el divorcio. No quiero y no puedo estar ligada a un monstruo – Dice la voz de una mujer con desagrado y desprecio marcados en ella – No puedo creer que le hayas envenenado la mente a nuestra hija de esta forma y encima me vengas a decir que entre ambos tienen una hija.

- Mamá, no te atrevas a insultar a papá de esta forma – Dice mamá defendiendo a papá de las señales que dice la mujer desconocida.

- Me atrevo porque es lo que es, un degenerado y un enfermo que se acuesta con su propia hija, sangre de su sangre, a escondidas de su esposa en la misma casa después de haber tenido sexo conmigo. A saber desde cuando hace esas cosas contigo. Ahora entiendo el porque te fuiste de casa a los diecisiete años y tu padre te apoyo en todo, te deje ir aun cuando no estaba de acuerdo porque quería que fueras feliz. También entiendo la repentina ausencia de tu padre en casa después de que te fuiste y el que solo me hicieras llamadas o me visitaras muy pocas veces en los últimos quince años Lisbeth.

Salgo de mis pensamientos y mi cuerpo se pone tenso cuando él coloca su mano sobre mi hombro derecho mientras que con la otra el mueve mi cabellera negra hacia un lado, la mano que se encuentra en mi hombro empieza a bajar por el valle de mis prominentes senos, haciendo que yo me tense y que estos se pongan erguidos debido al material de los guantes que él carga, amasa mi seno derecho y empieza a jugar con mi pezón mientras que su mano izquierda empieza a recorrer mi otro seno, pasando por el abdomen hasta llegar a mi monte de venus, roza mi vagina con sus dedos percatándose que no estoy para nada lubricada y que mis piernas también se encuentran en tensión.

Empiezo a moverme de forma brusca, consiguiendo que mis muñecas y tobillos empiecen a doler. Me siento impotente, trato de hablar pero la saliva se escapa de mis labios haciendo que logre ahogarme un poco, quiero gritar y decirle que pare, no quiero esto, quiero que me deje ir pero me resulta imposible.

Las lágrimas salen de mis ojos mientras él sigue tocando mi cuerpo como si le perteneciera, como si yo fuera una muñeca a la cual puede tocar como y cuando le plazca, alterna sus manos de mis pechos a mi vagina tocando todo lo que está a su alcance. Quiero que aleje sus manos de mi cuerpo, no quiero que siga tocándome como lo está haciendo, no quiero volver a sentirme sucia por culpa de otros.

Debido a mis movimientos bruscos por tratar de quitar sus manos de mi cuerpo, una de las manos de él van directamente a mi cuello, causando que me quede quieta gracias a la falta de aire que él ocasiona al apretar mi garganta.

- No siento tu humedad mi pequeña Tahyna – susurra en mi oído logrando que su voz suene aún más terrorífica de lo que se supone era, mientras yo trato de que él quite sus manos de mi cuerpo, sigo haciendo sonidos de protestas y mis palabras no logran entenderse debido a la mordaza – Como me encantaría volver a probar de ese maravilloso elixir que se encuentra entre tus piernas, tocarte, lamerte, chuparte y saborear ese maravilloso botón, hacerte venir como muchas veces lo hice. Como cuando estábamos en tu cama, tú tenías los ojos vendados y estabas amarrada de manos a la cabecera, tus piernas estaban abiertas para mí y yo estaba allí viendo como estabas toda húmeda a la espera de que yo hiciera contigo lo que me viniera en gana ese día.

Debido a mis movimientos bruscos por tratar de quitar sus manos de mi cuerpo, una de las manos de él va directamente a mi cuello, causando que me quede quieta. Gracias a la falta de aire que él me ocasiona al apretar mi garganta me quedo callada dejando de emitir mis protestas y abro los ojos debido a la enorme confesión que él acaba de hacerme, me quedo tensa sopesando la cantidad de personas que tuve en mi cama en un tiempo y con los cuales puede repetir, pero a mi mente solo llegan cinco personas.

¡Hello bellezas de internet!

Acá esta el primer capitulo de esta maravillosa historia.

Espero les haya gustado y como siempre dejen sus votos y comentarios que me encanta leerlos.

¡Los adoro!

Gracias por sumarse a esta aventura.